𝑫𝒊𝒄𝒊𝒆́𝒏𝒅𝒐𝒎𝒆 𝒄𝒐𝒔𝒂𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒐 𝒔𝒐𝒚, 𝒅𝒊𝒃𝒖𝒋𝒂 𝒖𝒏𝒂 𝒊𝒎𝒂́𝒈𝒆𝒏 𝒇𝒂𝒍𝒔𝒂.
Había perdido la cuenta de cuántas veces lloró, había perdido la cuenta de cuántas veces su cerebro lo torturó, una caja encontró escondida, al parece...
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𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂𝒅𝒐𝒓𝒐𝒎𝒏𝒊𝒔𝒄𝒊𝒆𝒏𝒕𝒆.
Después de esa extraña escena para vegetta y rubius, en un acto de celos parentales vegetta jaló a Quackity para dárselo a rubius, quien lo abrazó cómo un oso a su cria. Quackity ni siquiera se hizo el ofendido ya que sabía que en la casa le iba a caer la regañada por actuar cómo imbécil, luzu solamente veía serio la escena pero en el fondo le daba risa ver esa etapa del matrimonio, el tampoco entendía el por qué de sus acciones, ya que después del divorcio dejó de interesarse en las relaciones amorosas, solamente se había interesado en dos cosas ser el presidente de karmaland y los negocios que tiene con su amigo.
- Bueno vegetta, Al parecer no te hizo gracia lo qué pasó.- dijo mientras soltaba una pequeña risa, ver la cara de enojó de su amigo ,era su mayor satisfacción.- ¿Tú qué crees?, ¿Cómo me va causar gracia que tú y mi bebé estuvieran coquetando, en nuestra cara? ¿Eres tontito?- le comenzó a gritar y mover de los hombros de manera frenética, pero luzu simplemente desvío la mirada para posarla en Quackity, ante sus ojos se veía alguien que si valía la pena, así que le guiñó el ojo de manera discreta.- Ya ya vegetta, solamente estábamos bromeando jamás estaría con tu hijo, así que no te preocupes, además que es menor de edad por obvias razones mucho menos.- aclaró luzu entré risas, hasta que su amigo lo soltó y se cómodo la ropa.
- ¡Hey!, No soy menor de edad, tengo 21 años, así que no soy un niño.- se defendió Quackity, quien aún seguía un poco sonrojado por el guiño del otro hombre.- Ya cállate Quackity, no importa si tienes 21, aún sigues siendo un mocoso.- rubius lo había regañado, estaba lo suficiente avergonzado por lo que había sucedido, mientras que luzu estaba aliviado al parecer no sería llevado preso. Bueno no por ese delito, pero podría ser llevado preso por muchos otros más.
Su lista de delitos era tan grande, pero bueno todos en éste lugar tenían una serie de delitos que eran tan infames ,siempre salían impunes gracias a sus contactos, podrían hacer lo que quisieran y jamás serían detenidos pues para decirlo de una manera más coloquial, ellos son los dueños de la mayoría de cosas, son dioses sobre la tierra que pueden mandar y hacer lo que quieran sin tener un castigo.
Después de un rato dejaron a Quackity sentado en uno de los sillones juntó con rubius, mientras vegetta y luzu hablaban, al parecer estaban haciendo algunos tratos.
𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂 𝑸𝒖𝒂𝒄𝒌𝒊𝒕𝒚.
Estaba completamente aburrido, rubius se había ido hace un rato junto con vegetta y ese tal luzu, aún seguía pensando cómo me iba ir en la casa por la escena que monte junto con el otro hombre, comencé a ver con más atención el lugar era realmente hermoso pero también se me hacía familiar de algún lado, me levanté del sillón para comenzar a caminar por el lugar, entré más me adentraba al sitio tenía que cuidarme de dos cosas, no ser visto y no romper algo.
