Eres tú - Yelena Belova

Capítulo 28

- ¿Qué ocurre mini viuda? – le permitió primero el paso al laboratorio

- Los demás están haciendo sentir mal a mi prometida – Tony se sorprendió – hay posibilidades de que vayas a la ciudad y traigas muchas hamburguesas con queso para Kai

- Claro, ahora voy rápido y regreso – asintió activando su traje – sí terminaste de almorzar, vayan a la cabaña, dejó allí la comida

- Gracias Stark, te debo una – asintió agradecida

- No me debes nada, Lena – la chica se sorprendió –a mi mejor amiga es feliz contigo, te diste cuenta de eso y no quieres que se sienta incomoda, así que mientras la hagas feliz no me debes nada

- De verdad, gracias – asintió dándole un abrazo

Ambos salieron del laboratorio mientras Tony se iba rápidamente volando del complejo a la ciudad, los vengadores quedaron algo confundidos por esto, antes de que Yelena le susurrara a su novia que leyera su mente, cuando está lo hizo vio imágenes subidas de tono que tenía donde la invitaba rápidamente a la cabaña. Se disculparon con los demás, diciéndoles que los veían en la fiesta, antes de que Kai levantara con un solo brazo a su novia llevándola hasta el lugar.

Antes de entrar Kai casi fríe los circuitos del traje de Stark cuando aterrizo de sorpresa fuera de la cabaña, le paso varias bolsas a Yelena antes de salir corriendo para que su mejor amiga no lo golpeara, la chica estaba confundida por la situación aún más cuando su prometida tiró de su brazo haciéndola entrar con ella. Se sentaron en la pequeña mesa que había en la cabaña mientras que Yelena sacaba las hamburguesas de las bolsas que había traído el hombre, miró a su novia con una sonrisa comprensiva.

- Anda, sé que tienes hambre aún – su sonrisa se borró cuando vio a su novia bajar la mirada – hey, lyubov' – se levantó rodeándola con sus brazos - ¿Qué ocurre?

- Es sólo que me sentí mal por tener tanta hambre – las lágrimas se escaparon sin que pudiera evitarlo – no quería que los demás se quedaran sin poder repetir

- Hey, ellos son unos torpes no les hagas caso – la abrazaba lo más fuerte que podía – no puedo ni imaginar lo que pasaste ese mes en ese lugar, pero puedo presentir que no comiste mucho ¿verdad?

- Solo un trozo de pan por día – Yelena sintió un dolor en su pecho por eso – cuando no estaba inconsciente por los golpes y sedantes, lo siento

- No, no – llevó sus manos al rostro de la chica haciendo que la mirara – no tienes nada por lo que disculparte, ni esconderte de mí ¿sí? Por eso le pedí a Tony que fuera a buscarte todas estás hamburguesas para que comas tranquila

- Gracias, lyubov' – la miró con una pequeña sonrisa – por no juzgarme con todo lo que paso

- Como dije no es tu culpa lo que te paso – acarició su mejilla besando cortamente sus labios – yo tengo que disculparme por permitir que te llevaran y te lastimaran de esa manera

- No podías hacer nada – negó acariciando su cintura – yo me entregue para que los dejaran en paz a ustedes

- ¡Kai! – le dio un golpe en el hombro - ¿Por qué hiciste eso?

- No iba a permitir que lastimaran a mi familia ni mucho menos a ti – rodeo su cintura sentando a la chica en sus piernas – lo haría mil veces más, con tal de que estés a salvo

- Yo también quiero que tú estés a salvo – rodeo su cuello con sus manos acariciando lentamente su cabello – no quiero perder al amor de mi vida

- Te amo, lyubov' – sonrió tímidamente besando con ternura su boca - ¿me acompañas mientras como?