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Pov: 1ra persona: ____

Me pidieron que me quedara la noche en la cabaña, acepté y comencé a contarles todo lo que me había pasado, el como Bill se había acercado a mí, cómo descubrí mis poderes y el como el me ayudó a controlarlos, luego les dije que quería saber más sobre estos, y que no me molestaría que me hicieran investigaciones.

– Creo que podrías venir específicamente a eso 2 veces a la semana – habló Stanford – necesitamos resultados lo antes posible.

– No me molesta eso, aunque tendré que llegar escondida, si me ven por acá le darán mala fama a la cabaña, no quiero que sufran más por mi culpa – bajé la cabeza y Dipper me tomó la mano.

– Fuiste engañada ____ – Yo negué con la cabeza.

– Yo sabía lo que era, yo no fui engañada, solo pensaba que... Si entendería – suspiré – tal vez quería convertirme en su arma, y haría que lo defendiera de cualquier cosa –

– ____, eres de la familia, puedes contarnos cualquier cosa, nosotros te hemos hablado de tantas situaciones imposibles, y no nos juzgaste, nosotros no lo haremos contigo – sonreí.

– Creo que tendré que venir mucho más seguido, mi "padre" cree que soy un monstruo – yo los miré – no quiero ser una, o quiero tratar de no serlo, sin saber las naturalezas de estos poderes –

– Creo que recibiste muchas emociones estos días, anda a dormir con los chicos, se está haciendo tarde – Dipper, Mabel y yo subimos a la habitación, Stanley junto a Stanford se quedaron charlando en la cocina.

Cuando llegamos arriba se nos ocurrió llamar a Soos, y en unas 2 horas le explicamos todo, hasta Melody se integró en la conversación, comentando que la próxima semana volverían a Gravity Falls, luego jugamos juegos de mesa, dónde hacía comentarios de cosas que pasaron en mi casa que no quería decir con los Pines adultos, claro que después de decir algo serio, terminaba la frase con una broma, no quería verlos preocupados, al menos más de lo que ya estaban. Durante el juego, sin darme cuenta, Dipper me tomó la mano, no la soltó el resto de la noche, hasta que yo me acosté con Mabel, y el en su propia cama.

Se apagaron las luces, yo me dí la vuelta mirando la cama del castaño, y el se dió la vuelta mirándome.

– Me alegra tenerte de vuelta, ____ – susurró Dipper, yo sonreí levemente.

– Gracias por todo, Dipper – suspiré – Te quiero – susurré.

– También te quiero – respondió, ambos nos quedamos mirando hasta que nos dormimos.




Al día siguiente estuve todo el día enseñándole los poderes a Ford, volé un poco e hice que el también volara, aunque me costó un poco ya que sigo viendo el tema de la fuerza.

– Es increíble ____, necesito que hagas una bola de energía para que pueda anotarlo – yo me acerqué a él y formé lo que me pidió en mi mano, sacó su cuaderno de notas y comenzó a anotar hasta los mínimos detalles.

Después de eso, me despedí de todos y caminé al bosque para llegar más rápido a mi casa, pero me detuve cuando ví el lugar donde me juntaba con Bill. Caminé hacia el río donde me consoló, me senté en el tronco y quedé viendo el agua por unos minutos. Luego caminé más a fondo, encontrándome una figura triangular.

– ¿Bill? – pregunté, sin respuesta, comencé a acercarme, noté un sombrero y comencé a correr, hasta que me dí cuenta que era una estatua – que estúpida, debí suponerlo – me agaché para ver la figura de cerca – ojalá te hubieras mantenido así – golpeé la roca con mi pie despacio y luego caminé a casa.

Al llegar ví que no estaba mi padre, así que caminé al cuarto de Robbie, que me abrió rápidamente.

– Hola ___ – se apoyó en la puerta, yo lo miré fijamente.

– Ahora si podemos conversar – sonreí, él por primera vez me imitó y se hizo a un lado.

– Pasa, ahora hay que hablar como hermanos – pasé adelante y cerró la puerta, donde por primera en mucho tiempo, hablamos relajados y con sinceridad.

No me dejes || Dipper Pines X TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora