Capítulo 20

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"Fuiste tú..."

Cuando Marinette por fin se quedó dormida, Chat Noir decidió que ya era hora de irse. Le dejó un casto beso en su frente y luego de eso salió por la trampilla.

En realidad el héroe nunca creyó que esa misma noche, mientras volvía a casa, se encontraría con la misma mujer a la que él creía que conocía demasiado.

Ella bajó de un auto negro y alzando su vista hacia donde Chat Noir estaba; entonces lo llamó para que se acercara a ella.

Lo primero que hizo él fue saludar, teniendo una respuesta de ella. Después, sin perder más tiempo, Nathalie le soltó a Chat Noir la propuesta que tenía para él.

¿Había entendido bien? Nathalie le dijo que el mismo Gabriel Agreste deseaba que Chat Noir fuera parte del jurado del evento que tendrían ese sábado; algo que hasta cierto punto, en el fondo de su corazón, le pareció algo planeado con tanta rapidez.

Y claro que él se negó varias veces, sin embargo la misma Nathalie, quien era muy obvio que su salud seguía decayendo, no iba a rendirse tan fácilmente.

¿Pero qué fue lo que le hizo cambiar de opinión? Tal vez fue él hecho de que Nathalie le dijera que también le diría a Ladybug (aunque la probabilidad de que ella dijera que sí fuera baja); o tal vez fue el momento en que ella mencionó a las participantes y pensó en lo cerca que estaría de Marinette; o incluso tal vez fue el hecho de que tuvo una pequeña chispa de felicidad al pensar que el mismo Gabriel quería que estuviera participando ahí, cerca de él, aun cuando no sabía que su hijo se encontrara tras la máscara.

Con esto último, la mujer supo que había logrado su objetivo, y es que, el semblante de Chat Noir por alguna razón cambió completamente, y aunque no supo por qué, él parecía ilusionado con esa idea.

                               ( • • • )

Para la mañana, la azabache despertó sentándose en el borde de su cama por varios minutos. Y es que aunque parecía que aún era muy temprano, como para poder seguir durmiendo, ella parecía perdida en aquel sueño que había tenido la noche anterior.

No, no era un sueño.

Era real, Chat Noir había confesado sus sentimientos hacia ella.

¿Y qué más? Ella también había hecho lo mismo.

¡Chat Noir le había dicho que le gustaba!

Se tiró a la cama con las manos en su rostro y se mordió inevitablemente el labio inferior, suspirando con profundidad.

–Chat Noir me quiere...–susurró– Me quiere más que como una amiga.

–Créeme que lo noté–Se escuchó una vocecilla cerca de ella–. Lo noté con esos besos tan "discretos" por toda su cara.

Marinette se enrojeció de vergüenza en ese mismo instante, y por su puesto se levantó de la cama para evitar a toda costa que su pequeña amiga le dijera algo más.

–Oh, vamos, no puedes ignorar que eso pasó.

–No lo ignoro, es solo que...–De espaldas a ella, sonrió con timidez–. Aún sigo sin creer que él me quiera de esa manera.

–Bueno, él ya quería a Ladybug, ¿no?

La chica comenzó a guardar sus cosas en su mochila y volvió a hablar.

–Tú lo has dicho: Quería a Ladybug. Y yo soy Marinette.

–¿Que a caso no es lo mismo?

–No...–susurró, negó con su cabeza y la miró–. No lo es.

SI DECIDES QUEDARTE ( Marichat )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora