Capítulo 20.

1.5K 53 5
                                    

Despierto de nuevo a las ocho de la mañana. Esta vez no me despierta el puto timbre, esta vez era el sol el que lo hacía. Por la noche se me olvidó cerrar la persiana y ahora me jodo. Aunque no tengo mucho sueño me quedo un rato en la cama con los ojos cerrados, pensando en letras para canciones, pero ninguna tenía sentido. Estaba claro que hoy no era mi día. Paso así un buen rato hasta que a las nueve suena el timbre, ya estaba tardando. Bajo corriendo porque estoy segura de que es el cartero, que me trae algo de mi admirador secreto. Al abrir, no me equivoco, es él.

-Buenos días. - Respondo con una sonrisa.

-Buenos días. ¿Te he despertado?

-No, hoy no. Te has salvado porque te hubiese matado. - Río.

-Bueno, bueno. Creo que ya no volveré a venir más por aquí, aún no lo sé.

-¿Ya no me vas a traer nada más de mi admirador secreto? - Pregunto algo extrañada. Qué raro, quería que el juego siguiese, me empezaba a gustar, para qué mentir.

-Creo que no. Una pena. - Responde con media sonrisa. Me está tirando la caña pero vamos, qué descarado el muchacho. Al darse cuenta de que yo no lo hago me entrega un pequeño paquete de forma rectangular. Vuelvo a agitarla pero esta vez no suena nada. Y no tengo ni idea de qué se trata, otra vez.

-Bueno... Hasta luego, bonita.

-Hasta luego... - Cierro deprisa para averiguar de que se trata el regalo que me trae hoy.

Lo abro ansiosa, y para mi sorpresa, descubro que es un libro. Todos mis futuros son contigo, de Marwan. Nunca lo había oído pero el título me llama la atención. Parece interesante. Paso las primeras páginas y en una de ellas hay una nota.

"Quiero saborear el paso de los días, quiero escribir París en tu mejilla, quiero que el riesgo se vuelva a apoderar de nuestros cuerpos, mientras te hablo de volver a intentarlo, mientras te digo, como siempre, quédate. "

Malú.

¿Cómo que Malú? ¿Qué clase de broma es esta? Porque no tiene ni puta gracia. Resoplo. Lo que faltaba. Se ha tomado muy a pecho lo de que no he recibido ni un regalo suyo. Vamos, estoy flipando.

Subo rápido y me visto para luego coger mi coche e ir a su casa. Al llegar llamo al timbre. Abre.

-Hola preciosa. - Sonríe.

-¿De qué cojones vas tía? - Pregunto con enfado e ira en mi voz. La señorita de hielo ataca.

-¿Cómo? - Lo dice sorprendida, como si no supiera de qué le hablo.

-¡No quiero tus putos regalos! - Le tiro el libro, las flores y los bombones a los pies, con rabia. Y no los pisoteo de milagro.- ¡quiero hechos, no regalos! ¡Sabes que tengo el dinero suficiente para comprarme lo que me plazca!

-No intentaba comprarte de ninguna forma. Solo te estaba dando pequeños detalles que pensaba que te gustarían... Lo siento. - Suspira.

-Pues no, Malú. No quiero detalles. Dame hechos, no palabras. Demuéstrame de verdad que quieres estar conmigo, que te importa una mierda la gente, la prensa y todo lo que digan. Porque ya sabes que yo no sé de sombras ni sabré. Demuéstrame todo lo que sientes por mí. Demuéstrame que me amas y que alguna vez lo has hecho.

-Voy a hacerlo. Lo prometo. Solo confía en mí.

-Bien, espero. Y por cierto, antes de ser infiel piénsalo mucho. Antes de ser infiel, piensa que estás cambiando tardes y noches enteras por, como mucho, dos horas. Que estás eligiendo besos de una persona que te tiene ganas en vez de la persona que te ama. Que estás prefiriendo a una persona para la cuál eres "alguien más" en vez de a la persona que quizás sea la única a la que de verdad le importes. Que estás eligiendo a alguien que pensó que estabas "buena" en vez de a alguien que piensa que eres la persona más hermosa del mundo. Que estás optando por alguien que te alimenta el ego en vez de optar por alguien que te llena el corazón. Que estás apartando de tu lado a alguien que daría la vida por ti, por a quien a penas le interesas. Que estás traicionando la confianza de alguien que piensa en ti las 24 horas del día los 365 días del año, a cambio de alguien que probablemente te olvide mañana, porque solo has sido eso, un puto polvo. Antes de serme infiel piensa que te amo de verdad, aunque eso suene un poco egocéntrico. Tal vez, hay personas en el mundo que necesitan que les recuerden estas palabras, el amor de verdad, no se acaba nunca, y el otro, solo dura un instante en una larga vida.

-Nunca te he sido infiel. ¿A qué viene eso? La que me fuiste infiel fuiste tú. No me eches en cara nada que yo no he hecho.

-Es cierto, yo también lo he hecho. Y me arrepiento. Pero tú no te quedas atrás, guapa. ¿Qué hay de lo de Patricia? ¿Eh? - Vale, acabo de meter la pata un poco pero aquí no ha pasado nada...

-Me acosté con ella y ya. No creo que eso sea ponerte los cuernos cuando tú y yo no éramos nada.

-Vale, no éramos nada. Pero ponte un poquito en mi lugar. Estás tonteando conmigo, mucho. Vas a besarme pero eh, te quedas con las ganas. Justo cuando me duermo te vas a ver a tu ex, a la que hace mil años que no ves y de la que se supone que ya no sientes nada por ella. Te la tiras, te pillo y tras eso acabo en la azotea de un hospital con no sé cuantos metros bajo mis pies. Derrumbada y sin ganas de seguir. Vienes, me dices que me baje, hablamos y me voy dejándote con la palabra en la boca y ni fuiste capaz de ir por mí y hablar las cosas con calma. Y apuesto a que te fuiste con ella.

-Tal vez no hice las cosas como debería. No fui por ti porque quería dejarte espacio. Y no, no me fui con ella. Me fui a uno de los baños a llorar. - Río sarcásticamente, no puedo creerlo.

-Vamos, Malú, no me vengas con esas. Sabes perfectamente que no me gusta que me dejen espacio en una discusión a menos que yo te lo pida. Pero en ese caso no lo hice. Me conoces mejor que nadie y aún así no fuiste capaz de hacer nada aun sabiendo que estaba rota por dentro, que te necesitaba más que a nada en esos momento. No fuiste capaz de hacer nada, como siempre, no sé de qué me sorp... - Me besa, me besa como nunca lo ha hecho. Al juntar nuestro labios parecen dos piezas de puzzle encajada a la perfección. Echaba de menos derretirme en ellos y hacerle saber que soy tan suya que ni yo misma me lo aguanto. La echaba tanto de menos... Pero no, ahora no es el momento. Me he convertido en la mujer de hielo y va a tener que hacer mucho para quitarme la coraza. Cuando creo que ya he saboreado demasiado sus labios y he vuelto a cogerle su sabor, le aparto, aunque no quiera.- no Malú. Ahora no, demuéstrame que realmente quieres estar conmigo y no intentes comprarme con regalos.

Le doy un beso ligero, dejándole con la miel en los labios. Me monto en mi coche y vuelvo a ir a ningún sitio en concreto, sin rumbo. Pero al final, siempre acabo donde quería. En una montaña. Sola, respirando paz y tranquilidad y pensando en todo, cómo no. Y hasta por la noche, no vuelvo a casa. Para otra vez darle vueltas a lo mismo una y otra vez sin cesar. Está claro que no podemos seguir así.

Ahora vuelvo a pensar que no debería haberle besado, he roto yo misma mi coraza de hielo. Aun quedan unos cachitos, creo que puedo volver a construirla. Me acuerdo de un poema de Elvira Sastre que en estos momentos me identifica muchísimo, y decido enviárselo en un mensaje.

"Si alguna vez te quise fue cuando te escapabas de puntillas, cuando pedías por favor que te salvase sin que te viera.

Si en alguna ocasión lo hice, fue en ese baño sucio lleno de nombres y siglas que es tu corazón.

En algún desorden de consciencia, en alguna tormenta sin paraguas.
Si hubo un momento en el que lo hice no recuerdo haberlo olvidado.

Porque si alguna vez te quise, fue temblando.
Porque si alguna vez lo hice, fue sin querer.

Porque si alguna vez te quise, fue odiando.
Porque, si alguna vez me quisiste, fue mentira."

No sé si me he pasado un poco, pero era lo que me apetecía en ese momento. Y de una forma u otra le estoy demostrando que esta vez no se lo voy a poner tan fácil. Eso sí, espero que no vuelva a romperme de nuevo la coraza de chica dura tan rápido. Porque si lo hace, caeré en sus brazos, sin ninguna salida para mi escape. Y todos mis intentos por hacer que me conquiste quedarán solo en un pasado lejano que jamás fue.

Cumples un año más y por suerte lo paso a tu lado. El primero de muchos, bonita. Para lo que necesites tu enana seguirá estando aquí para ti. ¡Feliz cumpleaños cielo!

AJR.

Volvamos a empezar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora