daddy's war 𐙚 vminkook. (terminado)

Capítulo treinta.

—¡Gracias taetae! —fue lo que escuchó con emoción TaeHyung cuando ambos niños observaron su nueva cama elástica gigante.

La cual habían pedido hace meses atrás pero Jimin se rehusaba a darles porque la consideraba peligrosa. Ahora, Jimin observó de brazos cruzados al castaño.

—Es un pequeño regaño.—dijo, abrazándola.

Jungkook giró sus ojos, mientras terminaba de beber su cerveza frustrado.

—Si llegan a romperse algún hueso tu los llevas al hospital.—gruñó.

—Nada les va a...

Y antes de terminar, un agudo grito y el ruido de algo rompiéndose similar a un vidrio los desconcertó a los tres adultos, giraron asustados, encontrándose con un Junsuk cubriendo su boca, y una Somi igual de atemorizada. Jimin giró nuevamente, tratando de encontrar de donde provino el ruido. Cuando lo halló, quiso gritar a los cuatro vientos el nombre de su hijo mayor.

La ventana de su habitación estaba rota, en pedazos, y todo parecía ser producto de la pelota de fútbol del niño.

—¡Te dije que no podías subirte con la pelota, Junsuk!—gritó Jimin.

—Perdón mamá.—bajó su cabeza.

—Se bajan ambos de ahí.—dijo con firmeza.

—Espera, Park. Deja que jueguen, yo arreglo la ventana.—habló rápidamente TaeHyung.

(....)

Kim bajó del auto con el nuevo vidrio, había ido a comprar uno nuevo, pero en realidad no estaba muy seguro de como ponerlo. Dejando el artefacto en el suelo como suma delicadeza, abrió la puerta de la casa.

—¡Jimin, llegué! ¿Me ayudas?

—¿Qué haces con eso? —lo observó Jimin.

—Es para arreglar la ventana.—suspiró.

—Pero Jungkook ya llamó a alguien.

—Te dije que yo iba a hacerlo.

—Él dijo que tú le dijiste que llamara a alguien.

—¡¿Qué? ¿Y a dónde creiste que fui todo este tiempo?!

—¡No se! ¿A lo de Hoseok? —TaeHyung gruñó, mientras dejaba el vidrio sobre la mesa de el comedor— ¿Ahora qué?

—Hay que decirle al hombre que se vaya, que ya llegué.—comenzó a subir la escaleras, decidido.

Cuando estaba por entrar a su habitación vió al hombre, y a su lado a Jungkook. Trago saliva.

—Oh, usted debe ser Kim TaeHyung.—etrechó su mano con la de él.

—Ah... señor...

—Oh Sehun.—asintió el moreno.

—Sí, yo...

—¿Tienes algo que decir, TaeHyung? —preguntó Jungkook, burlón.

—Lamento decir esto, Sehun pero...hubo una confusión, y yo realmente...lo siento, pero...no necesito...

--¡Oh entiendo!--suspiro el hombre, frustrado--¡No quieren a un hombre con una tez más oscura en su casa!--tomo sus cosas y comenzó a bajar las escaleras molesto.

—No, se equivoca, no es lo que quise decir.—lo siguió de atrás mientras Jungkook también bajaba, aguantado su risa— Pagaré por sus servicios, déjeme...

—¡No quiero su dinero!

—¿Qué pasa? —Somi observó a los mayores hablar a los gritos.

--¿Papá taetae está siendo racista?

—¡No, niños! —negó el castaño, exhasperado.

—Niños, vayamos a la sala, debemos tener una charla. —Jeon se llevó a los menores, dejando a TaeHyung a punto de sufrir una crisis.

—Mire señor, lamento haber sonado mal, pero no soy racista, ¡Puede quedarse almorzar!

—¿Y que van a comer? —cruzó sus brazos.

—Lo que quiera.

—Está bien, pero sólo porque mi esposa me echo de casa.