Un jugador en peligro

Capítulo 17

Harry se metió a la cama con una sonrisa, se imaginó desde hace unas semanas éste momento, empezó a dar vueltas alrededor de su cama por la alegría que siente, hace cuanto tiempo que no iba a dormir con una sincera sonrisa.

Al día siguiente Harry se levantó temprano, por más que no era un experto en la cocina, tiene la idea de
prepararle a Ginny el desayuno antes de que se retiré a entrenar, pero por más que intentará todo le sale fatal.

—Harry, ¿Qué haces en la cocina?—Ginny se acercó y apagó el fuego que sale de la sartén.

—Es complicado cocinar.

—Pero le hubieras dicho a Dobby o a kreacher que te preparen el desayuno.

—Lo quería hacer para ti.

Ginny sonrió y se acercó para besar a Harry, ese detalle es hermoso. —gracias.

—No salió como quería así que no tienes nada de que agradecer Ginny.

Harry, eres pésimo para la cocina, pero tuviste la intención de hacerlo por mí, te agradezco por eso, a la próxima puedes comprar el desayuno y me llevas a mi habitación.

Harry empezó a reírse por el comentario de Ginny.

—Tengo que irme o sino, llegará tarde al entrenamiento.

—Lo bueno que hoy es mi último día, mañana ya podré acompañarte a cualquier lugar que deseas ir.

—Al fin, Henry me cae bien, pero extraño tu compañía.

Harry se volvió acercar para besar a Ginny y dirigirse a la salida para ir a entrenar.

Ginny aprovechó toda la mañana para buscar información, necesita encontrar al culpable y la frustración cada día crece más.

—Maldita sea.

—Tan bonita y hablando esas cosas.

Ginny volteó rápidamente cuando escuchó la voz de Harry.

—Vienes tan temprano.

—Son las 3 de la tarde Ginny, está es la hora que vuelvo a mi casa.

Ginny observó todo alrededor, hay muchos papeles en la mesa, anotaciones y demás documentos, con un movimiento de varita logró que todo volviera a su lugar, en un segundo todo está ordenado.

—He estado tan ocupada con todo el trabajo que no me di cuenta que es la hora del almuerzo.

Harry llamó a Dobby para que sirviera la comida, mientras tanto se acercó donde Ginny y sin esperar a que ella le diga algo, él la abrazó y empezó a tocar su cabello.

—No estés así, verás que pronto todo se va a solucionar.

—Necesito encontrarlo Harry.

Lo entiendo y te comprendo, yo soy el más interesado en que aparezca esa persona, pero estas tan abrumada, tómate tu tiempo para leer cada documento sin necesidad de tirarlos al suelo.

—Tienes razón.

—Siempre la tengo.

—Que humilde eres. —y ambos empezaron a reírse.

—Amo Harry, el almuerzo ya está servido.

Harry ya se siente derrotado, a perdido la cuenta de las veces que le ha dicho a Kreacher y Dobby que lo llamen por su nombre, pero parece que nunca va a suceder.

Harry y Ginny caminaron hasta el comedor agarrados de la mano, fue un almuerzo lleno de risas, Harry le contó todo lo que había sucedido en su entrenamiento, el campeonato ya empezó por eso las prácticas son más fuertes.