四十二

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El sonido intenso de las máquinas hizo que Mejiwoo entrará abruptamente en la habitación, seguida por Taehyung y Onew a quien recién habían preguntado por el estado de Yoongi.

La imagen parecía surrealista, porque Jimin estaba encima del cuerpo de Yoongi, justo como había pasado las horas anteriores, pero con sus ojos bien abiertos y mirando atónito a Yoongi debajo suyo, aún con el largo tubo en su garganta y dando un par de arcadas, pero sin moverse. Sus mejillas estaban húmedas, su nariz y ojos rojos, pero ya no hablaba. Jimin no decía palabra y ni siquiera parpadeaba.

Y mientras los tres gritaban su nombre para traerlo de regreso a la habitación, Jimin sólo podía centrarse en los ojos negros de Yoongi, que no dejaban de mirarlo, con esa luz peculiar que tenía, esa luz misteriosa, pero jodidamente coqueta y aventurera que le encantaba. ¡Yoongi estaba vivo!

— ¡Código amarillo, a la habitación 95 ya!

Y mientras Mejiwoo intentaba sostener a Yoongi y poder quitarle el tubo de la garganta hasta sus pulmones, hablaba por el teléfono de la habitación a un costado de la cama de Yoongi, mismo que lo conectaba con la central de la enfermería en el piso que se encontraban. Taehyung y Onew tomaban a Jimin de los hombros, tratando de hacerlo bajar sin éxito, Jimin parecía un peso muerto, pesado y aferrado a Yoongi.

Un par de enfermeras más aparecieron por la puerta, acompañadas de Hoseok, quien de inmediato auxilio a su hermana a quitar el molesto tubo de la garganta de Yoongi, con éxito. Pan comido para un especialista como Hoseok.

— Todos atrás, déjenlo respirar. —Hoseok dijo, y entonces todos dieron dos pasos hacia atrás, menos Jimin quien se quedó sentado encima del cuerpo de Yoongi y Hoseok que quería estar seguro de que todo respecto a Yoongi se encontraba bien. Él era un omega y necesitaba bajo todos los aspectos cerciorarse de que todo respecto a Yoongi estaba bien.

Yoongi dio un par de cañadas de aire. Su pecho se sentía tan extraño y pesado, una sensación que nunca en su vida había experimentado. Su mirada paseaba por todo Jimin o al menos lo que podía observar de él. Por inercia movió los dedos de sus pies, sus manos y sus orejas, estaban ahí, podía sentirlas y sobre todo sabía que podía sentir a Jimin.

— La fruta.

Esas fueron las primeras palabras de Yoongi y no pudo haber dejado más desconcertados a todos en la habitación, incluyendo a Jimin, quién parpadeo y ladeo su cabeza sin comprender lo que había dicho. Tal vez ahora Hoseok si podía pensar que estaba loco.
— La fruta fue nombrada "Naranja" primero, antes que el color, bombón —Yoongi dijo antes de regalarle una sonrisa a Jimin.

Dos parpadeos más antes de que Jimin le sonriera de nuevo, con sus mejillas volviendo a humedecerse y lanzándose a besar los labios de Yoongi.

Ninguno pudo dejar de sonreír durante el eufórico beso. Yoongi incluso levantó una de sus manos para tomar la nuca de Jimin con delicadeza y este último no podía dejar de llorar, ambos sin dejar de ronronear.

El contraste del ronroneo dulce de Jimin con el más grave de Yoongi, ablando los corazones de todos los presentes.

[ 🐾 ]


Renacido. Esa era la palabra que podría describir a aquellos híbridos.

Jimin había sentido que su alma volvía al cuerpo en cuanto los ojos de Yoongi se abrieron. A pesar de que todo se había congelado en un comienzo, su corazón, sus pulmones e incluso sus parpadeos habían cesado, porque el shock en el que había entrado parecía ser similar al momento en él que lo vio débil sobre la cama. Tenía que creérselo, porque definitivamente Yoongi había vuelto.

❝ 𝐈 𝑴𝑬𝑶𝑾 𝐲𝐨𝐮  ❞ ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora