Volvamos a empezar.

Capítulo 2.

Ya hace varios meses que Malú y yo no nos vemos. Hoy es el 25 aniversario de Cadena Dial y van a estar todos los artistas, entre ellos el amor de mi vida. Mis nervios aumentan cada segundo. Por lo que he podido ver por las redes sociales está mucho más guapa e irresistible. Bueno, como siempre...

Llego allí, paso por el photocall y me hago varias fotos con fans. Paso a ser entrevistada por una chica, me pregunta sobre mi disco y sobre la gira. Le respondo encantada.

Voy a una sala donde se encuentran todos los artistas conversando. Y como no, ahí está ella, esa que es la culpable de que cada noche le eche de menos, que no hay un día en el que no me arrepienta de lo que hice, porque además era consciente de lo que hacía, pero lo que yo no sabía era que no podía vivir sin ella.

Vamos Vanesa, ve y dale un buen beso, esos que a ella tanto le gustan, con sabor a que le he echado mucho de menos, pero... ¿y si me rechaza? ¿y si ya tiene novia? ¿y si ya se ha olvidado de mí? vale ¿qué hago hablando sola? cada vez estás peor, Vane.

Decidida, me acerco.

-Eh... hola... - Me rasco la cabeza.

-Ah, hola Vanesa. - Me sonríe. Joder, está preciosa. Vane, centrate.

-Esto... ¿qué tal? - Dios, me sudan las manos y hasta me cuesta pronunciar las palabras.

-Bueno, ahí vamos, ¿tú qué tal?

-Bien, osea, mal, eh... no sé. - Joder Vane, ¿qué haces? ¿por qué estás tan nerviosa? Ah sí, se me olvidaba, tengo a centímetros a la mujer de mi vida.

-Te noto un pelín nerviosa, ¿ocurre algo? - Vale, me ha pillado, tierra, trágame.

-¿Eh? No, nada...

-Vane, te conozco muy bien, no puedes fingir conmigo. - Maldigo entre dientes.

-Sí, ocurre algo... - Qué remedio, ya me ha pillado.

Malú va hacia una zona un poco más tranquila y se sienta en uno de los sofás que hay allí. Me siento a su lado y me aclaro la garganta, es hora de soltar todo lo que llevo tanto tiempo callando.

-Cuéntame.

-Verás...