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Narrador Omnisciente
─ Tengo mucho sueño ─ Dijo Samantha aventandose a la cama.
─ Yo también ─ Le siguió el rollo Osvaldo, haciendo lo mismo que Samy.
Y es que ya habian llegado al hotel, despues de casi perderse por el aeropuerto de México.
No podían encontrar la puerta que necesitaban para salír, pasaron unos 40 minutos intentando salir del aeropuerto.
Y otros 40 minutos en el tránsito y otros 20 minutos para poder encontrar el hotel.
Que ya ni siquiera les dió tiempo para comer y se tumbaron a la cama.
Samantha tenia habitación propia, pero de tanto cansancio se quedo en la de Osvaldo.
─ Hazte más para haya ─ Se quejó Osvaldo sacandose los tenis y los lentes.
─ No, por que ─ Se quejo Samantha, moviéndose como gusano para tener más parejo el espacio de la cama.
Al igual que Osvaldo se quito la sudadera y los tenis.
Ambos quedaron plácidamente dormidos.
Samantha abrazaba el brazo de Osvaldo y es que por la gran diferencia de estatura.
Si Osvaldo abrazaba a Samanta, parecía que se la comía y si Samy lo abrazaba, no podia abarcar todo su cuerpo.
Solo dormían como podían
( . . . )
─ Mojón! ─ Preguntó exaltada Rivers, se había escuchado un fuerte ruido.
─ Ni se te ocurra reírte ─ Respondió levantándose del piso, envuelto en las sábanas blancas.
Las risas de Rivers se oían por toda la habitación.
─ Si? Chanake de dos patas, te vas a seguir burlando ─ Dijo divertido Osvaldo.
Se acercó hasta Samantha y se recostó encima de ella.
─ Valdo ─ Seguía riendo.
─ Bajate, pesas ─ Volvió a decir.
─ No, me gusta estar así ─ Osvaldo retiro los cabellos del rostro de Samantha y la besó.
─ Así si me gusta despertar más ─ Le afirmó Samantha besándolo otra vez.
─ Pero tengo hambre ─ Le susurró haciendole reír a Osvaldo.
Ambos se arreglaron y bajaron hasta el buffet del hotel.
Que en vez de desayunar ya era la hora de comer, así que ambos comieron una porción de chilaquiles rojos, con frijoles bayos, un tazón de frutas y café.
─ A que hora sera lo de Warzone ─ Pregunto Osvaldo comiendo.
─ A las siete, pero tenemos que estar ahí a las 5, así que tenemos unas tres horas en los que nos damos un buen baño y nos arreglamos ─ Le dijo Rivers.
En la que terminaban de comer, gente se les acercaba oara pedir fotografías o saludos.
Cosa que emociónaba a Rivers.
( . . . )
Despues de ésas tres horas, ambos salieron en dirección al evento.
Al ingresar a las instalaciones se veía ya gente esperando a los demas creadores.
Si bien, no les tan mal en el evento, tampoco les fue muy bien que digas.
Fue un 40/60 o un 55/45.
La gente los saludaba, les gritaba cosas muy lindas, les daban regalos.
─ ¡Llevense a la Rivers! ─ Les grito ElMariana a las personas.
Y cuando vió que si la querían agarrar.
La tomó de la cintura y la coloco a su lado, protegiéndola para que nadie la agarrara.
( . . . )
─ Gracias por lo de hace rato, sentía que si me secuestraban ─ Dijo Samantha riendo.
─ Ya vez, yo si cumplo mis promesas ─ Osvaldo volvió a besar a Samantha.
Y es qué últimamente para Osvaldo era un delirio besar a Samantha.
Era como si medicina de todos los días.
Y para Samy igual, no quería estar lejos de Osvaldo.
Y aun que no quisieran aceptarlo, ambos tenían una dependencia ligera uno por el otro.
─ Gracias ─ Dijo Samy entre los besos que le deba Osvaldo.
Prontamente la cargó para acostarla en la cama y el encima de ella.
─ Que quieres hacer hoy? ─ Le pregunto jugando con su cabello.
─ Valdo, ya es de noche, dormir tal vez ─ Le dijo quitandole las gafas y poniendose ellas los lentes.
─ Te vez bien mojoncito ─ Le dió un último beso para irse al baño a poder bañarse.
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Los vi muy tristes y deprimentes, que estoy arriesgando mi 3 en inglés.
