The Rise of Adventure [#PGP2024]

Capítulo 9. Los primeros en llegar son los más orgullosos.

"¡Faltan dos horas antes de que acabe la primera etapa, aspirantes! Así que dense prisa y lleguen antes de la hora indicada"

Una voz salía de los cristales de cada uno de los aspirantes, era una voz conocida para ellos, pues se trataba de aquella idol aventurera, Stella Crimson, la cual se encontraba en la habitación de una mansión a las afueras del gran bosque; aquel lugar era el punto de llegada.

No estaba sola, pues se hallaba acompañada de dos siluetas, las cuales eran los encargados de la siguiente fase del examen. Una de ellas tenía una complexión delgada y se encontraba sentado en uno de los sillones de la habitación, eso mientras tomaba de un té.

-Vaya, vaya. Tal parece que quiere hacer que los jóvenes tengan una mayor rivalidad entre ellos, muy cruel a mi parecer señorita Crimson. Pero bueno, usted es la encargada de esta etapa.

Opinaba aquel hombre, el cual hablaba con un acento similar al español. Su atuendo parecía el de un mayordomo de la más alta clase, así mismo, un notable mostacho era lo más lo delataba.

-Usted siempre es muy cordial con sus respuestas, señor Mangentl, sin embargo, considero que es una forma muy gentil de decir "Deje de jugar a ser una diosa, señorita Crimson".

Comentaba con voz burlona la otra silueta. Esta se encontraba en el balcón, así mismo, sonreía de forma burlona ante sus dos colegas, los cuales simplemente observaron aquí comentario de su compañero.

-Bueno, tu lengua de víbora no puede mantenerse callada. ¿Quieres acaso que te de una paliza como en los viejos tiempos, Casca?

Preguntaba la idol al sujeto que decidió burlarse de ella anteriormente, sin embargo, este último solamente comenzó a reír. Su risa era un tanto... peculiar, aunque bueno, la mayoría de personas de este mundo tiene una risa muy peculiar, así que, espero que no les resulte extraño.

-¡Kra kra kra kra! Oye, oye, enserio me haces reír Crimsi, aunque bueno, no quiero morir a manos de una belleza como tú.

-Ja, al menos eres sensato. Se ve que en las Espinas vengativas si tiene algo de respeto por los otros.

Respondía Stella ante la respuesta que dio Casca.

-Digo lo mismo de los miembros de ese gremio acosador, ¿Cómo se llamaba?

Casca, tras poner su mano en la barbilla de forma burlona, termino respondiendo su misma pregunta.

-Ah, ya recordé, los Perseguidores.

Las miradas de ambos se cruzaron y de inmediato voltearon a otro lado. Había una historia muy larga con ellos dos, pero no termino en muy buenos términos, siendo más precisos, uno de ellos casi pierde un pulmón.

-Jóvenes, siempre tan alborotadores.

Decía al señor Mangentl, mientras seguía bebiendo su taza de té. Sin embargo, mientras comía una de las galletas que se encontraban en la misma mesa, donde había asentado su taza, este la dejo a medio comer y se levantó de inmediato. Tomo su bastón y su saco, el cual había dejado en uno de los percheros que estaban cerca de la puerta.

-Señorita, creo que acaban de llegar los primeros.

-Sí, puede sentirlo. Son siete en total, y uno de ellos tiene una gran fuerza en su Gendar.

Casca se acercó a la mesa, donde yacían las galletas que había estado comiendo el señor de buen porte. Sin embargo en lugar de tomar solamente una, este se llevó todo el plato e incluso agarro aquella galleta a medio comer que había dejado su compañero de trabajo.

-Bien, pues si ya comenzaran a venir los novatos, será mejor que vaya a mi área para prepararme, ya que... ¡Quiero hacerlo sufrir hasta que sus mentes decidan de forma sincera si quieren continuar o no!