Capítulo 18

1.2K 90 0
                                    

- Dice espero que disfrutes la cama con la mini viuda – se sonrojó aún más – él y sus comentarios

- Bueno tiene razón – Kai la miró sorprendida – vamos a dormir bastante en los días que tengas que hacer reposo

- Es verdad – asintió besando su mejilla – te queda hermosa mi ropa, lyubov'

- Cuando quieras uso tu ropa – sonrió mirándola - ¿nos acostamos así descanses?

- Por supuesto

Se estaban por acostar en la cama, cuando Yelena vio que los ojos de Kai se iluminaron y parecía que estaba en una especie de transe, mientras que la chica apareció frente a su mejor amiga que la miraba con una sonrisa traviesa.

- Torpe – Natasha la miró con una sonrisa – te llame para preguntarte si necesitaban algo

- Ahora que lo dices sí – asintió mirándola – puedes comprar todo para preparar macarrones con queso, salsa picante, el vodka favorito de Lena y traerlo a la cabaña ¿por favor?

- Por supuesto, ustedes descansen que yo llevó todo en un rato – asintió – ahora regresa antes de que se preocupe

- Gracias, te quiero Nat – besó su mejilla

La viuda negra se rio cuando la imagen de su mejor amiga desapareció, volviendo a estar consciente en la cabaña, mientras que Yelena había tomado su rostro entre sus manos mirándola bastante preocupada por el estado en el que había quedado, hasta que vio que sus ojos regresaron a la normalidad.

- ¿Estás bien? – acarició su mejilla mientras Kai rodeaba con uno de sus brazos su cintura – tus ojos se iluminaron y desapareciste

- Estoy bien, Yel – sonrió acercando a la chica a su cuerpo para besarla – eso pasa cuando dicen mi nombre para llamarme, que me trasporto con la mente, tu hermana quería hablar conmigo un segundo

- Oh – respiró aliviada mirándola – ahora sé para la próxima, aparecer como un fantasma frente a ella ¿verdad? – vio que asintió – eso es asombroso

- A veces lo es – sonrió – vamos a acostarnos un poco

Se acostaron en la cama, sintiendo la comodidad que era, Yelena miró a la chica antes de acostarse en su pecho acariciando su abdomen por fuera de la remera, está la rodeo con sus brazos quedándose dormida rápidamente, pues los medicamentos aun estaban en su sistema, lo que la hacia estar cansada. Yelena se había quedado mirándola dormir un rato, observando el rostro relajado y lo dulce que era, hasta que se quedó dormida escuchando el latido de su corazón.

Cuando Yelena se despertó horas más tarde, se preocupó al no ver a Kai recostada a su lado, salió de la habitación rápidamente para bajar las escaleras encontrándose con que la mesa estaba pues, había dos copas, sintiendo el aroma de algo cocinándose en la pequeña cocina que había allí, al acercarse vio a la joven Rogers con un simple short y las vendas que cubrían su torso, estaba descalza mientras con una mano se encontraba cocinando.

- Hey – Kai se giró sonriendo enormemente – me desperté y no estabas allí ¿Qué estás haciendo?

- Preparando nuestra cena – se acercó para besar cortamente sus labios – ya casi está lista, si quieres servir el vino

- ¿preparando la cena? – estaba confundida mirándola – Kai te hirieron y dieron el alta hace unas horas, no puedes estar cocinando – se cruzó de brazos – además ¿saliste a buscar todo esto?

- No, le pedí a tu hermana si podía traer las cosas – sonrió mirándola – lo dejó hace un rato, ella puso la mesa para que no estuviera haciendo tanto esfuerzo – hizo una carita de cachorrito – vamos, estoy preparando una cena para ambas no te molestes

Eres tú - Yelena BelovaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora