DERROCANDO AL REY | TPN •NORRAY•

•❀•|CAPITULO 64 - PAZ|•❀•

La vestimenta negra, el clima frío y los pequeños sollozos de llanto de algunos invitados era el escenario que se presenciaba esa tarde, eran las dos de la tarde cuando todo estaba listo y Norman estaba en primera fila junto a Ray mientras el gran ataúd frente a el iba bajando de poco en poco anunciando el entierro de su hermano.

—Ahora, pido a todos que guarden silencio y recuerden al príncipe por la gran persona que fue— Ray cerro los ojos, no podía recordar algo bueno de James, a decir verdad era el que más lo atormentaba y le daba problemas.

«A decir verdad estoy feliz de que este muerto»

Todos tenía los ojos cerrados, incluido a Norman se le podían notar las lágrimas que salían de sus ojos.

«¿De verdad le importaba tanto ese bastardo? ¿No ha olvidado lo que trataron de hacerme?»

•—Tu está confiando en un bastardo que asesino al hijo del segundo comandante de armada, no creo que estes en posición de si quiera pensar eso•

Ray miró de reojo a Nat quién estaba entre toda la multitud tomando la mano de Anna para mantenerla con calma.

«Sigue alterada»

•—Fue quién descubrió sus cuerpos, obviamente para una niña tan tierna y dulce como ella fue un shock total•

Ray suspiro volteando nuevamente a ver a Norman, a decir verdad se sentía agitado y odiaba la idea de estar ahí, pero odiaba aún mas el hecho de que la mayoría de ahí le lloraba a James como si de verdad hubiera hecho algo bueno con su vida.

«El solo fue un bastardo, no se que le lloran. Les aseguro que ni siquiera habían tenido una conversación mas larga a cinco minutos con el»

Ray estaba tan molesto, pero no quería dejar a Norman solo en ese momento. Aún así, cuando el ataúd empezó a llegar al fondo y la tierra empezó a ser tirada para cubrirlo, un pequeño picor tocó su cabeza, había empezado a punzar con fuerza mientras pequeños fragmentos del entierro de su padre y madre volvían a su cabeza.

—Mierda...— Ray tomo su cabeza tratando de resistir lo, pero Norman se había dado cuenta de lo que le pasaba a espaldas suyas.

—¿Que pasa? ¿Estás bien?

—Su majestad, no es nada— Norman se acercó hasta Ray para tomar su cabeza. Los ojos de Norman no se apartaban de el y los murmullos de la gente empezaban a ser más fuertes y notorios cosa que podía meter a ambos en problemas —Solo debo ir y tomar un poco de aire fresco, tranquilo.

—Ire contigo.

—No, lo mejor es que no sea asi— Norman entendió las palabras de Ray dándole la espalda para que el saliera con total libertad hacia un lugar con menos gente y para poder calmar el dolor de su cabeza.

Aún así, Ray no sabía de que manera habia logrado llegar hasta las puertas del reino y ahora se encontraba caminando por los pasillos mientras tarareaba aquella canción que Norman le cantaba a veces para dormir.

•—Ahora que están todos fuera, ¿No sería perfecto el poder hablar con el rey a solas?•

Ya se encontraba cerca, Ray no dudaría nuevamente, haría exactamente lo que su cabeza le decía en ese momento. Caminaba mientras su tarareo continuaba pensando solo en una cosa. Al ser hijo del rey entonces el también tenía derechos y por supuesto que los reclamaría.

•—Esta es la gran oportunidad que necesitábamos•

—El trono pronto será mío— Su sonrisa daba mucho que decir, estaba tan radiante, como nunca se había visto, todas las damas lo veían mientras caminaba, era un chico apuesto y con esa sonrisa en su cara lo era aún más.