PRÓLOGO

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"Podemos conocernos..."

Una suave y linda melodía sonaba de fondo, inundando aquella mansión donde algunas personas charlaban y otras comían algunos aperitivos.

Era de las mejores noches.

Habían personas de alto nivel social, personas muy reconocidas; uno que otro diseñador tan conocido como el famoso Gabriel Agreste. Estaba segura de que esa era de las mejores noches. Por un momento se sintió fuera de lugar, sin embargo Alya le hizo ver lo feliz que debía de estar cuando más de alguno le hubo halagado por el lindo vestido celeste que llevaba puesto, y que ella misma había diseñado y hecho.

Más de alguna ocasión en la semana, sus amigos le habían hablado de la gran oportunidad que ella tenía esa noche: captar la atención de algún diseñador.

Al principio le pareció un poco extraño recibir tal invitación del señor Gabriel, sin embargo todos sus compañeros estaban tan feliz como ella al asistir a la gran mansión, tanto que todos se emocionaron por lo que vestirían para esa tarde.

–Vamos, Marinette, tú puedes.–animó Alya, quien veía a su amiga nerviosa luego de ser llamada por Gabriel Agreste.

Gabriel había escuchado mucho de Marinette de parte de su hijo Adrien, quien le decía lo increíble diseñadora que era, y no era para menos que más de algunos colegas hablaran de ella luego de ver su lindo y moderno vestido.

–Señorita Dupain, ¿no?–preguntó el hombre al mirarla de pies a cabeza.

Parecía demasiado serio, al principio hasta sintió temor. Sin embargo intentó calmarse al entender que él era una persona así, y que debía de dar lo mejor de ella.

–Sí, señor Agreste.–le regaló una corta sonrisa y él le señaló que le siguiera, donde una mujer joven y un hombre charlaban entre sí.

La primera, era la mujer que le había visto detenidamente por unos minutos. Al princio le pareció que tal vez la estaba juzgando o algo por el estilo, sin embargo al final se acercó a ella con una sonrisa y comenzó a preguntar sobre el diseñador de su vestido.
El segundo, el hombre bajo y de traje marrón y de un acento alemán, le había visto y se le había acercado con una sonrisa de oreja a oreja, halagado tal vestido.

En realidad ni siquiera entendía por qué las personas habían puesto su mira en ella cuando en relación sentía que le había faltado un poco más de pasión a la hora de confeccionar su vestido.

Para Marinette esa era la oportunidad, dado que Gabriel también hablaba bien de ella y los diseños que hizo para el evento y que también había hecho en diversas ocasiones, y que Adrien había utilizado...

Adrien... por un momento olvidó todo y recordó a Adrien. No le había visto después que llegaron. ¿Dónde estaría?

De repente, la atención de todas las personas se dirigió a una voz proveniente de algún lugar. Esta voz anunciaba algo importante, algo sobre "la pareja de la noche" algo que parecía muy importante, algo que en realidad parecía ser el mayor motivo de aquello.

La música cambió a una más lenta y melodiosa, cuando de los grandes escalones, señalados por una fuerte iluminación, bajaba Adrien junto a... Lila Rossi.

No pudo evitar sentir una fuerte impresión al momento de verlos. Adrien tomaba de la mano a Lila mientras esta formaba una amplía sonrisa, una que se amplió más al observar a Marinette entre la multitud.

Todas las personas aplaudieron al verlos bajar el último escalón y ver cómo Adrien besaba los nudillos de la chica.

Vaya, eso fue un fuerte golpe en el pecho de Marinette. ¿Cómo había ocurrido eso?

SI DECIDES QUEDARTE ( Marichat )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora