Una vez derrotado Wizum. El grupo de héroes volvió triunfante a la dimensión madre tras cruzar el portal que conectaba la arena de batalla infernal con la mansión flotante de Linnie.
Al llegar a la mansión, la isla flotante comenzó a descender hasta su posición original en la tierra firme y, casi por cuenta propia, la mansión se acopló al terreno en la superficie y todo el interior volvió a cambiar a como originalmente se encontraba. No obstante, hubo algunos daños a consecuencia de esto, pero afortunadamente, no hubo bajas ni heridos, a excepción de Drago, el cual se encontraba al interior de la mansión con varios vendajes que Sed y Linnie le habían aplicado y un extraño parche en su ojo derecho.
Linnie recibió con orgullo a los magníficos héroes, quienes habían demostrado de que estaban hechos durante la pelea contra Wizum. Por otro lado, Sed estaba completamente distraído e intrigado con las armas sagradas, las cuales habían recuperado su poder durante la batalla con ayuda de aquella figura que se manifestó durante la pelea contra Wizum. Sin embargo, parecía que algo había cambiado en el ambiente. Algo no se sentía como antes, y eso ocasionó que algunos integrantes del grupo comenzaran a sentir una mala sensación.
Y después de buscar por unos segundos, la sensación se desvaneció en el aire como si nada. Ya no había de que preocuparse, por lo tanto, era momento de restaurar los daños hechos en la ciudad y arreglar algunas cosas en el laboratorio de Sed.
Así, el grupo volvió a los restos del laboratorio, en donde una gran cantidad de científicos se encontraban sellando nuevamente la fuente de maldad y reiniciando desde cero la investigación encargada de esta maldad. Mientras tanto, el grupo llegó a la oficina de Sed y, nuevamente, Sed volvió a colocar su mapa sobre su escritorio. Fue en ese momento que Zilio se acercó a preguntarle a Sed acerca de lo que haría con respecto al mapa ahora que Wizum había sido derrotado. A esto, Sed respondió que, ahora que el rey del inframundo había sido derrotado, era momento de buscar las fuentes de maldad restantes (las cuales estaban marcadas en su mapa), y comenzar a investigar como es que funcionaban y que hacia que aún siguieran en pie.
Fue con esto que Zilio tomo la decisión de ayudar a Sed en su investigación, dándose como candidato a explorar las fuentes de maldad que parecían encontrarse en la isla de Hypercraft, pues además de eso, Zilio quería volver a su tierra natal después de varios siglos de haber partido de la granja en donde nacieron y se criaron Dino y él. Sed agradeció la ayuda, no obstante, miró a Darkox de forma en que el hablara con Zilio al respecto, no para detenerle, si no para acordar de su posible separación del grupo. Así, Darkox aceptó la idea de Zilio y dejó que este siguiera con su plan de ir a Hypercraft; pues con la derrota de Wizum y de Ultragon parecía ser que la maldad había sido bastante controlada ya. Y no olvidemos que la modernización de la seguridad en las cuidades también ha ayudado a que la maldad dejará de ser un problema mayor.
De igual manera que Zilio, otros integrantes quisieron ayudar a Sed y de paso visitar sus tierras natales, estando entre quienes se ofrecieron como candidatos Luis, Dino, Chespin, Urqui, Yisus, y Juregan. Fue así como la separación del grupo comenzó tras una última victoria honorable, lo cual, marcaba el fin de un gran viaje como compañeros y el inicio de una despedida que, tal vez, pudiera perdurar para siempre.
De esta forma, el grupo celebró su victoria y la despedida de sus compañeros aventureros de gran corazón en una reunión al interior del Mecra Mall. Celebración que pasaría a ser uno de los momentos más memorables para el grupo completo, siendo así una fiesta llena de comida, juegos, recuerdos y experiencias compartidas, marcando así, el final de un gran viaje como ya hemos dicho.
Al día siguiente a la celebración, El grupo de Darkox acompaño al grupo de Dino al muelle de Megacraft para despedirse una última vez antes de que subieran al barco de Cronos para viajar a las otras dos islas. Una vez el barco zarpó, Darkox y Kevin volvieron a la mansión junto con Zerok, Sebas y Gian para darse un descanso y discutir acerca de sus próximos movimientos (si es que aún había uno).
Sin embargo, Drago se mantuvo un momento a ras de la orilla del muelle contemplando el basto mar de Megacraft. Allí, Drago se retiro uno de los vendajes que Linnie y Sed le habían puesto después de la batalla contra Wizum. Una vez se retiró la extensa venda de su brazo, Drago notó una extraña marca púrpura recorriendo todo su brazo derecho. Aquella marca parecía poseer un extraño poder mágico muy fuerte; tanto que inclusive después de retirarse la venda por completo, Drago notó que esta marca recorría por completo su cuerpo.
Dicha marca parecía ser la misma que algunas leyendas escritas en la dimensión del Fin parecía temer tanto: La marca del poder Lunar, siendo esta la fuente de poder más grande de magia de dragón que los altos reyes del dominio del Fin solamente podían poseer.
Esto por una parte alerto a Drago e hizo que se volviera a colocar el vendaje; pero por otro lado, estos significaba que Drago había logrado desarrollar su poder como legitimo heredero al trono dragón de la dimensión del Fin, dando a concluir que Drago ahora formaba parte de la familia real de los dragones.
Ahora, lo único que quedaba era disfrutar de la buena vida que la ciudad de Megacraft tenía para ofrecer... ¡Y que mejor actividad para comenzar esta nueva etapa que una sesión de pesca con amigos!
<< Sinceramente este ha sido el capítulo más corto de la sección de Megacraft. Pero, será mejor que se preparen, pues una nueva etapa para este grupo de compañeros comenzará a partir de ahora... >>
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La Hyper-saga - Leyendas del Dodo y el Hiesho.
FanficLas aventuras no son divertidas si no son en compañía de tus mejores amigos. En esta saga se presentan las aventuras y viajes de un grupo de amigos que fueron conociéndose poco a poco, fundando así, un gran vínculo entre ellos, e igualmente sembrand...