The side [ Lgbt+ ]

Capítulo 32 -

Al despertar, me cambié de ropa y salí en camino a la casa de Eddie, necesitaba hablar con él y aclarar las cosas.
Al llegar a su casa el me recibió y me invito a su habitación, yo pasé con gusto y me senté en su cama, él se sentó junto a mi.

— Eddie...yo necs‐.— Él me besó, pero le detuve el beso de inmediato. — Eddie, te voy a decir la verdad, yo no quiero nada con vos.

— ¿Qué? Yo nunca dije que quería algo con vos.

— No, pero me estás besando y por lo de la otra vez...

— Oh, si, por lo de la otra vez...¿lo hice bien?

— Ay, bueno, si.

— Ah, perfecto...bueno, si no quieres nada conmigo podemos quedar como amigos, o no sé, eso si, si quieres algo de mi, yo te lo daré con todo gusto.

— Ouh, bueno, gracias.— Sonreí.

— Si, ¿quieres ir a dar un paseo?

— Bueno, vamos.— Le volví a sonreír.

Él se cambió de ropa mientras yo lo esperaba afuera, cuando el salió caminamos hasta el parque.

Me senté en una banca y el se sentó junto a mi.— Me gusta venir al parque.— Dije, mirando a los niños jugar en los juegos.

—¿Por? — Preguntó y me miró.

— Los niños, son tan lindos.— lo miré.

— Bueno, pero al parecer no quieres tener hijos.

— ¿Qué? Si quiero tener hijos, es lo que más quiero.

— ¿Y porque no estas conmigo?

— Eddie, yo estoy con...em

— Oh, con Robin ¿Verdad?

— Si, es la chica perfecta.

— Al menos compartimos mismos gustos.

— ¿Te gusta Robin?

— No tonta, el gusto hacía las chicas, obvio, nunca me fijaría en Robin.

— Oh, vale, vale.

Pasamos una hora o por ahí más o menos, me fuí y él se quedó allí.
Fuí a casa en donde Robin me esperaba, cuando entré la vi sentada en el sofá se veía enojada.

— Hola Stephany.

— Uhm...— Deje mi bolso en la mesa y me acerqué a ella.—¿Que sucede?

— ¿Que, que sucede? — Me miró enfadada.— ¡Que no es obvio! — Me gritó.

Me asusté, mis ojos se llenaron de lágrimas, no quería pestañas para no soltar una lagrima, no quería verme débil.

— ¡Por dios Stephany! — Se paró, quedando frente a mí. — ¿Crees que no me enteraría?

— Y-yo...Robin, puedo explicarlo.— Me hice bolita, ocultandome de ella.

— ¡No quiero explicaciones! — Me grito.

Estaba llorando, Robin me tomó de la muñeca y me llevó a la habitación.

— ¡Ey! ¿Estás bien? — Preguntó Eddie.

— ¿Eh? ¿Que pasó? — Dije mirando para todos lado, aunque mi vista estaba totalmente nublada.

— Te desmayaste, estás en mi casa, no te preocupes.

— Ouh, mejor si, tengo que ir a casa.

— ¿Qué? Ahora te tienes que quedar aquí.

— No, necesito hablar con Robin.