pasion prohibida (SASUNARU)

13 ( corregido )

Ambos cuerpos descansaban ahora bajo las sábanas. La noche seguía en silencio, salvo por las respiraciones entrecortadas que aún trataban de estabilizarse. Sasuke estaba recostado de lado, mirando a Naruto como si no pudiera apartar los ojos de él. Naruto, todavía ligeramente ruborizado, se dejó caer sobre el futón con una mezcla de satisfacción y paz que pocas veces había sentido.

Por unos minutos no hubo necesidad de palabras. Pero entonces, Sasuke rompió el silencio con una confesión inesperada.

—Naruto... —comenzó en voz baja, pero su tono tenía una profundidad que hizo que el rubio girara el rostro hacia él—. Esto es importante para mí.

—¿A qué te refieres? —preguntó Naruto, parpadeando con curiosidad.

Sasuke deslizó los dedos por el cabello desordenado de Naruto, como si estuviera tratando de memorizar cada detalle. Había algo distinto en su expresión, una mezcla de emoción contenida y un leve brillo en sus ojos, que hacía que Naruto se sintiera aún más vulnerable ante él.

—Si es verdad lo que dijiste... que puedes quedar embarazado... —Sasuke hizo una breve pausa, como si aún no pudiera creer lo que estaba a punto de decir—. Entonces... eso significa que podría restablecer mi clan contigo.

Naruto se quedó en silencio, sintiendo el peso de esas palabras. Restablecer el clan Uchiha. Era algo que sabía que significaba todo para Sasuke, pero jamás se había imaginado que él, de entre todas las personas, podría formar parte de ese sueño.

—¿Estás diciendo que... quieres tener hijos conmigo? —preguntó Naruto, con los ojos muy abiertos.

Sasuke asintió lentamente, con una pequeña sonrisa en la comisura de sus labios, esa que reservaba solo para los momentos más sinceros.

—Sí. Quiero restablecer mi clan. Y quiero hacerlo contigo. —Sasuke pasó un brazo por la cintura de Naruto, acercándolo más a él—. Nunca pensé que podría tener la oportunidad de hacerlo con alguien que... —dudó un instante antes de continuar— que significara tanto para mí.

Naruto sintió que su corazón se aceleraba al escuchar esas palabras. Sasuke Uchiha, el chico que siempre había sido distante y reservado, le estaba confesando que lo veía como parte de su futuro.

—Teme... —murmuró Naruto, sintiendo que las emociones lo desbordaban. Por primera vez en mucho tiempo, las lágrimas amenazaban con escapar de sus ojos, pero no eran de tristeza, sino de una felicidad que nunca creyó posible.

Sasuke lo miró con una suavidad inesperada, y aunque no era un hombre de muchas palabras, no necesitaba decir más. Naruto lo entendió todo en esa mirada: Sasuke no solo lo deseaba, lo veía como su compañero, como alguien con quien construir una vida.

—¿Estás seguro de que quieres esto? —preguntó Naruto, intentando mantener la voz firme a pesar del nudo en su garganta—. No será fácil...

Sasuke dejó escapar una leve risa, algo raro en él, pero sincero.

—Nunca quise que fuera fácil. Solo quiero que sea contigo.

Naruto sintió que su pecho se llenaba de una calidez indescriptible. Se dejó envolver en los brazos de Sasuke, apoyando su cabeza en su pecho, mientras el latido firme del corazón del Uchiha lo tranquilizaba. Por primera vez, ambos podían imaginar un futuro juntos, un futuro en el que el dolor del pasado no dictaría sus vidas.

—Entonces será contigo —susurró Naruto, cerrando los ojos con una pequeña sonrisa.

Sasuke lo abrazó más fuerte, como si, en ese momento, Naruto fuera lo único que necesitaba para sentirse completo. Habían encontrado algo más allá de la rivalidad, algo más allá del dolor. Y aunque aún tenían un largo camino por delante, esa noche los unía en un lazo que no se rompería fácilmente.