💕CAPITULO 45💕

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Una semana después, la venda sobre la lesión en la cabeza de Xiao Zhan fue removida. Xiao Zhan tiene buena salud, por lo que las heridas en su cuerpo se curan rápidamente. Aparte del incómodo picor de las cicatrices en su piel, básicamente no había ni un rastro de ese accidente.

A'Yu, después de permanecer en la unidad de cuidados intensivos durante dos días, finalmente fue trasladado a la sala general.

El pequeño es demasiado joven. Aunque no hay ningún problema importante en su cuerpo y todos los exámenes resultaron bien, todavía tiene un pequeño coágulo de sangre en la cabeza. Los médicos no se atreven a tomarlo a la ligera y decidieron dejarlo en el hospital en observación por un período de tiempo.

Esta decisión es amarga para él. No le gusta el olor del desinfectante y no le gustan los tíos con bata que siempre lo visitan en grupo. Lo más espantoso es que todos los días, habrá una hermosa hermana enfermera, que mientras le sonríe le perforará con una aguja gruesa.

«Duele tanto, ella me sonríe mientras me perfora. ¡Duele tanto!»

— Papá, ¿Cuándo podemos ir a casa?

A'Yu yacía en los brazos de Xiao Zhan, sus dos pequeñas manos estaban alrededor del cuello de su padre, su cuerpo carnoso lo apretaba con fuerza, sus ojos redondos parpadeaban y su voz sonaba lastimosa.

— Pronto, siempre que tomes el medicamento obedientemente y alimentes tu estómago, iremos a casa tan pronto como te mejores.

Xiao Zhan se sentó con las piernas cruzadas en la cama del hospital, con los brazos alrededor de A'Yu, tenía un tazón de natillas de huevo al vapor con una capa de camarones y hongos.

— Ah, abre la boca y come más.

— Woo...

A'Yu negó con la cabeza, se sentía infeliz, no estaba interesado en su natilla de huevo, su platillo favorito.

— Quiero ir a casa... No quiero quedarme aquí, hay tanta gente que no conozco, no me gusta...

Xiao Zhan suspiró, estaba mirando los labios fruncidos de su hijo y su mirada llena de decepción.

El pequeño solía ser muy extrovertido y sonreía sin importar a quién viera, pero desde el accidente, se ha vuelto un poco tímido, siempre sentado en la cama, aturdido y sin curiosidad. Ahora él se asusta al ver a un extraño y será más dependiente de él que antes. Si no lo toma de la mano cuando se encuentran con otros, inmediatamente se sonrojará y llorará.

Xiao Zhan se sintió incómodo, pero todavía mostraba una sonrisa en su rostro, para persuadirlo.

— Papi promete llevarte a casa tan pronto como te mejores. No volveremos a este lugar, ¿de acuerdo? Pero, si quieres irte pronto, debes cooperar para que te den de alta rápido.

— ¿En serio?

A'Yu apretó sus labios.

— Por supuesto, papá también trajo tu pollito amarillo hoy. Por la noche puedes sostenerlo para dormir para que no tengas miedo.

Xiao Zhan sacó el muñeco de su bolso y lo sacudió frente a A'Yu. El pequeño sonrió al ver su juguete favorito. Estiró su mano y frotó el pollito amarillo en sus brazos, pero después de unos momentos, se sintió triste de nuevo.

— Tú, el tío Biu y A'Hao han venido a acompañarme, ¿por qué YiYi no ha venido?

Cuando salieron estas palabras, Xiao Zhan se quedó atónito y no sabía cómo explicarle a su hijo.

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