Enséñame que soy importante |• KookMin

Capítulo 13

"Me preguntó si las estrellas se iluminan con el fin de que algún día, cada uno pueda encontrar la suya"
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Jimin se sentía extraño. Se pregunto si así era como las personas se sentían al encontrarse con personas cálidas que sonreían libremente sin causar daño a otros.

La señora Jeon, había horneado galletas para ambos, Soyeon menciono que llamaban a Jungkook de esa forma  porque su nombre sonaba parecido. Jungkook paso la tarde avergonzado gracias a su familia.
J

imin comenzó a tomar un poco de confianza y hasta jugo con Soyeon quién no quería alejarse de él en ningún momento. Ella no paraba de decirle que era demasiado lindo y que si la esperaba unos años, sería la pareja más bonita del mundo.

Todos reían por los dichos de la pequeña, todo menos Jungkook.

Al comienzo, el padre de Jungkook le causó algo de miedo, era alto y lucía serio. Jimin se sintió intimidado, pero eso cambio cuando él le sonrió amable y lo felicito cuando Jungkook le contó que era el más inteligente de su salón.

[...]

— Me disculpó si fueron muy efusivos, ellos son así cada vez que llevo a alguien a casa — dijo Jungkook.

Se había ofrecido a llevar a Jimin a su casa, aunque tuvo que estacionar una cuadra antes por pedido del mismo.

— Fue divertido — susurro Jimin volteando a ver al pelinegro — Yo...me divertí mucho, gracias.

Jungkook sonrió y lo quedo viendo pensando en lo que diría a continuación.

— No deberías avergonzarte — continuó Jimin — Tu familia es increíble.

— Lo son, aunque a veces cansa — rió, pero el rubio no lo acompañó.

— Supongo que a veces puede ser cansado, pero al menos sabes que están allí — miro al frente — Imagina que un despiertes y ellos no estén allí, que las cosas ya no sean como antes, eso sería demasiado...

— ¿Doloroso? — preguntó Jungkook.

— Si — sonrió con tristeza Jimin — Cuando te sientas cansado, solo imagina el no verlos, él no tener a tu madre preparando algo delicioso para ti, o a tu padre llevándote de paseó sobre su espalda. Imagina estar solo sin ellos...

Jungkook lo observó con una opresión en su pecho, cuánto daño le habían causado a ese tierno corazón para que dijera todo eso con tanto dolor. La tristeza en los ojos de Jimin era como un golpe en el alma.

— Cuando eso pase… — continuó Jimin, su voz apenas audible — Vas a sentirte realmente mal… tanto así que desearás regresar el tiempo atrás y valorar a esas personas más de lo debido.

Jungkook sintió un nudo en la garganta y completó la frase:

— Pero no podrás.

Jimin levantó la mirada, sus ojos llenos de lágrimas.

— Kook.

— ¿Sí? — respondió Jungkook, su voz suave.

Jimin respiró profundamente antes de confesar:

— Extraño a papá… extraño mucho a mamá — observando sus manos en su regazo, echas puños — Extraño ser feliz… y tengo miedo de no poder serlo jamás.

La vulnerabilidad de Jimin era como un abismo que Jungkook quería llenar con su presencia.

Jimin nunca imaginó que hablaría con alguien de algo así, jamás imaginó que esa persona dispuesta a escucharlo sería Jeon Jungkook, ese compañero de clase con el que jamás cruzó palabra alguna. Pero en ese momento, Jimin sintió que no estaba solo. Ahora tenía a alguien para que escuchara lo que quería decir.