Bad girl (Troy Bolton)

Capitulo 28

Las llamas habían cedido un poco, ese había sido un fin de semana loco.

Pero todo parecía más calmado, los diablos no habían aparecido, y Maya no había visto a sus amigos desde el día de la carrera.

Se encontraba en casa, con su madre como cualquier fin de semana, solo que esta semana se encontraba Jughead con ellos, después de que Archie llamará a la policía, este tenía miedo de que cobraran venganza contra alguno, entonces paso la mayoría del fin de semana en la casa de la morena.

Y la verdad que a Melissa no le molestaba para nada que el pelinegro estuviera con ellas, pues lo quería casi como a un hijo y agradecía infinitamente que cuidará a Maya.

-¿Vamos por algo de cenar a Pop's?- preguntó tranquilamente el pelinegro.

-Si, estaría bien- respondió Melissa, -Pero que les parece si... ustedes van, traen la cena, y comemos aquí viendo una película- sugirió la mayor.

-Me parece bien- contestó Maya, Jughead se limitó a asentir con una pequeña sonrisa.

Chad, Gabriella, Troy y Taylor, se encontraban tomando unas malteadas en Pop's, esa cafetería especial, donde hacen rica comida, donde es un lugar cómodo, el refugio de muchos adolescentes.

Troy mentiría si dijera que estar con Gabriella no es incómodo, pues vaya que lo es, estos terminaron de una manera tan repentinamente, que ni si quiera pudieron terminar de descifrar sus sentimientos, es como si de un día a otro, sus sentimientos hubieran cambiado y volado a direcciones completamente opuestas.

-Fue una locura- dijo Chad en voz baja, interrumpiendo el discurso mental de Troy.

Todos voltearon hacia el con una mirada interrogativa, preguntando a que se refería.

-Lo de Maya...- susurró.

Taylor resoplo, Gabriella bajo la cabeza y Troy se recargó completamente en el asiento.

-Fue más que una locura- dijo Gabriella poniendo la cabeza en alto -Fue ilegal, fue malo, fue peligroso... Maya no puede ir haciendo esas cosas por la vida, va a terminar en problemas- reprochó la morena.

-Igual, no sabemos por que lo hicieron, digo, alguna buena razón tenían que tener para hacer esa carrera- dijo Troy -Además, no lo hizo solo Maya, fueron las serpientes... y ese Jughead- dijo, acentuando el final con un tono desagradable.

-Hablando del rey de Roma- dijo Taylor en voz baja, al sonar la campanilla, y que Jughead entre por la puerta.

Todos voltearon hacia su dirección, y vieron a Maya entrar unos segundos después.

Se acercaron a la barra, Maya se sentó en uno de los bancos y Jughead se quedó parado a su lado, los vieron ordenar, y posteriormente a Maya volterase aún sentada en el banquillo, dándole la espalda a la barra, Jughead se volteó igualmente recargando sus brazos en la barra.

Empezaron a conversar entre ellos, los Linces no sabían si acercarse o no.

Al final, optaron por mirar solo un rato más, dentro de la conversación de los serpientes, vieron como Maya tomaba su cabello y señalaba algo de este, Jughead por inercia, tomó el cabello de la chica, lo que hizo que quedara aún más cerca de ella.

En ese momento Troy se levantó, sus amigos Linces lo hicieron también, y caminaron hacia ellos, Jughead al darse cuenta rodó los ojos, y se puso delante de Maya, probablemente estaban enojados por lo de la carrera.

Al llegar Troy se acercó peligrosamente a Jughead, pero Chad lo jaló para atrás antes de que algo pudiera pasar, Maya se levanto -¿Paso algo?-.

-Solo queríamos saber si estabas bien May- dijo en voz baja Gabriella.

-Estoy bien, gracias, no se preocupen por mí- se dirigió Maya a todo el grupo.

-Es imposible no preocuparse por ti, eres nuestra amiga- declaró ahora Taylor -Y las cosas en las que te metes... no son muy seguras- dijo haciendo mención a la carrera.

-Maya siempre saldrá impune de todas esas cosas, yo me encargo de ello- dijo Jughead admitiendo la responsabilidad por Maya.

Todos voltearon hacia el, incluso Maya, la chica no pudo evitar dirigirle una pequeña sonrisa al pelinegro, pues era cierto, de diez problemas en los que Maya se metía, Jughead la sacaba de once.

Después de ello, nadie decía nada el ambiente se hizo muy incómodo, Maya se posicionó detrás de Jughead, y apretó un poco su chaqueta por detrás, Jughead entendió que la chica se sentía incómoda, y quería irse, entonces llevo una mano detrás de su espalda, y la puso encima de una mano de la chica, le dió un apretón tratando de tranquilizarla, pero lo único que pudo tranquilizar a Maya, fue que su pedido estaba listo, el señor encargado se lo entregó amablemente y ella agradeció, salió de detrás  de Jughead.

-Bueno chicos, lo siento, tenemos que irnos- dijo rápidamente hacia su grupo de amigos -Tenemos que llevar esto a casa- mencionó mientras levantaba el pedido.

-Nos vemos en la escuela- Maya no dejó que nadie dijera nada más, pues tomó la mano de Jughead, y lo arrastró hacia la salida.

Por mas que la mayoría de las cosas se habían calmado, los Linces seguían ciertamente un poco tensos, por todo el conflicto con Maya.

Siendo de lo más sincera Maya incluso había tratado de evitar a sus compañeros, se estaba tornando un poco raro estar con ellos, no quería dejarlos de lado, pero tenía muchas mejores cosas que pensar en ese momento.

Hasta ahora, los momentos que había pasado con Troy era algo que invadía su mente descaradamente.

'Hablando del rey de Roma ' Pensó al verlo pasar por los pasillos, sus miradas se encontraron furtivamente, Troy hizo un movimiento con la cabeza, apuntando hacia un aula, aclarando que quería entrar con Maya ahí, y hablar con ella, Maya asintió con la cabeza y ambos entraron al salón vacío.

-¿Sigues enojado por lo de la carrera?- preguntó Maya suavemente -Escucha, lo hicimos por una buena razón, los diablos iban a tomar el Whiteworm a la fuerza, la única manera que encontramos de evitarlo, fue hacerlo más interesantes, apostamos por el Whitewrom en la carrera- explicó rápidamente Maya, mientras Troy escuchaba con atención.

El ligero ceño fruncido del chico se suavizo.

-No...- respondió cabizbajo el rubio -Entiendo, estabas luchando porque algo que amas, tal vez no de la forma correcta, pero esta bien, ya no estoy enojado. Nunca lo estuve completamente, solo estaba preocupado por ti-.

Un impulso que ni Maya supo de donde salió empujo a la chica hacia Troy, sujetándole del cuello y besándolo, el chico correspondió gustosamente y la tomo de la cintura para acercarla hacia el.