AGAIN - QUACKITY

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Alex y Joselín salieron del centro comercial, la parte del estacionamiento.
Alex se recargó en el carro cerrando sus ojos, Joselín se sentía mal por él pero seguía enojada.

- ¿Que hago mal? - Dijo en voz baja.

Ella lo siguió mirando sin decir nada, ver a Alex llorar era cosa nueva en estos tiempos.

- Te saque de allí, no quería que te involucrará en esto - Alex susurró.

- Descuida, no pasa nada - Joselín suspiró, pensando en si decirle o no lo de aquella vez.

- Tenías razón, Sherlyn es una mala persona que solo busca su felicidad y no se preocupan por nadie más. - Alex abrió el coche así arrancando y dejándola allí.

Ya no se iba a preocupar demasiado, después de que ella le había advertido sobre Sherlyn y este nunca hizo caso.

Caminó hacia la salida tomando un Uber para ir a su departamento, una vez llegando estaban George y Tina riendo sentados en el sofá.

- He llegado, y traje comida coreana - Alzó la bolsa mostrando el producto.

- Te tardaste un poco, pensamos que ya te habías ido a hacer la tienda. - George se paró a estirarse.

- ¿Y bueno? - Joselín se quedó mirando como George sostenía la mano de Tina.

- Tina y yo comenzamos a salir oficialmente como novios. - Anunció el varón sonriendo.

Joselín estaba sorprendida por el hecho de que se hicieron pareja, mirando felizmente a Tina la cuál se le veía muy alegre y sonriente.

- ¡Wow! ¡Muchas felicidades! - Fue a abrazarlos a los dos.

Joselín preparó la cena y después todos cenaron platicando en qué mañana George las llevaría hasta las Vegas donde se haría la boda de Abril y Juan.

Ya eran las 2:40 de la madrugada, Joselín no podía dormir ya que seguían empacando sus cosas, había estado viendo vídeos distrayendo se que olvidó poner algunas cosas en su maleta. Terminó de bañarse, apunto de irse a dormir hasta que la puerta sonó. De esas veces que piensas que estás loca y vuelves a seccionar de que lo que escuchas es realidad, y sí, la puerta volvió a sonar.

Su corazón latió con velocidad, a saber por qué, camino con miedo preguntándose ¿Quién habrá tocado? acercándose y la puerta sonó nuevamente, dando un brinco asustada miró por el lente de la puerta.  Alex estaba recargado en la puerta, abrió sin pensarlo preocupada.

- Alexis, ¿Que haces aquí?

Este solo la abrazó echándose encima de ella, el olor a alcohol atacó las fosas nasales de Joselín.

- ¿Conduciste en estas condiciones, Alexis?

- Tu tampoco me vas a dejar Joselín, no me dejes otra vez por favor, quiero estar contigo. Te quise buscar pero no pude después de lo que me dijiste, quería una respuesta pero fui cobarde al pensar que no me amabas así como yo a ti - Alex comenzaba a llorar.

El corazón de Joselín latía a grandes velocidades, ya no sabía si su presión subía o bajaba. ¿Alex también la amó?

- Alexis, estás demasiado borracho que ya no sabes lo que dices. - Lo sostuvo fuerte dejándolo en el sillón.

- No me dejes por favor, quiero volver a estar contigo. Dormir contigo, sentir tu piel junto a la mía y mirarte cada mañana así como antes, quiero abrazarte y tengo ganas de besarte - No paraba de llorar y se aferraba al brazo de Joselín.

- Ya para Alexis. No es gracioso para mi, estás borracho y prefiero hablarlo cuando estés en un mejor estado y no en ebriedad.

- ¿Puedo dormir contigo? - Este le dijo.