❝ 𝐈 𝑴𝑬𝑶𝑾 𝐲𝐨𝐮 ❞ ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ

九

— Serían estos. Son los mejores que han traído hasta ahora.

Un chico, de un metro noventa aproximadamente, de cabellos obscuros y una sonrisa amable le entregaba a Taehyung un par de sobres de alimento premium para gato.

BoGum y Taehyung habían decidido salir de compras y dejar a sus pequeños dos gatitos mimados en el departamento del mayor, para poder pasear con libertad y darles, sobretodo, privacidad a sus dos gatitos para jugar y hablar.

Tanto los dos amigos humanos como los dos híbridos disfrutaban de tener tiempo a solas y poder bromear juntos.

— Le cobro de este lado. — El mismo chico agradable, de casi dos metros y cabellos obscuros le sonrió y ambos aceptaron, caminando detrás suyo.

Las dos orejitas peludas de color negro se movían con su caminar, al igual que la cola larga y peluda que sobresalía debajo del nudo de su delantal color beige propio de la tienda para híbridos mascota dónde estaban.

Mientras caminaban, Taehyung no podía evitar mirarlo de pues a cabeza, aún si BoGum le hablaba sobre cuánto le gustaba a Taemin cazar saltamontes en el jardín del conjunto de departamentos. Algo egoísta tal vez, pero pensaba en lo bien que se verían esos dones en su Jimin, un gato alto, bien parecido y fornido con su pequeño gatito dulce y adorable.

— ¿Bombay, cierto? — Fue inevitable para Taehyung preguntar aquello mientras el joven tomaba los paquetes de alimento e ingresaba la numeración correspondiente para poder cobrarlos del inventario.

— Lo soy, señor. — Respondió con una sonrisa en su rostro, terminando de cobrar los primeros dos paquetes de alimento, y continuando con un par de juguetes afelpados de color pastel para su gatito.

— Bueno, es fácil deducirlo por el brillo de tu cabello. — Respondió Taehyung. El chico en cuestión guardaba los artículos en una bolsa de papel reciclado con el logotipo de la empresa y doblaba la parte superior para cerrarla. — ¿Estás interesado en tener un legado? ¿Eres alfa, cierto?

Quizás estaba siento atocigante, pero cuando veía una oportunidad como esa, no podía soltarla tan fácil. Ese gato Bombay le había llamado la atención para su Jimin, y deseaba poder presentarlos y rogar por una buena química hasta congeniar para tener un futuro juntos. Aunque tal vez en el mejor de los casos, Jimin lo saludaría antes de arañarlo en un ataque de molestia si el alfa le intentaba someterlo debajo de su cuerpo.

— Oh, sí, tengo ese deseo. — Dijo el chico pelinegro ofreciendo sus manos como un recipiente en donde Taehyung dejo un par de billetes.— Sin embargo, yo...

[🐾]

— Es normal, Tete. Muchos gatos de la edad de Jimin ya han encontrado pareja y sentado cabeza. — BoGum caminaba al lado de Taehyung mientras comían un buen latte y un capuchino respectivamente, de vuelta a casa después de realizar un par de compras.

Ambos cargaban bolsas de papel y cartón bien decoradas de distintos colores y listones para cerrarlos, con logotipos de marcas costosas y lujosas. Taehyung suspiraba constantemente, algo decepcionado porque aquel prospecto había rechazado la oferta debido a que ya existía una relación sentimental con una Omega que no pensaba poner en riesgo por un gatito tan perfecto como su Jimin. A veces pensaba que nadie estaba hecho para su preciado gatito Cálico.

— Es que tenía todo. Bueno, no es como que me agrade que el futuro novio de mi Jiminnie tenga un trabajo en una tienda de conveniencia.

— Bueno, Tete, le tiene que gustar a Jimin, no a ti. — BoGum dio un sorbo a su bebida y soltó una risa divertida después de eso.