JACEL© [La forma en la que lates] #1 LGBT

17: «Roommate»

En este momento de adolescencia las cosas pueden volverse eternas o completamente efímeras-Umbra.

JAKE.

Me duele el cuerpo. Anoche Jacel se pasó con su pasión. Estuvimos casi toda la noche disfrutando, si no fuera porque somos humanos y nos cansamos, juro que nos habríamos quedado hasta el amanecer. Sonrío y levanto mi cabeza de sobre mis brazos, observo a mi alrededor y no veo a nadie en el aula.

Hoy es viernes, tengo un trabajo en grupo con nada más y nada menos que Joshiel, el chico que básicamente, me obligó a entrar al club de natación. Aunque debo agradecerle, mi resistencia se volvió buena, estoy construyendo un cuerpo de nadador y me llevo bien con los chicos del club, claro, no somos amigos, pero tenemos buen trato.

Tengo en claro que ellos tenían el pensamiento de que no era más que un chico problemático irresponsable que no duraría demasiado, pero sigo ahí y fui borrando de a poco esos pensamientos.

—Muévete —Giro hacia la puerta del curso. Ahí está el pelinegro con sus lentes enormes—. Lo único bueno de esto es que no tengo que ir en bus.

—Querido Josh, te ves tan adorable como siempre —digo con una sonrisa perezosa.

—No voy a perder el tiempo, vamos.

Él es el primero en marcharse, unos segundos después me encuentro saliendo también. Mis amigos deben estar en sus asuntos. Jerome, Javier y Jhonell no necesitan asistir a clubes ya que tienen las mejores notas del instituto, y no son problemáticos como Jacel y yo. Y no es que nosotros disfrutemos de los problemas, al menos no de todos, es simplemente que somos muy subestimados por los idiotas.

Llego al estacionamiento y me detengo al notar a Jacel, viene cargando algunas cajas con cara de pocos amigos, detrás de él camina un sonrojado chico, Helleth, el hermano menor de nuestro difunto amigo y hermano.

Cada vez que veo a ese niño no puedo evitar pensar en Hallory, lo echo de menos, demasiado.

Suspiro y formo una sonrisa caminando hacia ellos, el de ojos claros se detiene al verme, pero el de ojos verdes no por lo que termina chocando con la espalda de Jacel.

—P-Perdón —dice dando un paso atrás.

—Ah —suspira el de ojos grises, pero ignora al menor y se centra en mí—. ¿Te vas? Pensé que tenías club.

Es agradable. En serio, es muy agradable que nuestro "chico malo" se esté volviendo más hablador y que se interese por los asuntos de los demás. Antes solo me habría mirado con molestia y seguido su camino, y todo comenzó desde que aceptó entrar al club.

—Tiene un trabajo conmigo, y ya vamos tarde —dice Joshiel apareciendo y tomándome por la muñeca—. Adiós.

Llegamos hasta mi auto, apenas le quito el seguro Joshiel se sube de copiloto y se coloca el cinturón, libero una risa y niego al tiempo que me subo también.