-Tenemos que encontrar el objeto que guarda ese poder.
-No sé si es buena idea Iris. Esto se nos escapa de las manos, tenemos que hablarlo con tu hermano, y seguramente él, como líder, decidirá hablar con los Antiguos. -Comenta Savannah e inmediatamente desecho esa idea.
-Entonces se lo quedarán ellos, y este objeto no está aquí para ese propósito Savh. En la carta explicaba que servía para proteger, de hecho se lo dio Elise a Meribeth para que se protegiesen ella y Alicia. No le digas a nadie que lo tenemos, déjame unos días para ver si puedo averiguar algo por favor. -Le pido.
Veo cómo mi amiga se lo piensa, pero finalmente acaba asintiendo.
-Te ayudaré. -Me guiña un ojo.
¡Qué haría yo sin Savannah! Decido contarle todo lo que sé hasta el momento, desde la información de los altos en el tiempo hasta la historia que me acaba de contar mi abuela hace unas horas. A partir de ese día ambas nos metemos en una rutina: Savannah se pasa las mañana metida en la habitación secreta leyendo algunos de los libros que hay mientras yo trabajo con los caballos o en el restaurante, a la hora de comer, intentamos hacerlo juntas para pasarme la información que ella ha ido recabando, y por la tarde nos hacemos el relevo, ella trabaja y yo busco información. De momento, lo que sabemos, aunque no con seguridad, es que el ser que me atacó en el bosque tiene todas las papeletas para ser un Dorcha pero si realmente lo es, ¿Por qué sigo con toda la sangre en mi cuerpo?, ¿Por qué los Antiguos no dijeron nada al respecto cuándo les conté lo que había pasado? ¿Por qué han llegado a la misma conclusión que mi abuela, no perdida de sangre, no Dorcha, o porque no querían cundir el pánico? Creo que la única manera de confirmar lo que son esos seres es que salga al bosque sola para ver si atraigo alguno más, pero por alguna razón, léase mi ironía, a Savannah no le hace ninguna gracia esa opción y me lo ha prohibido rotundamente. En cuanto a la barita de saúco, así es como he decidido llamar al objeto de poder que hay guardado, por más que lo buscamos nos hemos encontrado nada. Sé que está ahí porque el poder que siento es innegable, pero es como si solo quedase eso, el poder. Y además de todo esto, por sin fuera poco, recibí un mensaje de Gabriel diciéndome que iba a tardar unos días más, y es lo único que me ha dejado saber de él, porque por más que le llamo, no me contesta y ya llevamos así más de una semana.
-Ooh vamos, hace días que no se os ve el pelo. -Nos reprocha Dana. -¿Dónde habéis estado metidas?.
Savannah y yo nos miramos. En teoría habíamos quedado para comer las dos pero Maggie y Dana nos han visto y se nos han unido. Le hago un gesto casi imperceptible a Savh y ella me lo devuelve: está de acuerdo conmigo en que le contemos lo que está pasando a nuestras amigas.
-Estamos haciendo averiguaciones. -Empiezo yo.
-¿Averiguaciones de qué tipo?. -Pregunta Maggie con interés y echándose más hacia delante en la mesa.
Al final entre Savannah y yo les contamos toda la información que hemos ido recopilando, tanto de los Dorchas como de la barita de saúco.
-Entonces para saber si de verdad han vuelto esos seres, lo que hay que hacer es ver si se sienten atraídos por ti. -Señala Maggie.
-Por dios dicho así parece que se los tenga que ligar. -Salta Dana.
-Ya me entiendes. -Le reprocha ella.
-Sí. -Aclaro. -Yo había pensado que podría salir por la zona donde encontré el otro a ver si hubiese más.
-¿Y por qué no vamos todas?. -Propone Maggie. -Es decir, si esos seres persiguen a las brujas de más poder, y vamos las cuatro juntas, estaremos emitiendo más poder que si vas tú sola, y a la vez, podremos protegernos las unas a las otras. Pensarlo bien, cuatro contra uno, no es un mal número, tenemos todas las de ganar.
ESTÁS LEYENDO
AIRE
Fantasy¿Cómo te sentirías si de repente descubres que tu familia te ha estado mintiendo hasta ahora?. Ya te lo digo yo, perdida. Así es como me sentí cuando descubrí que vivía en un mundo que no creía posible, dónde las brujas y sus poderes son las protago...