Capítulo 15: Transition

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Esa extraña mañana amaneció fría y más nublada de lo normal para tratarse del invierno que ya se acercaba. Al momento en que la poca luz atravesó la ventana, golpeando con sus toques el rostro de Hakyeon que permanecía dormido en una posición bastante incomoda sobre la cama, éste se levantó con real desespero y asombro al notarse en una habitación desconocida o más bien en una que no era la suya, la sensación era extraña, por lo que rápidamente se incorpora sin darse cuenta de su aspecto que lucía bastante agotado por haber descansado tan poco.

Cuando por fin logra comprender qué hacía en ese lugar, los recuerdos de esa noche llegan a su mente en ráfagas y lo asombran una vez más, porque le parece verdaderamente increíble lo que había pasado esa noche, así que busca con su mirada a Taekwoon por toda la habitación, con un poco de temor y de recelo, pero este ya no se encontraba en aquel lugar así que pensó que posiblemente pasaría igual que la vez anterior y lo mejor era irse. Se mira unos segundo en el espejo e intenta arreglar su cabello, pero justo en ese momento Taekwoon entra a través de la puerta de la habitación de una forma intempestiva y con la mirada extraviada, hace una mueca con la intención de hablar pero solo logra articular unas pocas palabras que parecen dirigidas a la nada porque ni siquiera lo mira a los ojos y estas palabras dejan sin aliento a Hakyeon.

-Por favor vete de mi casa- dijo Taekwoon de forma seca y sin determinarlo con la vista, a lo que Hakyeon responde con un temor que evita que salga a través de su garganta: -Si... si es por lo de anoche...- ni si quiera terminó la frase cuando se escuchó nuevamente la voz de Taekwoon diciendo descontroladamente que se largara inmediatamente de su casa y que dejara de hacerle preguntas y molestarlo.

Por la mente de Hakyeon comenzaron a pasar miles de pensamientos y más eran los negativos que los positivos; comenzaba a sentirse realmente mal y desconcertado ante lo que estaba ocurriendo en ese instante, no tenía más opción que obedecer a lo que el chico demandaba inclementemente, pero muy dentro de él no quería irse simplemente sin saber el motivo de tan desconcertante reacción.

Hakyeon se acerca lentamente hasta donde se encuentra Taekwoon de espaldas el cual está viendo por la ventana una vez más, como si esa ventana tuviera algún poder para hacer algo, parece realmente molesto, pero esto es algo que no se puede confirmar porque Taekwoon no es claro demostrando lo que siente y menos en este tipo de situaciones donde no se podría saber si está molesto, frustrado, decepcionado o qué.

Al encontrarse detrás de él su mente no le permite hacer otra cosa sino preguntar, y una vez más con su quebradiza voz le interroga ansiosamente si era que había sucedido algo o si algo le estaba incomodando, ya que la forma de pensar de Hakyeon le decía que era mejor decirlo para no crear malos entendidos, o para poder conseguir soluciones, a esto Taekwoon no respondió, así que éste insistió haciendo un poco de presión pero lo que consiguió fue más silencio por lo que decide darse por vencido y retirarse de ese lugar.

En su interior Hakyeon sabía que algo no estaba bien más allá de la reacción que Taekwoon había tenido con él, así que al salir de la habitación siente que va a enloquecer en cualquier momento, porque viene a él una mezcla de furia y desconcierto pero también frustración e impotencia, se le vienen las lágrimas agolpándose en sus ojos una detrás de otra, buscando salida la cual no era permitida en ese momento. Hakyeon cierra fuertemente sus puños para tratar de ser tolerante y aguantar pero dentro de sí solo se repite que no quiere que las cosas terminen de esa forma o perder lo poquito que había conseguido porque de no hacerlo no se lo perdonaría después y eso lo atormentaría de por vida.

-¡No Es justo lo que sea que intentas hacer!- grita Hakyeon y su grito retumba en todas las paredes de aquel lugar. -¡Tú me abriste las puertas y yo decidí entrar, así que necesitas mucho más que eso para hacerme huir!- seguía gritando con voz grave pero quebrada en un desesperado comportamiento que comenzaba a ahogarlo pero que no lo hacía retroceder. Cuando alza nuevamente la voz para seguir expulsando a diestra y siniestra todo lo que su mente quería para intentar desahogarse y romper ese nudo en su pecho, se escucharon los fuertes pasos de Taekwoon dirigiéndose hacia él.

Taekwoon sin medir ningún tipo de consecuencia y actuando visceralmente toma por el brazo a Hakyeon y lo lleva a arrastras hasta la entrada de la casa. A pesar de que Hakyeon se resistía y forcejeaba con él su fuerza en ese momento no era suficiente debido a sus emociones que no eran tan estables como para darle el impulso para enfrentarlo, así que solo se dejó arrastrar y aguanto cada maltrato que aquel chico le propinó mientras eso ocurría.

Al llegar a la puerta Hakyeon en un último esfuerzo se para frente a él y gritando nuevamente le exige que lo mire a los ojos solo una vez, él sabía que si tan solo lograba mirarlo podría entenderlo un poco, pero Taekwoon estaba definitivamente negado a volver en sí, pero aun dentro de ese caos logra moderar su voz y decir entre dientes y casi sin voz: -tan solo vete, vete antes de que te haga más daño-.

Esa mañana se había convertido en la antítesis de todo lo que había pasado la noche anterior, parecía que aquel juguetón destino le estaba cobrando a Hakyeon por haber ambicionado más de lo que podía o debía y que de esta forma pagaría por todo lo que había logrado al intentar acercarse a Taekwoon de la forma en que lo hizo.

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