07: «Cambios»

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Las personas que te empujan al abismo en ocasiones son las mismas que te ayudan a salir de él—Umbra.

Las personas que te empujan al abismo en ocasiones son las mismas que te ayudan a salir de él—Umbra

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JACEL

Abro los ojos cuando la maldita alarma hace ruido por todo el lugar. Hundo mi rostro en la almohada y gruño unos segundos antes de levantarme. Por suerte ya es viernes, ayer se suponía que iría al club, pero me escapé de Joshiel, estaba de mal humor, las actitudes de mi hermano mayor me tienen bastante alterado, es realmente molesto que no sea el de siempre. No tengo idea de cómo actuar frente a él, mucho menos cuando me trata de forma amable. Estoy aterrado, tanto que intento contener mis sentimientos en un lugar muy profundo en mi pecho.

¿Fue verdad lo que dijo? Niego y paso mis manos por mi cabello. Formo una sonrisa cuando se me ocurre una idea. Si mi hermano realmente cambió, entonces veremos si me acepta tal cual soy.

—Hora de cambiar de look —susurro malicioso.

Me levanto rápidamente y entro al baño de mi habitación, no pasan ni veinte minutos antes de que baje las escaleras listo para salir. Por suerte ya me depositaron mi sueldo, trabaje en Nova me da un buen dinero, tengo una cuenta de ahorro en la que deposito el dinero que no ocuparé en el mes.

Me detengo de golpe al quedar de frente con la mujer que me dio a luz, luce más delgada de lo normal, evito mirarla, cruzo por su lado y rápidamente me preparo un desayuno medianamente decente.

—¿Vas a salir? —Trago un pedazo de tostada e ignoro su pregunta—. Jacel…

Mi móvil resuena por el lugar, lo saco de mi bolsillo trasero y respondo la llamada de Jake.

—Ey, hola, ¿ya vienes? —pregunto apenas coloco el apartado en mi campo de audición.

Estoy afuera, sal.

Corto la llamada y salgo de la cocina bajo la mirada de la mujer castaña. Una vez fuera me dirijo hacia el coche de mi amigo, no es suyo, más bien de su padre.

—¿A dónde vamos, corazón? —Me lo pienso unos segundos y luego sonrío.

—Quiero hacerme un cambio de look.

—Pero si estás que te caes de lo bueno con ese look despreocupado que has venido cargando.

Entorno los ojos y le indico que nos pongamos en marcha. En el camino al centro le explico mi deseo de un cambio y como siempre él me secunda en mis decisiones.

***

Muy bien, mi cabello ahora es más negro que la noche, me gusta lo desordenado que luce, queda perfecto con mis prendas rockeras. Miro mis uñas negras y sonrío, ya quiero ver la reacción de mi hermano cuando me vea.

Elevo una ceja al notar que Jake está recostado sobre el sofá que hay en la zona de vestidores en la tienda en la que decidí comprar mi ropa, el rubio de rizos tiene su móvil apuntando hacia mí. Me está tomando fotos a diestra y siniestra.

—¿Qué demonios haces? —Él baja su móvil y me mira mordiendo su labio inferior.

Él no es de los que ocultan sus deseos y mucho menos sus pensamientos lacivos.

—Dime que puedo quitarte esa ropa y dejar que me la me…

—Cierra la boca —Se ríe mientras tengo mi mano sobre su boca—. Eres un maldito pervertido.

—Ay, solo expreso mis deseos, guapo —Quito mi mano y le dedico mi dedo corazón.

—Vamos.

—¿Y todo lo que compraste?

—Lo enviaran luego, solo debo pagar el transporte.

Me encojo de hombros y camino hacia la salida, las mujeres que trabajan en el lugar nos miran y me agradecen por la enorme compra que hice. Ahora tendré descuentos en mis próximas compras, o algo así dijo la dueña.

—¿Aún no hablas con Jerome? —Hago una mueca cuando saca ese tema mientras nos dirigimos hacia algún restaurante—. No hagas esa cara, sabes que todos nosotros te queremos, Jacel, sí él te ofendió no fue queriendo, se equivocó, ha estado pasándola muy mal estos días, deberías hablar con él o al menos responder sus llamadas.

Bien, puedo admitir que he estado castigando a Jerome estos días, pero vamos, soy alguien bastante rencoroso y ya sea sin querer, él me lastimó y aunque me joda admitirlo, sigue doliendo.

—Ese no es tu asunto, Jake.

—Por supuesto que sí, somos amigos, todos y es incómodo que ustedes estén en plan novios peleados —comenta tamborileando el volante del auto con sus dedos—. Hoy iremos a Nova, y vendrás con nosotros.

—Es mi fin de semana libre de trabajar en Nova, lo último que quiero es ir…

—Jacel—Detiene el coche en un semaforo y aprovecha para mirarme con seriedad, algo que me toma desprevenido, él no es de los que se toma nada en serio—, puede que creas que no me doy cuenta de algunas cosas que suceden contigo, pero no es así, desde que nos conocemos he sabido que no la has tenido fácil, que has pasado mucha mierda, y es eso lo que te impide confiar completamente en nosotros.

—Jake, dejemos está conversación…

—No, vete a la mierda con esa maldita petición, Jacel —Elevo mis cejas ante su ceño fruncido y tono un tanto irritado—. Escúchame, es complejo confiar en las personas, lo sé, pero no puedes vivir la vida entera desconfiando de los que estamos a tu alrededor, somos humanos y vamos a cagarla en ocasiones, pero no por eso vas a sacarnos de tu vida sin darnos la oportunidad de al menos arreglar las cosas.

«Jerome ha estado intentando cortar con su novia hace semanas, pero no sabe como hacerlo, eres el único de sus amigos que no conoce a Julia, ¿por qué? Porque Jero es muy posesivo contigo, eres como un jodido tesoro para él, Jacel, no quiere que la intensa de su novia te moleste porque te conoce, sabe que no soportas a las chicas así.

No se me ocurre que decir y por eso me limito a morder el interior de mis mejillas, es un tic que tengo cuando me siento nervioso y confundido.

—¿Jacel?

—Hablaré con él —Es todo lo que digo, y eso parece ponerlo de buen humor ya que sonríe al tiempo que se pone en marcha nuevamente.

Manejar las emociones es complejo para mí, y aún estoy en un limbo de desconfianza constante, pero no quiero que este cambio de look venga solo.

¿Tengo miedo?

No, no tengo miedo, estoy aterrado.

Umbrablack.

JACEL© [La forma en la que lates] #1 LGBT Donde viven las historias. Descúbrelo ahora