KODOKU - Izana Kurokawa

21

Mei

Hablar con Kisaki, era algo que no me causaba satisfacción, tampoco agrado, pero, si algo de simpatía.

Extraño.

—¿Por qué debería ayudarte?

—Puedes no hacerlo.

—¿Qué gano a cambio?

—Apoderarte de todo lo que tiene, más o menos.

—Suena interesante, bien, acepto, pero, a cambio déjame hablar con Hinata.

—¿Hina? Puedes acercarte a ella cuando quieras, la conoces, dudo mucho que te rechace una charla.

—Eso no lo sabemos.

Me encogí de hombros, para retirarme del lugar con Koko e Izana, eso había sido algo tenso, fue un milagro que el chico de los tatuajes no lo haya acompañado, suelen estar juntos pegados como solapas.

—Me da desconfianza —dije, que lo haya aceptado es sospechoso.

—Ciertamente es desconfiable, por eso me encargaré de vigilarlo, será fácil.

—Gracias Koko, eres el mejor.

—¿Cuál gracias? Quiero conocer a esa bella anciana de tu clan.

—Sabía que algo así pasaría, iremos directamente donde ella, ¿vendrás Izana? —miré a mi novio que estaba algo callado, y con el ceño fruncido.

—¿Ahora si me hablas?

—¿He?

—Olvídalo.

Lo miré fijamente mientras Koko se reía, eso..., ¿eran celos? mi hermoso novio está celoso, no sé si me da pesar o ternura verlo con un puchero, tan adorable.

Apenas llegamos a casa, vi a la anciana tomar el té con mamá en el jardín.

—Anciana.

—Mei, Izana, hola niños, ¿quién es el este bello muchacho? 

—Es un placer conocer a tan distinguida dama, Kokonoi Hajime para servirle.

—Cuanta clase en una sola persona, ahórrate el discurso, conozco a los de tu tipo —reí ante el intento fallido de Koko —entonces, ¿cuánto es el valor del financiamiento?

—Podemos irlos viendo a medida que se realicen las cosas, por el momento no será difícil seguir seguirle el rastro, trabajaremos en conjunto junto a otra mente maestra, pero serán como mínimo $50,000 yenes.

—¿Tan poquito? Haberlo dicho antes.

Sin duda alguna mamá le metió algo a la bebida que soltó el dinero de tan buena gana, que sujeto más agradable.

Las cosas estaban listas, no quería ensuciarme las manos, pero a la larga la anciana tomaría represalias por ello, no me gusta la idea, pero..., llevo sangre Tsuchi en mis venas, aunque haya sido criada por los Tumuro.

—¿Estas segura de esto?

—Completamente —envié el mensaje para que se diera la operación completa, mientras trataba de relajarme en la cama de Izana.

—Estas muy tensa, pediré a Emma que te prepare un té, algún día se enterarán.

—Y la culpa seguirá carcomiéndome poco a poco.

—Ya veremos que sucede con la información que Kisaki tenga.

—Odio a ese tipo, no sé como Hina logró conectar con el, aunque gracias a eso Takemichi se la pase más tiempo con ella.

—Si..., ¿qué le vio a ese tipo?

—Lo mismo que le vio Mikey.

—¿Qué yo qué? —lo vi aparecer por la puerta, reí por ello —para que lo sepas, Takemichi es mi corazón, así como Draken es mi alma.

—Eso no sonó muy hetero de tu parte Mikey, no te conocía esos gustos, pero, yo respeto, si te gustan los hombres no me importa, al final Shinichiro sale con Wakasa, y sigue siendo mi hermano.

—¿Qué? Izana maldito.

Si..., verlos pelear de alguna forma me tranquiliza, pero ver a Emma golpearlos con un cucharon valía oro, sin duda alguna son una hermosa familia.

Familia.

¿Mi vida sería más diferente si no me hubiera separado del clan? Tal vez nunca hubiera conocido a Izana y a los chicos, me alegro mucho de haberlo hecho, son mi familia.

—Gracias Emma.

—No debes agradecer, eres mi cuñada, y entre familia se hace lo que sea por ella —siempre tan linda, haría algo grandioso por su boda sin duda alguna.

—Memei, ¿entrenamos?

—Claro.

Un novio, un hermano mayor, una hermana, un hermanito pequeño, mejores amigas, excelentes padres..., no puedo pedir más.

Aunque, el reporte de Kisaki haya sido tan detallado.

—Creo que por esta vez..., paso con el puesto de pertenecer a tu clan.

—No hay problema, en unos días recibirás una buena suma.

—Tu familia es difícil, no quiero toparme con alguien así.

Sin duda alguna, Kisaki es un buen tipo obsesivo a falta de atención.

Y ahora..., la última reunión, en mucho tiempo más.

—Gracias por haber venido.

—Lamentamos las molestias señorita Mei.

—No hay problema.

Aun así, las cosas empezaban a mejorar, la anciana por fin se fue a China. Empezaba a creer que comenzaría una vida en Japón.

Los chicos empezaron hacerse cada vez más populares, eran reconocidos en diferentes áreas, tal parece que mi familia tendrá competencia, o tal vez las unamos.

—¿Lo recuerdas Mei? Aquí nos conocimos por primera vez.

—La primera vez que mamá me trajo al parque..., vaya, han pasado muchos años.

—Si...

Acaricié los cabellos cenizos de Izana, habíamos planeado pasarla juntos, y terminamos en el parque.

Suspiré pesadamente, han pasado muchos meses, fueron tiempos complicados.

Pero..., empezábamos una nueva etapa.

El tiempo pasaba rápido, así como mi graduación, mi ingreso a la universidad, el éxito de algunos chicos, mis reuniones y papeles cada vez más inexistentes.

Todo iba de maravilla.

Claro que en el camino hubo peleas, celos, enojos, berrinches, reconciliaciones..., no importaba, había amor y eso era lo primordial.

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Lo siento, es corto, pero, en el próximo capítulo comenzará la vida de los chicos de una forma más adulta, estamos cerca del final.