Capítulo:1

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I was never there - The weekend

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Todo lo que veo a mi alrededor es oscuridad, la desesperación comienza a aparecer, siento mi corazón explotar, no tengo ni la menor idea de donde me encuentro, camino a donde me parece más lógico, lo único que pido es que nada malo me pase.

Lo único que escucho son el crujir de las ramas, bajo mis pies y mi respiración que intento controlar, intento pensar que saldré de esta y no me va a pasar nada, pero cualquier pensamiento positivo desaparece cuando escucho crujir las ramas y me doy cuenta que son otras pisadas, me detengo abruptamente, el sonido cesa, en un segundo el sonido es más fuerte y se escucha más cerca, no lo pienso más y corro lo más lejos que puedo.

El aire choca contra mi cara.

Las pisadas se escuchan más cerca, mi respiración es entrecortada, mi piernas flaquean ante esa maratón, en un momento me encuentro en el suelo, mis manos arden cuando tocan el suelo, me caí, cuando intento levantarme una punzada de dolor se instala en mi tobillo derecho, me muevo todavía en el suelo, mi espalda choca en un enorme árbol, tomo mis piernas y las junto contra mi pecho.

Las pisadas se escuchan tan cerca, son lentas y fuertes, mi cuerpo tiembla de miedo y del frío que cala hasta mis huesos, entonces aparece en mi campo de visión una figura alta, la escasez de luz se me hace imposible saber de quien es, o al menos apreciar su rostro, cuando esta lo suficiente cerca puedo distinguir su cabello oscuro sus ojos, pero puedo ver sus ojos rojos brillar entre sus mechones y una sonrisa tan grande y maliciosa.

Es el, me quiere matar.

Intento levantarme, la figura me toma del cuello, en un milisegundo se movió hasta mi, aprieta mi cuello con una fuerza sobrehumana casi estrangulandome, la presión es insoportable, cuando estoy apunto de desvanecer me susurro con voz rasposa:

—Pagaras por llevártela de mi lado, maldita humana— siento como me suelta y me deja caer.

Me levanto de golpe, un mareo me hace agarrar mi cabeza, toco mi cuello tratando de quitar la sensación de que me estoy ahogando, solo fue una pesadilla, no me equivoque en sacar a mi hija de ese lugar infernal lleno de fenómenos, he hecho de todo por mi familia y lo seguiré haciendo, esa bestia nunca tendrá a mi niña.

Veo al lado de mi cama a mi esposo que duerme tranquilo, me levanto y bajo a la cocina por un café, al ver la hora son las tres de la mañana.

Tengo un pasado como todos, y salvar a mi hija nunca será un error y menos me voy a arrepentir, no me arrepiento de lo que hice fue la única salida sin que ese hombre si es que se le puede llamar así, pudiera encontrarla.

El me la quitaría, la alejaría de mi de su madre.

La parte de mi juventud fui cazadora no cualquiera, si no de criaturas, prefiero decir monstruos, tuve por desgracia una aventura con uno de esos seres, pero recapacite y entonces encontré a mi esposo lo mejor que había tenido, cuando supe que tendría un bebé fue una felicidad inexplicable, quería retirarme de mi oficio para poder tener a salvo a mi bebé, pero nos buscaron para un último trabajo, cazar una bruja.
Es la última caza, recuerdo a ver dicho, pero esa caza cambio todo.

Cambio nuestro futuro y el de mi hija, la condene.

Esa noche tomamos el camino hacia el bosque eras las doce de la mañana, lo único que nos alumbraba era una lámpara de aceite, encontrarla y capturarla no fue lo complicado, además la experiencia, estaba a punto de encender la fogata con ella en el centro cuando algo que dijo captó mi atención.

—Estas en cinta, ¿cierto?

Levante mi mirada hacia la señora arrugada vestida de trapos viejos pero con unos ojos celestes tan hipnotizantes. Era un ser despreciable.

—¿Qué?— Pregunté, abrace mi abdomen.

En parte no me sorprendía es una bruja, es un monstruo que no tiene perdón por existir que por desgracia tenía dones.

—Sueltame muchacha, estas tan equivocada no soy lo que hacen creer. — me pidió.

—No creo estarlo.— impulse alzando mi mentón.

—No puedes hacer esto sin recibir una castigo por ello, lo pagarás. — gruño intentado liberarse.

—¿Qué vas hacer bruja? Ah, ¿y tu varita? ha si es verdad la queme ¿tu escoba? la usaré para limpiar mi piso, vieja estúpida. — escupí.

—Eres tan mala persona.—Dice con cara de horror.

Río.

—Tu misma lo dijiste pero soy una persona,tu eres un fenómeno que no merece existir—grito.

—¡Tú bebé pagará por esto, humana inmunda!— grita maldiciendo.

—Callate maldita.— solté.

Sin dudarlo enciendo la hoguera, la bruja ardía en llamas, sus gritos desgarradores hacían mi sonrisa crecer, mi esposo abrazo mis hombros, después todo se volvió negro, la bruja maldita si cumplió su amenaza.

vuelvo a la realidad sin querer acordarme de las palabras de esa bruja antes de morir, lo único que me consuela es su muerte, hace mucho tiempo no me acordaba de mi pasado. Al poco tiempo nos mudamos lo más lejos posible, en este sitio tuve la mitad de mi embarazo y dí a luz, una sonrisa aparece en mi rostro al recordar tenerla en mis brazos tan pequeña tan frágil, ese día me hice la promesa que la protegería a toda costa aunque llegara a odiarme, no me importaría.

Mi ánimos vuelven a decaer cuando nos hablaron para decir que mi hija tenía la marca de una luna, pareja de una criatura lo peor al líder de ellas.

Daría la vida por la de ella.

Dejo el agua en la cocina calentando y subo nuevamente, abro lentamente la puerta, mi niña creció tan rápido parece tan irreal que ya han pasado casi diezcisiete años, su cabello castaño se encuentra en toda su cara y almohada.

Ella a sido tan buena, inteligente y nunca me a dado problemas todas las mamás ponen a mi hija de ejemplo, se a ganada varias enemigas, que intentaron arruinar sus momentos, nunca lo permití, ninguna mocosa podría meterse con mi bebé, qcuando ella tenía siete, intente quedar embarazada nuevamente pero descubrí que ya no puedo, por la culpa de esa noche, mi fertilidad es casi inexistente, nadie puede describir porque pero para mi estaas que claro.
Cuando bajo mi esposo esta el haciendo café.

—¿Pesadillas otra vez? —Me pregunta, mientras me entrega mi taza con café.
Asiento suspirando, es algo que me pasa, pero no es tan seguido hasta que esta creca el cumpleaños de Abby.

Todo eso me remueve todos los recuerdos.

Tomamos de nuestras tazas y decidimos subir a alistarnos para el día de hoy ya que aunque me acueste, no podré dormir nuevamente. Será un día largo no tengo dudas de ello.

Aby, cariño te amo, nunca lo dudes.

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Hello, este es mi primer capitulo espero que le haya gustado, no olviden votor por fa.

¿Ustedes nunca han tenido a un ser que es muy sobreprotector y llega a ser cruel?

Bye❤️

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