Epílogo 2 🍄

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Sherlyn era una persona demasiado vulnerable... tal vez un poco envidiosa. Pero su ambición por el dinero y el poder comenzó cuando tenía 12 años.
Sus padres le decían... no, más bien le exigían que ella se case con alguien con mayor poder en dinero. Tenía tratos feos; maltratos psicológicos.

Su vida no era tan buena, ella quería que se viese como si fuese lo mejor.

A la edad de 16 años, su padre quedaba en banca rota. Así que le exigían que ella tenía que estar junto al hijo de unos de los empresarios mejores pagados de todo México; Sebastián Maldonado.

Alex siempre la trato tan bien, jamás le gritó, nunca le mandaba, estaba para ella en cualquier momento. Sherlyn tenía tanto coraje que no podía agarrarle cariño desde un principio, no pudo...

Tal vez su comportamiento no era el mejor, pues el chico no le interesaba solo estaba con el por conveniencia... Tampoco era la mejor persona para hacer amigos, su comportamiento era un poco cruel... Pero aún así, Alex jamás la juzgó.

-Empecé a tenerle cariño a Alex meses antes de que llegara ella... - Hizo una pausa - Joselín.

- ¿Por qué le tomaste cariño? - Preguntó la doctora.

- Porque jamás me juzgó a pesar de como era. - Contestó.

- ¿Por qué tomaste la decisión de matarla?

Un silencio se quedó en el cuarto, Sherlyn miraba hacia la ventana donde estaban los pacientes junto a sus visitas, era un lindo jardín con una linda fuente de agua.

Porque Alex me hizo sentir lo que mis padres nunca me hicieron sentir.
No quería perderlo, no quería que alguien como ella me quitara la única atención que tenía sobre mi.
A veces, solo a veces quería quedarme junto a él y estar siempre con él. Y también, a veces solo quería olvidarme del maldito dinero y ser feliz, tener amigos y contar con muchas diversiones.

Quería que sus amigos también me miraran cómo a ella, que Tina o Abril me ayudarán a escoger algún vestido, me ayudarán a maquillarme en alguna cita... Pero no era así, era juzgada y Alex siempre me defendía.

Me enamoré completamente de él a mis 18 años, pero no quería que mi padre siguiera con el plan de quitarle todo el dinero al señor Sebastián ni a la señora Lucía... Así que fui a mi casa, decidida a detenerlo.

Pero fue en vano, solo gané que me golpeara y humillara cómo siempre.

-“¿!Estás loca, Sherlyn!?” - Su padre gritó tras haberle dado una bofetada.

- ¡Tu eres el loco! Te he dicho que no quiero seguir. Papá, por favor, entiende. Estoy enamorada - Sherlyn lloraba, mientras estaba en el suelo el golpe había sido tan fuerte.

- ¡No Sherlyn! ¡El amor no existe!

- Si existe....

Su padre la miró, estaba tirada en el suelo limpiando sus lágrimas. Se agachó en cuclillas, quitando las lágrimas de sus ojos.

- Cielo... El amor no existe, en este mundo solo hay ambición, peligro y la locura que causa el dinero... No puedes vivir del amor, no lo puedes - Este acaricio su mejilla - Si tú no lo haces, entonces de verdad estaremos en la calle y todos los de tu escuela se van a burlar de ti por no tener dinero. Es por eso que debemos seguir, se que eres buena hija porque lo eres, ¿Verdad?

AGAIN - QUACKITY Donde viven las historias. Descúbrelo ahora