Capítulo 23

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En cuanto el eco de los pasos se aleja a medida que avanza por el pasillo, esboza una discreta sonrisa de satisfacción que se borra al voltear a su amigo que permanece de rodillas al lado de uno de los libreros, cubriéndose la boca con una mano en un intento por contener los irregulares sollozos. De inmediato se acerca a confortarlo, siendo apartado con brusquedad y lo detiene a unos centímetros de la puerta.

-Habla conmigo, Erwin, no tienes que afrontar esto solo, yo t—

-Suéltame- sisea con una frialdad que sorprende a su acompañante, quien obedece casi por inercia con una mueca de incomodidad- Ahora estás feliz, ¿Verdad? Vamos, dilo, Zeke, sé que estás ansioso por decirlo, adelante, ¡Dilo! ¡Di que tenías razón! Vamos, sé que te mueres de ganas por hacerlo, ¿Quieres escucharlo de mí primero? Bien, tenías razón, nunca debí confiar en él, ¿Estás feliz ahora? Tenías razón, tenías razón, ¡Tenías toda la maldita razón!

-¿Por qué te enfadas conmigo, Erwin? Yo no mentí, te advertí que esa rata no era de fiar, solo quería protegerte... ¿Qué es tan gracioso? – pregunta desconcertado por esa risa con una nota innegable de burla.

-No estabas preocupado por mí, solo querías probar que tienes razón, siempre tienes la última palabra, fue así desde que nos conocimos, Zeke, no hiciste esto por mí, sino por ti, ¿Recuerdas cuando Molly me invitó a salir el año pasado? Fuimos a cenar y estuviste toda la semana convenciéndome de que había algo en ella que no te gustaba, incluso llamaste a Yelena para revisar sus antecedentes.

-Eso... solo quería—

-¿Protegerme? ¿Eso incluía hablar con ella a mis espaldas? ¿Creíste que nunca me enteraría de lo que hiciste? A ti no te importa mi felicidad, ni protegerme, usas a todos a tu conveniencia y haces lo necesario por alcanzar tus objetivos, eres la personas más egoísta y arrogante que he conocido, Zeke, es cierto que cambiaste desde que cuidas a Eren, pero aún está ahí esa parte de ti... desde el principio odiaste a Levi, hiciste todo por separarnos, la única diferencia con Molly o las otras personas con las que he salido es que ahora no te equivocaste, Levi si me engañaba... felicitaciones, tenías razón, eso es lo único que te importa, no yo.

-Eres muy injusto conmigo, Erwin, sé que soy un bastardo egoísta y arrogante, pero tengo mis razones, tal vez algún día lo entiendas, hice esto por tu bien, ¿A dónde vas? No creo que sea buena idea qu—

-Quiero estar solo, al menos respeta eso.

En el silencio de su despacho golpea el escritorio antes de lanzar la pila de exámenes que corregía a un costado y aprieta los puños. No se suponía que las cosas resulten de esa manera. A pesar de que se deshizo de un enorme problema, la sensación amarga en su pecho no desaparece y cada vez se convence de que fue un error.

"¿Cómo reaccionaría Erwin si se entera de la verdad?"

Esa inquietud se manifiesta con insistencia en su mente, inclinándose por la opción de que eso terminaría por afianzar el estrecho vínculo que forjó con el pelinegro, lo cual significa que lo perdería definitivamente.

-¿Eso es lo que me molesta? – suelta contemplando el tenue reflejo en el cristal que protege la hilera superior de uno de los estantes y se aproxima con lentitud- Lo hice por el bien de Erwin, solo quería protegerlo.

"Mentira, lo hiciste por ti, lo hiciste porque sabías que él te lo quitaría para siempre, puede que Erwin no lo recuerde, pero es evidente que sus sentimientos continúan intactos y eso te aterra"

-No es cierto, ese bastardo mató a Erwin, no permitiré que lo lastime de nuevo.

"¿Así fue o es lo que te forzaste a creer para eludir la culpa? Erwin fue herido de muerte por una de las piedras que lanzó el titán bestia, el responsable de su muerte fu—"

-Fui yo- completa en un susurro, luchando con el ardor de las desagradables lágrimas que se acumulan en sus párpados- Yo lo maté, pero ese enano tuvo la oportunidad de—

"¿Salvarlo? Ellos tienen razón, eres un egoísta, Levi dijo que el Erwin de su mundo fue un comandante deprimido y atormentado, ¿Lo traerías de regreso a ese infierno, a sabiendas del daño que le causarías?"

-Y-Yo... buscaría la forma de ayudarlo... jamás renunciaría a él...

"Por eso eres un egoísta de mierda, no estás dispuesto a sufrir y no te importa lastimar a otros con tal de protegerte a ti mismo, esa es la gran diferencia entre ustedes, Levi siempre escogió a Erwin, escogió su paz, su tranquilidad y no le importó resultar lastimado, no le importó que su corazón se rompiera con esa decisión y quedar a la deriva, porque su prioridad es Erwin y ahora lo está haciendo de nuevo, en vez de contarle la verdad escogió la felicidad de la persona más importante en su vida y no arriesgarse a que recuerde ese cruel mundo, ¿Qué hiciste tú? Escogiste protegerte a ti mismo, aunque eso lastime a la persona que quieres"

-Levi tiene razón... siempre soy un asqueroso pedazo de mierda egoísta que solo piensa en sí mismo, tengo qu— la abrupta entrada de un inesperado visitante lo desconcierta, tardando un instante en reaccionar- ¿Qué haces aquí, Eren? Deberías estar en clas—

-¡¿Cómo pudiste hacerlo?! Levi no tiene a dónde ir, ni siquiera es de este mundo, el otro Eren lo trajo aquí para que pudiera ser feliz, ¿Por qué lo arruinaste? ¿Por qué siempre destruyes la felicidad de Levi? ¡Eres un idiota egoísta!

-Lo sé...

-¡No tenías derecho a...! ¿Qué dijiste? ¿Lo sabes?

-Al parecer mi cabeza, tú y todos están de acuerdo en eso, como sea, tengo que arreglarlo, no me malentiendas, aún detesto al enano, pero en este momento tengo una mejor opinión de él que de mí... no es gracioso, Eren y si se lo dices a alguien lo negaré, vamos, tenemos que contarle la verdad a Erwin.

-Espera... ¿Estás seguro de esto? Él está enfadado contigo, ¿Cierto? No sabemos cómo reaccionará o si recuerde su vida en ese mundo de titanes, pero creo que se enfadará con ambos por ocultarle todo esto y mucho más contigo por lastimar a Levi.

-¿Estás preocupado por mí? Pensé que apoyabas al enano.

-Eres un idiota, pero también eres mi hermano y no quiero que te lastimes.

-En este caso me lo merezco... ya no quiero ser un bastardo egoísta, tengo que pensar en Erwin y no en mí, no te preocupes, estaré bien.

Armándose de valor se dirigen a la oficina del rubio, encontrándolo de pie frente a la ventana, con los brazos cruzados a la altura del pecho y a juzgar por los movimientos de sus hombros, es fácil deducir que llora.

-Permiso, tenemos que hablar, Erwin.

-¿Qué parte de "quiero estar solo" no entendiste, Zeke? Ya lograste lo que buscabas, probaste que tienes razón, ahora déjame sol—

-Esto es muy importante, Erwin, tienes que saber toda la verdad, Levi no fue el único que ocultó cosas, nosotros también...

-¿Eren? ¿Qué haces aquí? Deberías estar en clases- lo regaña limpiando el rastro salino de sus mejillas y se gira con un suspiro desganado- Imagino que vienes a defender a Levi, no, a quien demonios sea ese hombre, puedo entender que te agrade porque te ayudó, per—

-¡Mentí! No era cierto lo del asalto... pero fue mi idea, no de Levi, de hecho, él quería contarte la verdad y yo lo convencí de que no lo hiciera, por favor, escúchanos, no tienes que decir algo, solo escúchanos.

-Ya escuché suficiente de Zeke, tengo que preparar el material de la siguiente clase, tienes diez minutos, Eren. 

Segunda oportunidad (Eruri)Where stories live. Discover now