Me encontré en mi cama sin saber cómo había llegado ahi.
No leí lo que Edward escribió.
Era tan extraño lo que sentía.
Era como borrar una hoja en blanco, jamás hubo nada pero al pasar el borrador la hoja no quedó como antes
Desearía que volviera.
Sábado estuve todo el día en la cama. Me pareció oírlo mientras dormía pero era solo un sueño.
A la mañana siguiente decidí salir con el Porsche negro, le dejé una nota a Charlotte en la mesa y salí.
Conduje por una hora sin saber exactamente a donde iba. Ví un señalamiento de una playa cercana y fuí allá, cuando llegué no había mucha gente. Al ser invierno, el agua estaba extremadamente fría por lo que nadie solía ir ahí.
Pasaron las horas hasta que el sol indicó que ya eran más de las seis. Decidí volver a casa.
Llegué a casa para el anochecer y decidí hacer lo único que me sacaría a Edward de la cabeza.
Marqué directo a "Malibú", alguien respondió de inmediato.
-¿Tienes espacio en la academia?
-Siempre tengo espacio para ti -respondió Malibú.
Era el nombre por el cual conocíamos al jefe de la organización, nadie sabía su verdadero nombre.
-Gracias
Colgué y me fuí directo a dormir.
Desperté a media noche y choqué contra algo al girarme.
Intenté abrir los ojos medio atontada y pude reconocer a Edward en medio de toda la oscuridad.
-¿Te asusté? -preguntó
-Aún sigo durmiendo -conseguí decir.
-¿Por qué lo dices? -preguntó
-Te fuiste, pero eso no fue lo peor.
-¿Qué fue? -preguntó como si no quisiera saber la respuesta.
-Lo peor fue que te llevaste una parte de mi contigo.
-Ahora estoy aquí
-No es verdad -dije levantando mi mano para tocar su cara.
La retiré al sentir el frio de su piel.
-Ya quiero despertar
Me tapé la cara con la cobija.
-Quizá deberías dormir si no quieres verme...y bueno yo no debería estar aquí en primer lugar.
-No te vayas, no ahora. Sé que no volverás. La única forma de volver a verte es cuando cierro los ojos, y odio tanto despertar.
-Venus, aquí estoy.
-¿Por qué?
-¿Qué?
Me destapé la cara.
-¿Por qué te fuiste?
-Es una larga historia.
Hubo un silencio.
-Venus, voy a mudarme de nuevo.
No dije una palabra.
-Pero...
-¿Qué? -inquirí
-Quiero que vengas conmigo.
-¿Cambiarme de escuela en los últimos dos meses antes de salir?
-Quiero que vengas conmigo, pero quiero que me digas que no. Que me digas cualquier cosa pero que me digas que te quedas en Seattle.
-¿Por qué?
-Me dí cuenta que causo más problemas de los que arreglo, pero necesito volver allá.
-Bien, ¿Por qué no?
-Debes considerar algo antes
-¿Qué cosa?
-Es bastante obvio que no soy una persona común, y la verdadera razón es que no soy una persona, no soy humano.
-¿Un alien, entonces? -pregunté
Seguro un Edward imaginario podía ser un alien.
-¿Vas a dejarme terminar?
-Bien
-Una creatura, que tiene un único alimento...ni siquiera puedo decirlo en voz alta.
-¿Cuál es el único alimento? -quise saber
-Sangre
-¿Sangre como un vampiro y eso? -pregunté sarcásticamente.
Edward agachó la cabeza.
-Bromeaba, ¿Es enserio?
Asintió lentamente.
-¿Y vas a matarme?
-Nunca, ¿Cómo puedo explicarlo...?
Suspiró.
-Tu sangre no me resulta atractiva, como la de...otras personas. Cuando llegué a la escuela me prometí a mi mismo no entablar ninguna clase de relación con otro humano...eso era hasta que entraste por la puerta echando chispas y un segundo después estabas en la mente de todos.
-En mi defensa, te estacionaste en mi lugar.
-Tenia la necesidad de protegerte, no de matarte. Entonces quise conocerte un poco más, y aquí estamos.
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Saturno, Marte, Venus y Edward (Edward Cullen)
Fanfic"¿Y si al final no soy lo que tu ves?" Venus Moon, una chica con extremada popularidad vive una vida bastante inusual en el estado de Seattle. Su vida se volvería aún más extraña al conocer a un chico de piel palida y ojos color dorado llamado Edwar...
