四十六

9.5K 1.4K 250
                                    

— ¿Qué? No, Yoongi, no tienes que hacer eso.

Él primero y único en dar un salto ante las palabras de Yoongi fue Jimin. Dio un respingo sorprendido y aquello hizo que Yoongi dejara de acariciarlo por sus movimientos. Era un omega alterado. Realmente alterado. 

— Escucha tu no tienes que hacer esto, no te lo estoy pidiendo, ¿bien? Yo soy quien no quiere tener cachorros, ¿Entiendes lo que digo? ¿Por qué dices esas cosas? No es algo que debas tomar a la ligera, Joder. - Jimin parecía fuera de sí, demasiado para ser una decisión que estaba fuera de sus manos. 

"Joder es una mala palabra, Jiminnie." Escucho en su cabeza con la voz de Yoongi.

A Yoongi le resultaba mitad divertido y mitad adorable ver a Jimin exaltado y moviendo sus manos por una decisión que ya estaba tomada y por la que no volvería atrás.

— Tu no quieres cachorros pero ¿Me vas a dejar tener cachorros con otro omega? — Yoongi preguntó con una sonrisa ladina en sus labios sin dejar de mirar a Jimin y este se calló de inmediato. El que calla, otorga.— eso creí, dulzura.

Dentro de Jimin su corazón se apretaba en su pecho y su estómago daba un vuelco horrendo de solo pensarlo. Sabía cual era el punto de Yoongi al soltar aquel comentario, pero en definitiva ahora estaba molesto, asqueado y sentía que tenía que reclamarle a Yoongi incluso si la situación era hipotética y ni siquiera existía. 

— B-bueno, creo que los dejaremos solos solo unos minutos para que decidan esto. — Y normalmente, Hoseok no diría aquello. Él haría la voluntad de su paciente, pero ahora esto parecía tener un trasfondo aún más significativo, por lo que los tres abandonaron la sala en silencio. Jungkook cerró la puerta detrás suyo y entonces los dos híbridos se quedaron a solas y en silencio. 

Jimin miraba a Yoongi con cierto enojo y recelo. Su alfa no tenía ni siquiera por qué pensar en otro Omega y mucho menos en tener cachorros con otro Omega, eso lo fastidiaba y le sacaba de sus casillas demasiado rápido. Sus manos eran dos pequeños puños cargados de molestia, mientras que su mirada era fija en Yoongi, quien aún le sonreía de manera jodidamente encantadora.

— Escucha, Jimin, no quiero que pasemos por esto de nuevo, puede ser delicado. — Yoongi extendió su brazo para llamar a Jimin, tomándole de la mano y besando sus nudillos.— No importa que usemos cualquier anticonceptivo, son 99% efectivos, y si caemos en ese pequeño 1%, no quiero que vuelvas a pasar por eso. — Yoongi tomó su mentón, atrayendo su rostro para besar su mejilla continuamente y de manera lenta, disfrutando del pequeño contacto que tenían. — Y yo no voy a poder, no voy a poder evitar tocarte, no voy a poder evitar querer estar contigo. No puedo, Jiminnie, eres mi omega, voy a querer pasar contigo cada uno de mis celos. — Susurró de manera baja, haciendo que un pequeño escalofrío recorriera la espalda de Jimin, desde la base de su cola hasta la parte trasera de su oreja, donde Yoongi había dejado un pequeño beso. — Si no es contigo, yo no quiero cachorros. — Yoongi dijo firme.

Entonces Jimin cambió su expresión por una aún más relajada. Sus ojos se encontraron, Yoongi con la mirada tan decidida y Jimin sorprendido, tanto que quería llorar. ¿Yoongi realmente sabía lo que estaba diciendo? ¿Él sabía a lo que estaba renunciando por Jimin? Demasiado, era demasiado y ahora Jimin quería llorar porque para Yoongi, él lo era todo, estaba más que claro.

— N-no tienes que hacerlo, Yoongi. — a Jimin le temblaba la voz de manera sorpresiva, parecía ser que su Omega se removió dentro suyo y estaba en una parte que nunca había tocado.— N-no quiero que lo hagas, es que...

¿Cómo decirlo?

Yoongi levanto una de sus manos una vez más. Acariciando el cabello de su nuca e incorporándose para poder tener sus rostros cerca.

❝ 𝐈 𝑴𝑬𝑶𝑾 𝐲𝐨𝐮  ❞ ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora