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Capitulo 16 - Atlantis.

Me desperté, Steve me estaba abrazando, la verdad, empiezo a dudar ¿Y si tal vez le gusto? No lo se, le va muy mal en el amor.

En fin, escuché como venía Robin, así que intentando sacar a Steve de abrazarme, ella llegó.

– ¿Que?

– Ayuda.– Dije en voz baja.

– Pero...

– Ayúdame a quitarme a Steve de encima hija de tu mamá.

– Ya, ya.

Se acercó y quitó a Steve, literalmente es la persona mas bruta que conocí.

– Vístete, vamos a desayunar, hoy tengo trabajo así que...

– Yo tengo que ir a casa, así que, bueno...

– Si, cierto.

Entré al baño, me cambié, me lavé la cara y salí, me senté en la mesa con Robin y desayunamos, al rato fuí a despertar a Steve, ya que Robin no lo pensaba despertar.

Fuí a la habitación, entré, me subí a la cama y me acerque a el.

– Steve...– Le dije en voz baja.– Levántate hijo de tu mama.

– Mmh, un ratito mas...

– No dale, que tenes que ir a trabajar.

– Ahí voy.– Dijo medio dormido.

– Bueno, yo te espero.

Me levante de la cama, fuí a la sala y me senté junto a Robin en el sofá.

– ¿Ya?

– Si, creeme, pensé que sería mas difícil.

– Mmh...– Miró mis manos.– ¿Que te pasó ahí? – Me señalo mi herida.

– Oh, no es nada, sólo me hice mal.

– Okay, eso espero.

Le sonreí y fuí a la habitación, me puse mi ropa, tomé mis cosas, salí de la habitación, me despedí de Robin, le prometí ir al family video a verla hoy, mañana había clases.

– Chau Robin.

– ¿Ya te vas linda?

– Si, si no, mama me matará, sabes como es.

– Si, bueno...– Se levantó del sofá, se acercó a mi y me dió un corto beso, y se despidió de mi con un abrazo largo.– No quiero que te vayas.

– Te veré en tu trabajo, no te preocupes.

– Esta bien, chau linda.

– Chau Rob.

Abrí la puerta y me fuí, en realidad primero no fuí a casa fuí a un parque, ahí me iba a recojer Nancy.

Al rato llegó me subí al auto, en ese ratito, solo me miró.

– ¿Que te pasó en el cuello? ¿Quien te golpeó?

– ¿Eh? – Me miré en el espejo del auto.– Mierda.

– ¿Que? ¿Quien fue?

– Fue Robin...

– Oh, ya entendí, entonces...

– Ni lo pienses Nancy, no hicimos nada.

– ¿Y entonces que te pasó ahí?

– Bueno, tal vez si hicimos algo pero no es lo que piensas.

– Eso espero, y espero que mama no se de cuenta, te matará, le dije que vendría a buscarte así que, te esta esperando en casa.

– ¡Mierda!