La luz que entra por la ventana me obliga a abrir los ojos.
Sonrío al recordar sus labios.
Volteo la cabeza para observar la mesita al lado de la cama con la muñeca de porcelana que me regaló Ángel.
Después de regresar de la piscina lo primero que hice fue poner a la muñequita en ese lugar.
Esta vez no me había largado corriendo. Enfrenté mis miedos como una persona madura.
Patricio interrumpió nuestro beso e impidió que llegáramos más lejos. Al parecer se lo contó a toda la casa porque tuve que aguantar risitas de Ana y Rodrigo durante toda la cena. Después de eso me confiné en mi habitación hasta la hora de dormir por la vergüenza.
La verdad no estoy arrepentida de lo que pasó, creo que seguir luchando contra lo que siento no va a servir de nada teniéndolo que ver a diario.
No he visto a Ángel hoy al parecer no está en casa.
El día se me hace eterno sin encontrar nada que hacer, me he leído ya todos los libros que me habían regalado incluído los de medicina
Al llegar la tarde me siento asfixiada. Rodrigo como buen samaritano al ver mi estado decide sacarme a coger aire al patio.
Pero justo cuando atravesamos la puerta de salida la bestia obstruye nuestro paso.
__ Lo siento pero ella no puede salir __ dice y puedo sentir el desprecio en su voz.
No acostumbro a odiar per en serio su cara de asco ya me tiene un poquito cansada.
__ Ella saldrá conmigo al patio __ habla Rodrigo
__ El jefe dijo....
__ ¿Estás ignorando mi orden?
__ No señor pero las órdenes del Jefe están por encima de las suyas, no dejaré que ella ponga un pie fuera de la casa.
Llegué a mi límite
__ ¿Se puede saber quién te crees que eres para hablarle así? __ pregunto
__ Solo sigo órdenes y tú no eres libre, creo que aún no lo haz entendido.
__ El que no ha entendido que debe cuidar sus palabras eres tú, ¿o acaso la otra fea cicatriz de tu cara no es prueba de ello?.
Intenta dar un paso hacia mí amenazante pero Rodrigo se interpone entre él y yo.
__ Cuidado con lo que haces Hércules__ le advierte
__ Déjalo Rodrigo, solo es tamaño y músculos, puedo con él sin siquiera romperme una uña. No me das miedo.
__ Deberías__ me dice __ aunque te acuestes con el jefe seguirás estando cautiva y yo estaré aquí para evitar que te escapes.
__ Te estás pasando, no querrás que le cuente a Ángel sobre tus palabras ¿Verdad?__ dice Rodrigo acercándose a él para demandarle autoridad.__ Valeria tiene razón cuando dice que no te cabe una cicatriz más en el rostro así que deberías andarte con cuidado.
Hércules lo mira con el mismo desprecio que me mira a mí. Entonces decido intervenir.
Es un hombre peligroso y puedo llegar a pensar que también es traicionero, no tenerle miedo es una cosa pero no quiero ponerle un enemigo a las espaldas a Rodrigo.
__ Déjalo Rodrigo.
__ No Vale, este tipo tiene que aprender quien manda.
__ En serio, ya me amargó las ganas de salir.
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Red
Roman d'amourSi existen los ángeles, sin lugar a dudas él es un caído, sus ojos azules son como droga para mí y no tengo el valor de odiarlo pese a que amenaza con destruirme. Ya no logro definir lo que está bien o mal porque vivo por una mirada suya. ¿Aún q...