Capítulo 34 - Fascinada

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Christian no lo pensó dos veces y casi comienza la pelea entre Travis y él, sino fuese sido por Daalón, ya Travis estuviera envuelto en sangre. Pues si antes creíamos que teníamos una posibilidad, pues ahora no creíamos en nada, Crey sabía en donde estaba la otra parte de la clave para abrir el portal y era más que obvio que ya lo estaría buscando.

− ¿Ahora que haremos?-Preguntó Travis en susurro, mirando con cautela a Christian quien aún permanecía inhalando y exhalando aire para tratar de tranquilizarse y no matar a Travis.

− ¿Ahora que haremos?− Insinuando la voz de Travis.-Tú me vas acompañar a Egipcio a buscar el maldito collar.

− ¿Egipcio?-Preguntó Daalón.

− Está cerca de la pirámide Kefrén.

− ¿Pirámides?-Christian asintió.-¿Por qué tienes el talismán allá? Preguntó Daalón tan confuso como yo ¿A quién se le ocurría ir a Egipcio nada más a ocultar un talismán?, ¡Ah si! A Christian Prior y Travis Harris.

− A nadie se le ocurriría buscar ahí, es un lugar seguro.-Christian saco su teléfono y empezó a teclear algo en la pantalla, mire a Yorleska y luego la deslicé hacía Daalón.

- ¿Qué haces? - Pregunto Yorleska hacía Christian.

- Llamó a Erina, necesito que se quede cerca de Elizabeth mientras viajo junto a Travis, no puedo dejarla descuidada, y mucho menos ahora que sé que todas las razas la conocen. − Me dio una mirada preocupada, y luego la deslizó hacía otro lado. - ¿Hola? ¿Erina? - Dijo Christian caminando hacía el balcón de la sala.

- Aún no puedo creer que él maldito idiota me engañara y me hiciera creer que era Christian, con razón me pareció extraña su actitud. - Dijo Travis con su mirada perdida en sus manos, Yorleska paso su mano por el cuello de Travis acariciando de este lentamente.

− Nos engaño a todos, me engaño a mi también. - Dijo Yorleska de consuelo.

Me sentía de una manera extraña; Ahora como sabría quién había sido Christian o no en mi pasado, una extensión de duda se apoderaba de mi completamente, ¿Con quién en realidad estuve todos aquellos días?

-Chicos se que estamos en una situación importante, pero tengo volver al apartamento, mamá debe de estar preocupada. - Yorleska deslizó su mirada hacía mí, sabiendo que ya no quería hablar más nada del tema.

− Sí, tienes razón - Yorleska quito su brazo de Travis y se levanto del sofá acomodándose la camisa y los jeans - Yo voy contigo. - Asentí, y deslicé mi mirada a Daalón, ¿Será que tenía en donde dormir?

- Daalón. - Lo llamé. - ¿Tienes en dónde quedarte? - Le pregunté algo preocupada; él asintió y sonrió.

− Me quedo en un hotel - Asentí levemente, iba a decirle para que Yorleska y yo lo acompañáramos al hotel en el Volkswagen, pero se adelanto antes diciéndome: − Queda cerca de aquí, no te preocupes. - Dijo mirándome con una sonrisa. - Me quedará un rato más con Travis y Christian y me voy. − Asentí aliviada y suspire viendo como Christian caminaba hacía la sala, él ya había dejado de hablar por teléfono y ahora se dirigía hacía mi con una sonrisa.

-Erina llega ahora en la tarde de Nueva York se quedará en mi apartamento. − Informó Christian, lo miré y sonreí.

- Elizabeth y yo nos vamos - Dijo Yorleska antes de que yo hablará.

El Talismán © (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora