Capitulo 20

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Al día siguiente, Wanda se despertó con la sorpresa de que Natasha ya no estaba junto a ella. Se habían quedado dormidas después de una larga noche llena de sollozos por parte de la rusa quien se rehusaba a querer caer en la inconsciencia pero finalmente el sueño la venció.

Natalia ya había ido al colegio, era Lunes ahora. Wanda observó su celular desde la encimera de la cocina sin notificaciones, revoloteando sus dedos contra el mármol con ansiedad.

Hoy no iba a trabajar, más que decisión propia fué decisión de su jefe. Dijo algo sobre cómo debía aprovechar que su esposo no estaba en casa para relajarse.

No podía permitirse perder a Natasha otra vez, no ahora que la tenía devuelta. Sabía que no la abandonaría, ella le prometió ayudarla pero Wanda tenía miedo de no ser lo suficiente para hacer que se quedara por siempre con ella.

En realidad era absurdo pensar que podrían tener su felices por siempre, siempre había algo que terminaba saliendo mal.

~*~

En el momento en que pisó las instalaciones supo que quizá era un error estar allí. Se acercó hacía secretaria con la cabeza en el alto tratando de ahogar sus miedos.

Wanda se había quedado dormida durante la noche, pero ella no había podido hacerlo en lo absoluto. Las imágenes de su pesadilla volvían una y otra vez y al mismo tiempo tenía la situación de Wanda, su padre y su memoria. Ver dormir a Wanda y a Natalia tan plácidamente la hizo querer tomarlas a ambas y salir huyendo de allí con ellas a donde nadie pueda hacerles daño.

Pero no podía hacerlo.

Al menos no ahora.

Al menos no sola...

— Bienvenida a las industrias Stark. ¿En qué puedo ayudarla?

— Hola, buen día... — Natasha sonrió llegando al mostrador de la secretaria. — Estoy buscando a...

— ¡Natasha Romanoff! — La voz a sus espaldas le causó escalofríos.

Natasha se giró para observar al mismísimo Anthony Stark parado a unos metros frente a ella.

— Está bien, Nat ¿Verdad o Reto? — preguntó Tony. Con una sonrisa. Natasha siempre elegiría el desafío, lo hacía para encajar en su estereotipo de chica popular.

— Reto.

— Bien. — dijo Tony, frotándose las manos y sofocando una risa malvada. — En realidad, ¿sabes qué? Éste desafío es demasiado bueno, que sea una apuesta.

— Está bien. — Natasha estuvo de acuerdo ignorando su propia mirada aterrorizada. — ¿Cuál es la apuesta?

— Si consigues que la rara salga contigo, te pagaré trescientos dólares — Tony sonrió ante la expresión de Natasha. — Y si pierdes, me pagas cien dólares. Es simple, de verdad. Simplemente no puedes decirle que es por una apuesta.

— Estoy saliendo con María, idiota. — protestó Natasha desesperada por salir de este lío.

...

— Si tan solo accedieras a otra apuesta... — Tony volvió a hablar. Natasha sintió como se acercaba hacia ella por la espalda dando pasos cortos y silenciosos. Él estaba intentando intimidarla.

— No. — espetó girandose de golpe encontrandose cara a cara frente a él. — ¿Te encanta aprovecharte de las personas, Tony Stark?

— ¿Le temes a una pequeña apuesta Natasha Romanoff? — Tony preguntó con una sonrisa de superioridad. Saltó de repente, de forma exagerada y falsa para decir con ironía: — Oh, lo siento. Olvidé que te llamas Natalia Alianova y eres una completa farsa. En fin, supongo que mí amiga era Natasha Romanoff, no tú.

NO MÁS RARA. | Wandanat. #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora