XXIX: BAJO EL YUGO FAMILIAR

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-No debiste reaccionar así- habló Namjoon 

-Esperabas que me quedara callado acaso?- respondió el menor, viendolo directamente a los ojos por el retrovisor, ya que Yoongi estaba al lado de Nam 

-Creo que Namjoon y yo solo pensamos, que tomarías las cosas con más calma- habló Yoongi girando a ver a Taehyung- ahora su mamá se quejará ante la familia. 

-Llevame a mi casa Namjoon, puedes? - habló Kim mirando para afuera, no quería ver la mirada intimidante de Namjon

-Y encima eso, estás loco acaso? A tu casa? Te gusta ir a la boca del lobo verdad? - torció los ojos pisando el acelerador.

En lo que manejaba Namjoon vio la silueta de su primo, dormido, y con su hermano la mayor parte del trayecto estuvo callado, hasta que Yoongi rompió la tensión entre los dos.

-Crees que esta situación, algún día se arregle?- preguntó Yoongi viendo a su hermano 

-No sé, espero que si, no me gusta ver a Taehyung así, el es un chico lleno de vida, alegre, juguetón, y miralo como está, pálido, flaco, no rie, y suspira- respondió el moreno, estacionando el carro frente a la casa de la familia principal de los Kim. 

Namjoon, bajó del coche y Yoongi, repitió la acción, para bajar las maletas de Taehyung, Namjoon trató de despertar a su primo, cuando notó, lagrimas secas en su rostro y sostenía algo en la mano ¿Cómo es que no se había dado cuenta de que Taehyung había estado llorando? ¿De cuando acá su primo lloraba en silencio? 

-Taehyung, despierta, ya llegamos, movió su brazo para despertarlo, cuando por un movimiento brusco Taehyung despertando abrió su mano dejando caer lo que había en ella, una foto de Jeon Jung Kook. 

Era la primera vez que Namjoon veía el rostro del chiquillo, y entendió porque Taehyung se había enamorado de él

-Que pasa? - preguntó Kim semi dormido

-Ya llegamos, entraremos contigo

El joven movió la cabeza en negativa dandoles a entender a sus primos que no quería que fuera así. 

-Entraré yo solo- dijo parandose y agarrando sus maletas, despidiendose de sus primos, quienes lo miraron dudoso de que hiciera ello.

Que si tenía miedo? Por supuesto, su familia le aterraba más que cualquier cosa en el mundo, solo había algo a lo que Kim Tae Hyung tenía miedo, y eso era a su familia, pero no a todos claro está, si no que solo a aquellos con los que vivía. Que harían al verlo así allí, seguro lo iban a botar. 

-Quieres que entre contigo?- preguntó su primo mayor-  considero que por lo ocurrido con Jennie, debería ir contigo para explicarles lo que suce...

-No Nam, tranquilo, todo estará bien- por supuesto el imbecil de Kim no le había dicho nada de su salud a ninguno de sus primos- entraré solo- esbozó una debil sonrisa cuadrada. 

Suspiró, e ingresó por el portón principal que se abrió al verlo allí, la segunda reja de su casa, también la pasó satisfactoriamente, pero, no tenía llaves de la casa y tenía miedo de tocar la puerta, si su abuela abría probablemente, le gritaría. Exhalo fuerte y tocó el timbre de la puerta de su casa, y las manos y piernas le temblaron hasta que la misma se abrió, un hombre de cabellos blancos abrió la puerta

-Hijo que pasó? Donde estabas? Porque no respondías el teléfono, me asusté mucho hijo, te pudo haber pasado algo- habló apurado aquel señor 

-Abuelo- el chico lo abrazó y habló casi gritando emocionado, como si no lo hubiera visto en meses- mi mamá?- la sonrisa se le borró del rostro al anciano preocupando al chico

Fiscal Kim - TaekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora