Mira que lejos hemos llegado (LEVIHAN)

Capítulo 39

Después de la terapia le había encargado la tienda a Nayah diciendo que tenía un compromiso, le pareció ver una sonrisa traviesa en el rostro de la joven antes de irse pero prefirió ignorarlo.

Pasó varios minutos en la ducha antes de elegir el atuendo que usaría, la noche anterior había separado dos, pero se sentía indeciso, sacudió la cabeza eligiendo el que tenía más cerca, no entendía porqué se sentía nervioso, antes ya había salido a comer con amigos como Mike, Erwin, incluso Nanaba, Hange lo ponía nervioso por los sentimientos de por medio, pero apenas si estaba conociendo a Ava, volvió a sacudir la cabeza haciéndose la idea de que si se sentía así era porque esa sería la primera vez que iría a comer con alguien que no era de su entorno.

Se vistió rápido, acomodó el pañuelo de siempre en su cuello y se puso su perfume de siempre, cuando estaba por salir Onyankopon, Gabi y Falco entraron a la casa.

Como si no hubiera nada más interesante en el mundo los tres lo habían mirado de pies a cabeza.

— Quiten esas caras, parecen idiotas.

— Se ve apuesto señor.— Gabi se había acercado caminando a su alrededor.

— Tsk.— odiaba que su piel fuera tan pálida que no pudiera disimular el rubor en sus mejillas.

— ¿A dónde vas?— le preguntó Onyankopon.

— Tengo un compromiso con Ava.

Los tres se miraron entre ellos antes de empezar a reír, Levi sintió que los colores volvían a subir a su rostro con más fuerza, intentaron disimular la risa ante lo irritado que se veía el ex capitán, pero no pudieron, volviendo a soltar más carcajadas.

— ¿Qué es tan gracioso pedazo de imbéciles?

— Nada, Levi, que te diviertas en tu cita.— le dijo Onyankopon guiñandole un ojo.

— No es una cita.

— ¡¿QUÉ?!— las voces de los tres habían sonado demasiado fuertes.

Los tres habían hablado al unísono cambiando sus risas por una expresión de confusión por lo qué había dicho.

— ¿Qué piensan hacer?— preguntó su amigo con confusión.

— Cenar.

— Definitivamente es una cita.— Gabi lo había tomado de la mano.

— Ella ya dejó en claro que no lo es.

Si quisiera se hubiera reído de las caras que los otros pusieron, pero en lugar de eso solo dibujó una sonrisa burlona.

— Los veo más tarde.— dijo soltándose del agarre de la joven.

Salió dejándolos atrás, entró a la tienda de té, le iba a pedir a Nayah que cerrara cuando Onyankopon ingresó detrás de él.

— Levi olvidaste tu bastón.— se lo extendió.

— No creo necesitarlo, solo vamos a comer.— lo rechazó.— Nayah, cierra por mí por favor.

— ¿Tiene una cita?— Nayah había sonado sorprendida.

— No sé cuántas veces tengo que repetir que no es...

Se quedó callado en cuanto escuchó el sonido de la puerta y sus dos acompañantes se paralizaban como si hubieran visto un fantasma. Pensó en que esa había sido su reacción la primera vez que la vio, vaya ridículo se debe haber visto.

— Buenas noches.— esa era la "inconfundible" voz de su acompañante.

Volteó para devolver el saludo, pero solo pudo sentir como sus labios se separaban, ahí estaba Ava luciendo un vestido negro de mangas largas y cuello alto, ajustado a su cintura, siendo un poco más suelto en la parte de abajo, además se veía un poco más alta de lo que era, notó los tacones bajos que usaba. Había cubierto su rostro con una ligera capa de maquillaje, resaltando sus labios de un color vino.

— Si soy real, Levi tuvo la misma reacción la primera vez que nos vimos.— empezó a reír por la cara de los otros dos en el lugar.

— Es que tú...— Ony balbuceaba.

— Lo sé, tengo cierto parecido a una persona importante.— sacudió la cabeza.

— Cierto parecido no son las palabras que usaría.— le dijo con una sonrisa.

— Y tú cambia esa cara, ya me has visto antes y ya sé a quién me parezco.— se acercó a Levi viéndolo de pies a cabeza.— Por cierto luces apuesto.

Onyankopon le dio un codazo y ahí recién pudo reaccionar.

— y tú luces diferente.

Escuchó una carcajada de Nayah y Onyankopon lo veía como si hubiera dicho la peor cosa del mundo.

— Viniendo de ti eso es un cumplido, ¿nos vas a presentar?— movió la mano haciendo un saludo.

— Yo soy Onyankopon, ella es mi hermana Nayah, un placer.— ambos le extendieron la mano, ella se rió antes de tomar ambas.

— El placer es mío, mi nombre es Ava, soy proveedora de la cafetería y también ayudo a Levi con sus terapias.

— Es bueno ver que se llevan bien, es algo arisco y nadie lo soportaba.— le comentó el moreno en un tono divertido.

— Tsk, cállate idiota, vamonos antes de que pierdas la reservación.— había sujetado a Ava del brazo.

— Ah sí es cierto, bueno fue un gusto, espero verlos pronto.— se despidió ella de los hermanos.

— Te invitaré una taza de té.

— Hecho Ony.

Él le abrió la puerta del local para después abrirle la puerta de su auto, Ava tenía una sonrisa tonta y soltaba unas risitas ante sus acciones así que solo se limitaba a rodar el ojo.

Llegaron rápido al restaurante, no estaba tan lejos, desde afuera el aroma lo hizo pensar que se trataba de pasta, la había probado antes, no muchas veces pero el sabor era agradable, esperaba que fuera una buena velada.

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Oficialmente estoy libre de exámenes con un año más en la facultad aprobado, así que me voy a dedicar por completo a terminar esta historia, ya terno la idea final así que serán dos capítulos por semana.