Tuya Cuando Quieras

Capitulo 31: Debut

Han pasado dos días. Estamos volando hacia Kiev, Capital de Ucrania. Mikhail ha insistido en que me traslade en su jet privado. Para darle el gusto no me he opuesto. John esta frente a mi y está metido en el móvil. Cansada del silencio me cruzo de brazos

— John, ¿Pasa algo?

Levanta la mirada con seriedad

— No, en realidad no. ¿Que habría de pasar?

—Te noto algo seco y distante

Me mira, me mira y finalmente responde

— Estoy bien Megan

Me monto en mi burra, y cuando sucede eso no hay quien me baje de ella hasta  conseguir lo que quiero.

— Dime, ¿Es por el nombre que escogido para mi disco?

Su mandíbula se tensa, se tensa por completo y me responde con voz fría y cortante.

— No es el nombre del disco ni mucho menos. Es que no te das cuenta, pero antes de que ese ruso entrara a tu vida, eras una mujer fuerte y decidida. Era de admirarse tu coraje y carácter.—Resopla— ¿Ahora? Eres el títere de Mikhail Ivanov. Haces lo que a él le place. Te controla, te usa para su beneficio y no te das cuenta de nada. ¡De nada! La Megan decidida y fuerte se ha esfumado con ese tío a tu lado.

Ceñuda respondo

— John, sigo siendo la misma. No soy el títere de Mikhail. Jamás lo sería de nadie. Pero tal vez no me entiendas, hay que amar para estar en mis zapatos.

Dice que si con la cabeza

— Tienes toda la razón Megan, hay que amar para entenderte. Y te entiendo, lo que no entiendo es como puedes vivir siendo la sombra de Ivanov. Duele..., duele amar y ver que ese amor se aleja de ti cada vez mas.

Me sonrojo y bajo la mirada. Es incomodisimo estar frente a él y no poder corresponder lo que ha declarado mas de una vez sentir por mi.

— Pensé que lo habías superado

— Una cosa es aceptar que preferiste en tu vida a un gilipollas con pasta, y otra muy distinta es superarlo. No voy a mentirte, sigo enamorado de ti, aunque eso signifique vivir toda una vida imaginando lo que pudo ser y no fue.

Decido no contestar. Siento que las cosas sean así. Siento que no pueda amarlo y que mi corazón se haya enamorado de Mikhail. Sin mas que decir me recuesto en la butaca y cierro los ojos, quiero dormir.

****

— Puede dejarlas por allá — Le digo al botones del hotel respecto a las maletas.

Me tumbo en la cama y suelto un suspiro exhausto. Son las diez de la noche, y no tengo nada de sueño. Agarro el móvil y le marco a Mikhail sin pensarlo

— Hola nena — Su voz me derrite de solo escucharla

— ¡Hola! ¿Estas ocupado?

— Para ti nunca estoy ocupado cariño. Dime, ¿Como llegaste?

Sonrio

— Eh pues supongo que bien. John me ha traído a un hotel muy lindo y finolis. Pero sabes, me hubiera gustado que estuvieras aquí en mi cama haciéndome compañía

Escucho su respiración y seguido responde con esa voz ronca que me pone la piel de gallina.

— Megan, serán dos días en los que no te tocaré, ¿Sabes lo que eso significa para mí? ¿Podrías evitar esos comentarios?

Rio traviesa

— De solo pensarlo deseo estar en Rusia cuanto antes. Solo serán unas pequeñas cuarenta y ocho horas. No será mucha tu abstinencia