Roommates... or more? | Jinsu

La ley

Yoongi regresaba a casa después de la escuela, ésta era la primera vez que iba acompañado con Taehyung y Jungkookie, pero fue fácil para él cuando el chófer de los Kim los llevó y Yoongi tuvo a sus compañeros mimando a sus bebés y Taehyung pudo jugar con algunos de los niños de sus amigos también.

Jungkook estaba quieto mientras hacía sus composiciones y estaba en clases, a veces Yoongi se distraía por ver a su pequeño observándolo con esos ojos grandes, brillando con curiosidad como obsidianas, y Yoongi no podía evitar dejar sus obligaciones con una sonrisa para darle atención a Jungkook.

Jungkook había crecido y si era grande desde que nació, ahora estaba más grande, piensa que en un futuro podría llegar a ser más alto que Taehyung, después de todo Seokjin también es alto.

–¡Papá!

Taehyung lo llamaba para llevarlo al baño, pero además de eso Yoongi solo tuvo que cambiar el pañal de Jungkook una vez y darles de comer ambos, después solo fue a casa cuando el chofer llegó por él, Taehyung tomando su mano libre y Yoongi le dio las gracias por ayudarle con su mochila en donde llevaba su equipo.

El apellido Kim lo ataba de varias maneras aunque fuera algo intangible. Pensaba en eso mientras llegaban y el chofer abría la puerta para dejarlo salir y los sirvientes se ocupaban de los niños.

Yoongi se fue a su cuarto para dejar sus cosas, iba a avisarle a Seokjin que ya había llegado y mientras estaba en su celular, encontró unas fotos que le había tomado a Taehyung antes, cuando estaba con ellos en el apartamento y se las mando a Seokjin sin pensarlo dos veces.

Era tan pequeño, Yoongi sabía que tipo de reacción obtendría de Seokjin.

Mientras su marido contestaba, fue hacia la sala, pensando que podría pasar un poco de tiempo fuera de su cuarto antes de que el señor Kim regresara, recordando su día mientras le daba de comer a Jungkook.

"Es la pura cara de Seokjin-sunbaenim".

Las mejillas de Yoongi se ponían rojas al recibir ese tipo de comentarios, ya que nunca se había imaginado tener un bebé con el hombre que amaba, Jungkook en sus brazos todavía se sentía irreal después de tanta espera. Antes su única preocupación era encontrar trabajo y tratar de no salirse de la escuela para seguir su sueño, podía ir con sus amigos a los duelos de rap, podía ir a las tiendas sin necesidad de estar con Seokjin todo el tiempo.

Ahora iba a la escuela con sus bebés al igual que sus compañeros y cada Omega que había sido obligado a tener dos hijos. Debía olvidarse volver a ir al lugar donde podía mostrar sus nuevos versos y beats, quizás ni siquiera pueda ejercer su profesión como lo dijo su madre, ya que ahora tiene que cuidar de Taehyung y Jungkook.

–Realmente es un Kim.

Yoongi le estaba dando de comer a Cookie, cuando el padre de Seokjin llegó, haciendo un comentario realmente estúpido y de mal gusto. Hizo que Yoongi se quisiera tapar el pecho y por consiguiente, que Jungkook no terminará de comer de éste y empezará a llorar, el señor Kim hizo una mueca ante el llanto del bebé, pero también se rió por su reacción y se fue, Yoongi meció a su bebé y atrajo a Taehyung más cerca de él, pero escuchó más pasos, había más gente en la casa y el aroma a más Alfas se encierra en la sala.

Yoongi empezó a sentirse atrapado, pero debía mantener la calma, ya pronto vendrá su recompensa, pronto vendrá Seokjin.

–Buenas tardes.

Algunos de ellos saludaron a Yoongi, él respondió con una reverencia y tomó eso como su salida hacia su habitación, pero el señor Kim volvió a hablar.

–¿Puedes hacer algo para comer?– le preguntó, pero Yoongi sabía mejor y sabía que era una orden para él, aunque sus empleados estuvieran ahí mismo –. Seguramente Seokjin vendrá cansado en unos minutos más.