7- ¿Me estabas probando?

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Qué casualidad. También eres la primera persona en 3 mil años que se atreve a aplastar mi mariposa espiritual en pedazos justo en frente de este venerable.


Feng Ci pensó sin expresión alguna en su rostro.


La luz de la luna penetraba a través de las capas de nubes. El viento dentro del bosque cesó en silencio, dejando solo hojas muertas para volar y dispersarse  en el suelo junto a los dos.


 La mariposa espiritual se rompió en pedazos en las yemas de los dedos de Pei QianYue, transformándose en motas de oro y deslizándose entre las grietas de sus dedos.

La mano de Pei QianYue era realmente muy hermosa. Sus dedos eran largos y delgados, pero no deshuesados y delicados como los de una mujer. Cuando ejercía fuerza, las venas azules del dorso de su mano se hinchaban; blanco pálido pero poderoso. 


Pero en este momento, Feng Ci solo quería cortar esa garra.

¡Es raro que haya logrado moldear una mariposa espiritual tan bonita hoy!


¡Mocoso apestoso!


El brazo de Feng Ci todavía estaba tirado detrás de su espalda. La estructura esquelética del joven era pequeña. Pei QianYue solo necesitó una mano para reprimirloen su brazo. Con un ligero aumento en la fuerza de Pei QianYue, Feng Ci pudo escuchar que sus articulaciones emitían un crujido al no poder soportar la fuerza.


"Amo de la ciudad". Feng Ci le recordó, diciendo: "Si sigues apretando, mi brazo se romperá".


Aunque con el conocimiento y las habilidades médicas actuales del mundo de la cultivación, tratar un hueso roto no requería demasiado esfuerzo, es mejor evitar problemas innecesarios.


Definitivamente no quería seguir detrás de Pei QianYue todo el tiempo sosteniendo un brazo roto.


Pei QianYue no solo no se aflojó, sino que lo agarró aún más fuerte.


- Pero no tienes miedo.


 Pei QianYue volvió la cabeza hacia un lado, con voz fría: 

-Parece que no le temes a nada.

Independientemente de la montaña LingWu, la terraza LinXian o en este momento, Pei QianYue nunca sintió el más mínimo miedo o terror de él.


Feng Ci se rió: 


-¿Cómo puede haber alguien que no le tema a nada?

- Entonces, ¿este Venerable es indigno de hacerte sentir miedo?


 Agarrando el hueso de la muñeca de Feng Ci, Pei QianYue ejerció fuerza lentamente. La fuerza era tan pesada que prácticamente estaba a punto de romperse un hueso. Sin embargo, su tono siguió siendo frío e indiferente: 

-¿Tú sientes que este Venerable no te matará, o....... ¿No tienes miedo de la muerte?

Pei QianYue parecía extremadamente comprometido a hacer a otros este tipo de preguntas que determinan su destino.

Este venerable de verdad no abandonó a mi familiarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora