13 - parte 1

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—¡Chris, vamos, préstame tu patineta!

—No Chae, te vas a caer

—Por favor por favor por favor por favor por favor por favor por...

—Ya, ¡basta! Ok, toma

Alcancé a poner un pie y a deslizarme unos centímetros cuando me caí y raspé mi rodilla.

—Uh, yo me voy, no quiero que me regañen. Lo siento Chae

Mi vecino tomó su patineta y salió corriendo.

—¡Chan! ¿En serio me dejarás aquí?... ¡Christopher!

Gritar fué en vano, puse mis ojos sobre mi rodilla que comenzaba a sangrar, de pronto escuché unos pasos acercándose y levanté la vista.

—¿Qué pasa Son? ¿te caíste?

—No Myoui, me enamoré del suelo

No pude evitar rodar los ojos ante la obviedad de la situación.

—Eso se ve feo

—Ayúdame ¿si? Papá me regañara, ya me castigó 2 veces esta semana

—¿Y qué quieres que haga?

—No puedo pararme ¿Me cargas?

—¿Es en serio Son?...— Intenté poner mi mejor cara para dar pena y funcionó— Ugh, bien, ven aquí

Se agachó para ayudarme a levantar, rodeé su cuello con mis brazos y me afirmó por la parte trasera de los muslos. Sentí como la piel de mi rodilla lastimada se estiraba y me ardía, pero dejó de importar en el momento en que me perdí en su rostro y en el aroma a vainilla que provenía de su cabello, pero pronto me dí cuenta que iba en la dirección equivocada.

—¡Mina Unnie!

—¡Me acabas de gritar en todo el oído!

—Lo siento, pero por favor llévame a tu casa, te dije que mi papá me regañaría

Me miró solo unos segundos ya que desvió la mirada.

—¿Quieres una dona también?

—¿Tienes?

—Ay Son, a veces te odio tanto

—¿Y las otras veces?

No respondió, me llevó a su patio trasero en donde habían unas sillas de playa bajo techo, me sentó en una de ellas y se fué sin decir nada más. Luego de unos minutos la ví llegar con un botiquín de primeros auxilios, me miró pidiendo permiso para tomar mi pierna y asentí. Su tacto era tan suave que prácticamente no sentía que estaba curándome.

—Gracias—Sonreí, ella me devolvió el gesto pero otra vez evitó mi mirada—¿Mina Unnie? ¿Te puedo preguntar algo?

—Sí

—¿De verdad me odias?

—Solo bromeaba hace unos momentos... Si te odiara ¿tú crees que te estaría curando?

—¿Me lo sacas en cara?

-—Son, basta, solo te estoy explicando

—Bueno, en la biblia dice "amarás hasta tu peor enemigo"

—No eres mi enemiga

—¿Somos amigas?

—Sí... Supongo

—¿Me amas?

—¿Qué?

No entendí por qué me puse tan nerviosa y por qué solo quise golpearme.

Siempre Te Amaré - MichaengDonde viven las historias. Descúbrelo ahora