La Hyper-saga - Leyendas del Dodo y el Hiesho.

♠ Capítulo 29: La forja. ♠

La noche terminó, y nosotros nos abrimos pasó a través del enorme pastizal que se en la pradera se encontraba. Darkox y Kevin iban delante nuestro discutiendo sobre un nuevo plan para salir de la isla; Sebas y Zerok charlaban acerca de algo mientras seguían con el paso; y finalmente, yo y Yisus éramos los últimos. Yo vigilaba nuestras espaladas en caso de que la bestia se apareciera de donde veníamos; mientras tanto, Yisus me hostigaba una y otra vez con la mirada, intentando de una mala forma conseguir que me disculpara por lo sucedido en la choza.

Intenté no hacerle caso alguno, pero después de cierto tiempo, me harte y le dije explícitamente que no me disculparía por lo que hice. Él se lo tenía bien merecido, además que, haber dicho todas esas cosas malas de Gian lo convertía instantáneamente en un enemigo para mí. Eso, y sumado a las cosas malas que nos hizo junto con Zerok y Juregan en Ultracraft.

Pasado un tiempo, la discusión terminó con un silencio incómodo. Algo bueno, pues estábamos a punto de darnos un descanso de tan grande caminata que habíamos hecho hasta ese momento, siendo así que en cuanto esto ocurrió, tomamos un respiro en un árbol que encontramos a nuestro paso. Una vez allí, el grupo se sentó a comer algo y de la misma forma a beber algo de agua. Mientras tanto, yo me mantuve alerta, vigilando los alrededores para observar que la bestia no nos hubiera seguido durante nuestro recorrido.

En un momento dado del descanso. Una conversación amistosa inició entre los demás. No podía escuchar que era de lo que estaban hablando, pero fue unos minutos después que Kevin notó algo extraño en mí persona, siendo esto mi marca de dragón real; la cual expuse un momento al viento para intentar calmar el flujo de magia que ahora en mí tenía.

Kevin llamó mi atención preguntando por la marca. Yo había sido descubierto. La marca era algo que no quería rebelar hasta que estuviéramos fuera de la isla; no obstante, reconocí en ese momento que las posibilidades de sobrevivir en tal peligroso lugar eran muy pocas para nosotros, así que, ¿por qué seguir ocultando algo de esa forma? ...

—Drago, ¿qué es eso que tienes en el brazo? —fue la pregunta de Kevin en ese momento. Cuestión que no quería responder debido a lo que significaba, pero como dije antes, no había otra oportunidad de hacerlo más adelante, si es que no sobrevivíamos...

—¿Te refieres a esto? —respondí mientras mostraba mi brazo. —Esto es una marca de dragón real, Kevin.

—¿Marca de dragón real? —dijeron absolutamente todos mis compañeros, quienes parecían tener curiosidad al respecto.

—Es un símbolo que solo pueden obtener los dragones de la realeza del fin a su edad adulta. —explique a todos. —Simboliza que su portador es apto para ser un candidato a la corona del imperio del Fin.

Mientras explicaba, tome asiento delante de todos los demás. Me removí la hombrera de mi armadura, y mostré por completo mi brazo. La marca de dragón resplandecía mucho más que en ocasiones anteriores; y si bien esto no era del todo malo, el dolor que el flujo de magia me ocasionaba era casi imposible de ocultar.

—¿Drago estas bien? —dijo Darkox preocupado al oír mis quejidos después de removerme la hombrera de la armadura.

—Sí, solo que... duele un poco cuando la expongo al aire. La magia almacenada en la marca tiende a reaccionar así al oxígeno de esta dimensión. —dije, mientras intentaba tapar un poco la marca para no exponerla demasiado.

—Dios... ¿Desde cuando tienes esto? —pregunto Zerok, la única pregunta me apenaba responder...

—La obtuve desde... —No podía seguir. Me daba miedo contarles que al acabar con Wizum la marca apareció por si sola. Pero era hora de decir la verdad...