La Promesa Consumida-2 ✔

Capítulo 31

Doy con el corazón de la manzana justo cuando la película, a la que le he dedicado prácticamente todo el tiempo de mi tarde, termina. A decir verdad he estado más  acariciando a Repelente, que no se ha separado de mí en ningún momento desde que he vuelto de la uni, que enterándome de la película.

Le doy un beso a Repelente antes de apartarlo suavemente y comenzar a recoger las cosas desperdigadas por el salón. Estiro mi cuerpo y miro la hora. Son las seis, quedan tres horas para el partido, pero tengo que estar ahí a las siete. Limpio los platos y voy hasta mi habitación donde la ropa y la mochila están encima de la cama, preparadas desde hace horas.

Escucho un maullido antes de que Repelente pase por mis piernas y pegue un salto hasta la cama.

—¿Te gusta?—pregunto, quitándome la ropa.

Repelente huele la falda. Al instante, arruga la nariz.

—Ya, podría ser mejor.

Mientras me cambio, lanzo un par de mis calcetines que Repelente ha arañado. Al parecer la única diversión de Repelente no es desaparecer durante horas y solo aparecer cuando huele comida, sino rebuscar entre mis cosas y destrozar todo lo que pille. Mismamente, hoy al llegar al piso he descubierto todo mi armario patas arriba, por suerte ningún destrozo más allá de ese par de calcetines, que son con los que está jugando ahora.

Deslizo la ropa de animadora por mi cuerpo y después me hago la coleta alta. El lazo es la parte más difícil, por suerte estuve mirando tutoriales en internet de como colocarlo de manera que quede bonita y eficiente, así que ya solo me queda el maquillaje. En este aspecto Abby también me ha ayudado mandándome un videotutorial de como hacerlo. Ella quería venir presencialmente y hacerlo con sus manos, pero tenía que llevar a su hermano al cumpleaños de un amigo por lo que nos veremos directamente en el pabellón de la universidad.

Abby ha seguido al pie de la letra como debe ser mi maquillaje en función de cómo van las demás, de tal forma que todas vayamos iguales pero con distintos matices propios. En mi caso Abby ha decidido un delineador azul clarito que hace que mis ojos grises se vean aún más claros. En un principio creía que tal la forma daría a mis ojos a que parecieran como los de un fantasma, pero a decir verdad, me gusta. Resalta esa zona de mi rostro y me da una seguridad bastante agradable.

Una vez terminada vuelvo hasta Repelente, que sigue jugando con mis calcetines.

Doy una vuelta sobre mi misma haciendo que el brillo de la falda aturda a Repelente.

—¿Qué te parece? 

Mi gato se lame su pata para seguidamente ir hasta mí y acariciar su cara en mi tobillo.

Aplaudo, orgullosa por mi trabajo.

Cojo mi abrigo y mis cosas. Salgo del apartamento, agradeciendo a Repelente por su ayuda mediante una caricia y bajo hasta dar con mi coche. Llego diez minutos antes al lugar donde hemos quedado las animadoras que se trata del hall de la universidad. Aún no hay público, más allá de los conserjes y de algún profesor que ha decidido venir, hasta que diviso a las animadoras al fondo del pasillo. Aún quedan dos horas para el partido, una de esas horas nos toca a nosotras para repasar el baile.

Me apresuro a alcanzarlas y vamos hasta el interior del polideportivo de la universidad, ahora vacío, hasta dentro de dos horas. El silencio que hay parece eterno, contrastando con el bullicio que habrá.

—¡Bien chicas, hoy es un partido importante así que quiero que deis más de lo que podéis!—grita la capitana yendo hasta el altavoz donde comienza a poner la música—. ¡No permito fallos y mucho menos distracciones y por supuesto debemos demostrar lo que sabemos hacer!