Celos

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Pandilleros celosos: Ran, Rindou, Kakucho, Mikey

Pandilleros celosos: Ran, Rindou, Kakucho, Mikey

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Ran

¿Él? Pfff, jamás, jamás, obviamente eso no pasaría, porque tenía mucha confianza en ti y además, demasiado ego y confianza en si mismo.

Pero sabía que era real que últimamente, él solo estaba en la ciudad un par de días al mes y que de esos días a veces solo lograban verse un par de horas y eras muy linda y nunca te quejabas pero... ¿Qué tal si esa era una mala señal?, Lo había pensado alguna vez, pero por suerte había logrado sacarlo rápidamente de su mente.

Eso hasta que esa tarde, el viaje de negocios de Bonten concluyó antes de lo planeado y tuvieron que regresar para pensar una estrategia de negocios.
El chofer se detuvo a causa del semáforo y el tráfico de mediodía en una de las zonas exclusivas del centro de la ciudad y Sanzu se echó a reír, interrumpiendo sus pensamientos y poniéndole los pelos de punta "Yo que tú me tapaba los ojos".

Ran, se giró mirando en su dirección y te vio sentada con un chico rubio de ojos azules tomando un café.
Tardó un par de segundos en carburar, te veías jodidamente bonita, de hecho llevabas uno de los vestidos que más le gustaba que usaras... ¿Acaso estabas en una cita?

Recordó que había leído un mensaje tuyo de buenos días, pero no se había dado tiempo de contestarlo, (tampoco el de buenas noches), algo le habías mencionado acerca de que saldrías por un café con Fuyu, ¿Era un chico?, ¿Ese era un nombre de un chico?, ¿no mencionabas mucho a ese últimamente?, de pronto se sintió incómodo, pero hizo un esfuerzo por mantener su expresión neutra, no quería soportar las burlas de Sanzu todo el día en la oficina.

Sacó el celular lo más rápido que pudo para enviarte un mensaje antes de que cambiara el semáforo para poder ver tu expresión "bonito vestido".
Pero para su sorpresa y sintiendo una fuerte punzada en el estómago aunque tenías el teléfono al lado, no despegaste tus ojos del rubio.

Pero para su sorpresa y sintiendo una fuerte punzada en el estómago aunque tenías el teléfono al lado, no despegaste tus ojos del rubio

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Rindou
(Continuación de tenemos que terminar)

Koko se había encargado de vender el departamento compartido, afortunadamemte no le había tomado mas de un mes.
Pero tenía que revisar algunas cajas que la mudanza había dejado sin llevar al penthouse de su hermano, porque no correspondían a ninguna de las cosas que meticulosamente Rindou había clasificado como suyas.

Bad Habits - Tokio Revengers [One Shots 🔞]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora