30. La despedida

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(24 de enero, 5:30 PM, autopista. Lado A.)

El día al fin había llegado. Aquel en donde Edgeworth y sus amigos irían a tener aquella celebración que tanto habían presagiado, la despedida de soltero. O bueno, quizá tan solo los amigos de Miles, pues el fiscal en realidad ignoró por completo el evento; estando más concentrado en la planeación de la propia boda. Mientras que los demás sonreían algo nerviosos. Para esa hora el sol ya estaba a punto de ocultarse, y la noche estaba por comenzar.

Ahí se encontraban los cuatro. Phoenix, Larry, Gumshoe, y el propio Miles iban en el auto. De hecho el conductor no era otro que Larry. Todos iban vestidos de manera semiformal, camisas a botón sin corbata, y chaquetas abiertas, algunos usando zapatos cómodos, y Butz usando una extravagante chaqueta de cuero negra.

—¡No puedo creer que el día haya llegado, Edgy! —exclamó Larry casi llorando de la emoción.

—Larry... Actúas como si esto importara más que mi propia boda. —señaló Edgeworth algo dudoso, desde el asiento del copiloto.

—¡Es que lo es! ¡Al menos solo un poco más! —dijo muy inspirado.

—Larry, por favor...

—Ya conoces como es Larry con estos eventos, Edgeworth. —dijo Phoenix riendo en el asiento trasero derecho.

(Ese Larry, es por fin su oportunidad de redimirse por lo ocurrido el 4 de julio.)

Había sido un inicio de año bastante bueno para Phoenix. A punto de cumplir un mes más sobrio, con la espalda casi rota de tanto trabajar, pero feliz por haber tenido ya varias citas con Iris. Incluso Trucy comenzó a vivir una semana con ella, y otra con Wright. Se podía decir que la relación entre los tres iba sanando con el pasar de los meses. Y se podía notar en la sonrisa del ex abogado un espíritu que no había sentido desde hacía tiempo.

—Aunque razón no le falta a su amigo, señor Edgeworth. —añadió el inspector Gumshoe sonriendo enseñando los dientes. —Luego de la boda será todo un hombre de casa.

—¡Seguiré trabajando! —se quejó Edgeworth.

—No lo sé, Edgy. La imagen de amo de casa, no te queda nada mal. —bromeó Larry con una sonrisa boba.

—Cierra la boca, Larry. —dijo enojado.

—¡No seas malo, Edgy! No luego de la sorpresa que te tengo preparada. —dijo muy sonriente Larry.

Fue ahí cuando Phoenix se dio cuenta de que en realidad no sabía a dónde se dirigían para hacer la celebración. Había estado tan ocupado con sus trabajos, que no tuvo oportunidad de preguntarle a Larry el lugar de la despedida. Simplemente pasaron por él al día acordado.

—A propósito, ¿a dónde estamos yendo? —preguntó Phoenix nerviosamente.

—Oh, ya lo verás. Nos dirigimos a uno de los mejores bufets de comida de la ciudad, pienso romper mi dieta, y darnos el lujo de comer todo lo que nos apetezca. —dijo Edgeworth muy entusiasmado.

(Vaya, no sabía que estaba a dieta...)

Lo que sus amigos no sospechaban, era que Edgeworth planeaba coronar la noche yendo a ver la película del Samurái de Acero en conmemoración de su quince aniversario.

—Bueno, suena a un plan excelente. —comentó Phoenix. —Es el fin de una etapa, amigo. Qué mejor haciendo lo que quieras. —le apoyó, y Edgeworth sonrió al escuchar esto.

—Gracias, elegirlo fue complicado por...

—Sí. Sobre eso, habrá un pequeño cambio de planes. —los interrumpió Larry de repente.

El Corazón Que No Late - Phoenix Wright Ace Attorney +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora