¿Qué me está ocurriendo?

320 37 1
                                    


Los días pasaban en un abrir y cerrar de ojos, y desde aquella vez las cosas estaban mejorando poco a poco en la vida del rubio Capitán, obviamente como es obvio no podían faltar los bajones, pero ahora tenía a sus hijos, Bucky, su madre para apoyarlo a seguir y aquella pulsera que formaba parte de Jonathan.

Las sesiones con el psicólogo que aunque al principio le fueron un poco difícil, le estaban ayudando mucho, pues estaba empezando a sentir como se liberaba poco a poco de aquellas cadenas que tenía atadas a él.

Simplemente todo estaba empezando a florecer en la vida de Steve, ahora sí estaba saliendo ese bello arcoíris después de aquella horrible tormenta. Por fin esas cicatrices invisibles que le eran muy difíciles de curar se estaban cerrando lentamente, pero aunque sanaran, siempre estarían ahí como un recuerdo, un recuerdo de lo que implicó su vida, porque siempre va haber heridas que aunque nunca se ven en el cuerpo, son más profundas y dolorosas que cualquiera que sangre.

★★★

Sabía que ya les quedaba poco tiempo a mi madre y mini yo, porque aunque Stark y Scott no hayan dicho nada acerca de la máquina, yo sabía que ya estaba terminada, lo único que me extrañaba era el porqué lo mantenían en secreto, pero bueno ahorita lo importante era hacer feliz a mi madre y a mí técnicamente.

Es por ello que los chicos no paraba en hacerlos sentir seguros. Actividades, reuniones, entre otras cosas más se hacían a diario y todos juntos con tal de pasar momentos divertidos, y a decir verdad estaba feliz con eso.

Es así como ahora estamos todos preparando lo que al parecer será una noche de películas. De arriba abajo nos movimos trayendo lo indispensable hasta ya tener todo listo.

- ¿Le gustaría quedarse Señor Stark?- oí decir con entusiasmo a mi mini versión. Eso llamó mi atención y dirigí mi mirada hacia Stark, esperando a ver cuál sería su respuesta.

Porqué lo había notado, éste junto con mi otro yo se llevaban bien al igual que con mi madre, hasta el punto en que en actividades llegó a quedarse por él. Entonces lo entendí, lo único que odiaba era mi versión adulta.

Stark de estar viendo a mi versión y dirigirle una mirada rápida a todos, por último topó su mirada con la mía. Y aunque no duró mucho ese contacto ya que yo preferí voltear hacia otro lado, en aquellos pequeños segundos pude descifrar lo que quería transmitir, es como si me estuviera pidiendo ¿Permiso? para quedarse.

- Yo.... Este....-

- Vamos Señor Stark estarán todos, solamente faltaría usted- ánimo mi madre- ¿Verdad hijo?- con un pequeño golpeteo en mi brazo, mi madre llamó mi atención.

Entonces ahora yo tenía las miradas de todos esperando mi aprobación.

- Si está bien- dije sin importancia.

- Está bien- terminó aceptando rápidamente como si sólo estuviera esperando mi aprobación.

- ¡Bien, todos a sus lugares que ya la función está por comenzar!- avisó Natasha al momento en que tomaba asiento junto a Bucky.

Al estar todos acomodados entre las cobijas y cojines que hacían en el suelo, se dió inicio a la película.

- Recuerdas la noche de brujas del año 30- me susurró Bucky que estaba en mi lado derecho al ver la intro de lo que era una película de terror.

- Cuando nos comimos todos los caramelos de esa noche en la pijamada que tuvimos dónde mi madre nos prohibió ver películas de terror, que obviamente terminamos viendo ya que ella no se daría cuenta porque tenía doble turno en el hospital. Entonces en la madrugada cuando estábamos a punto de dormir empezamos a escuchar ruidos, y nos asustamos pensando que era la maldición del fantasma que venía por nosotros, pero terminó siendo un gato que se coló por la ventana, y al día siguiente amanecimos con dolor de estómago por culpa de los caramelos- narre con simpleza en voz baja recordando perfectamente todo lo sucedido de aquél día como si apenas hubiese sido ayer- Si lo recuerdo perfectamente-

Tu PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora