DERROCANDO AL REY | TPN •NORRAY•

•❀•|CAPITULO 17 - DUELE|•❀•

«Ese bastardo, se atrevió a meterse con el»

—Mi señor... Por favor.

«¡Ese bastardo lo pagará caro por haberle puesto las manos encima!»

—Eso... Duele.

Apesar de que los quejidos de dolor de Ray se escuchaban fuertemente Norman no podía salir de sus pensamientos, ni siquiera sabia lo que estaba haciendo, solo quería borrar las marcas que el rey había dejado en ray.

«De verdad lo va a pagar»

Ray fue despojado de toda su ropa y justo cuando Norman se acercó para besarlo fue que vio su estado.

—Ya va a acabar... Ya va a acabar...— Ray lloraba sin consuelo, tenía su brazo derecho cubriendo sus ojos para no ver las atrocidades que haría con su cuerpo y su brazo izquierdo estaba arriba de su cabeza para que no estorbara mediante Norman se moviera.

Ray mordía sus labios tratando de no gritar, Norman estaba aterrado al verlo, estaba cubierto de chupones, tenía mordidas profundas de las cuales la sangre brotaba sin parar manchando toda la cama, su cuerpo estaba totalmente empapado de agua y temblaba sin parar, tal vez por el frío o tal vez por el miedo que sentía al saber que su cuerpo iba a ser violentado de la peor manera por un idiota que no pudo controlar sus emociones a tiempo.

—Que he hecho— al fin Norman volvió en si, se levantó de encima de Ray viéndolo claramente, Ray aún lloraba y justo cuando Norman se alejo Ray dejo ver sus ojos, estaban hinchados y las lágrimas no paraban de brotar.

—¿Mi señor?

—Que te hice...— Norman siguió retrocediendo hasta que choco con uno de los muebles tirando un espejo pequeño el cual se rompió en mil pedazos —¡¿Que mierda hice?!

—Mi señor— Ray se levantó como pudo de la cama, seguía asustado y apesar de sentir aún un miedo incontrolable por todo su cuerpo sin mencionar el dolor y ardor de sus heridas, se levantó para tratar de calmar a su salvador —Yo... Estoy bien, ¿Lo ve?

Ray se cubrió con la camisa de Norman tratando de ocultar todo el desastre que le había hecho, pero ya que la tela de la camisa era de un color claro la sangre se podía transparentar aterrando a Norman.

—No te acerques— Norman se alejo un poco al ver qué Ray aún temblaba, la sangre resbalaba por sus piernas que temblaban con cada paso —Yo... Estuve a punto de..

—Fue, un accidente.

—¿Un accidente? ¡¿Cómo va a ser esto un puto accidente?!— Norman se había exaltado y por el grito que dio Ray se había asustado retrocediendo un poco cayendo al suelo cortándose parte de las piernas y de las palmas de las manos con los pedazos del espejo del suelo —¡Ray!

Al verlo en el suelo Norman se quiso acercar a ayudar pero cuando iba a poner una mano encima de Ray, el lo evadió golpeando su mano.

—Yo... Lo siento mucho, ¡No era mi intención pegarle!— Ray se puso de pie pero el dolor era incontrolable así que casi caía al suelo pero Norman reacciono ayudándolo

Ray sentía los cálidos brazos de Norman tomarlo, recordó con nostalgia todas la veces que Norman lo había tomado delicadamente contra el para calmarlo, el miedo se empezaba a ir y se empezaba a sentir más calmado.

—Iré por alguien para que te cure— Norman dejo a Ray en la cama listo para salir, quería alejarse de el, tenía miedo de hacerle más daño.

—¡No te vayas!— pero antes de dar vuelta Ray lo abrazo fuertemente hacia el para detenerlo —Tengo miedo... No me dejes... No me dejes solo.

Norman comenzó a llorar al ver a Ray en ese estado, apesar de lo que le había hecho aún estaba ahí, suplicando por el. Lo había dañado tanto física como psicológicamente y aún así Ray aún tenia la fuerza necesaria para aferrarse a el y suplicarle por qué se quedará a su lado, si lo hacía iba a ser un maldito, no se merecía ese abrazo, no se merecía su compasión, lo único que Norman pensaba que se merecía era una buena golpiza hasta quedar inconsciente y eso se quedaba corto comparado con el castigo que el debería recibir.

—No lo merezco... No te merezco Ray...— Norman trato de separarse pero Ray se aferraba cada vez más a el empezando a llorar de forma desconsolada —Por favor, alguien debe revisar tus heridas...

—No te vayas... No quiero que me dejes aquí solo— Ray tomo más fuerte de Norman mientras su cuerpo temblaba de miedo por la idea de que Norman lo dejara solo, lo que menos quería en ese momento era estar en un cuarto vacío el cual le recordara a cada segundo el insoportable terror que había vivido antes —Quedate a mi lado... Te necesito, Norman... 

Norman al fin correspondió el abrazo de Ray aferrándose a el mientras ambos dejaba salir su llanto.

—Lo siento mucho... ¡Lo siento mucho Ray! ¡Perdoname!

Durante varios minutos los lloriqueos de ambos se habían escuchado sin parar. Ray estaba sentado en la cana mientras veía como Norman curaba las heridas de sus piernas. Su cuerpo ya no temblaba por el miedo, se sentia mas tranquilo y su estabilidad estaba volviendo.

•—Que ni siquiera se te pase por la cabeza el perdonar a este bastardo•

O eso creía.

•—El y el rey lo pagarán caro, pagarán con su propia sangre•

Detrás de la puerta del cuarto de Norman, dos de los encargados del palacio permanecían sentados mientras esperaban. Ya había pasado mucho tiempo y aún se sentían preocupados.

—¿No crees que deberíamos entrar?

—¡Ni loca!— Anna se acercó a Nat tomando sus manos —Tiene horas que los dejamos de escuchar llorar, también estoy preocupada pero si invadimos la privacidad del rey nos costará caro.

—Pero nuestro señor Norman es muy comprensivo, seguro nos perdonará, solo queremos saber si están bien.

—Tambien quiero saberlo, pero de ellos he aprendido que es mejor esperar a que salgan y terminen sus cosas— Anna se sonrojo un momento, claramente no era la primera vez que escuchaba una pelea entre Ray y Norman y ella ya sabía cómo termanban las cosas.

—Espero que el señor Ray se encuentre bien.