Capítulo 2: La Elección

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- Ya deja ese libro.- dijo Eddie mientras lanzaba unos dardos a la diana que se encontraba en una de las paredes del estudio.

- Ya voy, solo que termine de leerlo.- contesté sin despegar mi vista del libro.

- ¡Pero si te lo has leído más de 100 veces!- exclamó irónico.

- Y las 100 veces es igual de interesante.- respondí con seguridad. -Sabes que amo todo lo que tenga que ver con los titanes y sus habilidades....¿sabías que el titán colosal a pesar de ser el más grande de todos es al mismo tiempo el más lento debido a su gran tamaño y a que gasta mucha energía?, ¿o que el titán carguero es de los pocos que permite que su portador esté transformado por más de un mes?

- No, no lo sabía y ni me lo recuerdes que cada vez que te oigo hablar sobre cada una de las habilidades de los titanes, recuerdo las aburridas clases de historia que nos obligaba a tomar la abuela.- comentó Eddie mientras fingía sufrimiento y yo soltaba una carcajada.

- Pues yo las recuerdo con mucho cariño, es impresionante saber toda la historia de los titanes, del antiguo Imperio Eldiano y de la guerra titán en general.

- Si tú lo dices.....¿y ahora de qué titán estás leyendo?

- Del acorazado, o el escudo de Marley como le dicen. Creo que es el titán que más similitudes tiene con el púas: ambos utilizan su coraza y púas para protegerse de los ataques enemigos.

- Ya veo.....¿no fue ese titán junto con otros tres los que mandaron a la Isla de los demonios para recuperar al fundador?

- Sí, hace tres años junto con el colosal, el hembra y el mandíbula, y no les digas demonios a los de la isla, es muy triste que le Rey Fritz haya borrado sus memorias y ahora estén pagando por los pecados de sus ancentros.

- Siento mucho interrumpir preciosos pero ya casi es la hora de la cena, la abuela requiere de nuestra presencia.- dijo Seth asomándose por la puerta que estaba medio abierta.

Sentí muchos nervios, finalmente había llegado el momento de la elección, podrían pasar dos cosas: o ser la elegida para portar el titán o no.

- Vamos en un momento.- contestó Eddie mientras dejaba de lado los dardos en el escritorio.

Yo dejé mi libro en el sofá mientras respiraba y exhalaba una y otra vez para evitar que se me bajara la presión por tantas emociones.

- Oye, ¿estás bien?- preguntó Eddie mientras me miraba un poco preocupado.

-Sí sí, solo estoy algo nerviosa....... es decir estoy feliz que haya llegado hasta este punto pero, ya sabes, la abuela elegirá a Adriana por ser su favorita....- dije desanimada.

- Momento prima, recuerda que tú eres la favorita de León para heredar al titán y lo tienes todo para hacerlo: resistencia, agilidad, buena puntería, inteligencia y a pesar de que tu fuerza física no es la más extraordinaria a diferencia de la de Adriana, tampoco eres una flacucha, eres de las guardianes más fuertes de la familia....¡y claro! Tu manejo con las espadas es impresionante.- contestó Eddie con toda seguridad para animarme.

- Tienes razón pero al final la última palabra la tiene la abuela, además de que tú eres mucho mejor en puntería que yo.- respondí con una ligera sonrisa.

- Bueno bueno, eso sí.- contestó y le dí un ligero golpe en el hombro. - ¡En lo de que soy mejor en la puntería! pero tú tienes más probabilidades de heredarlo.... eres Irene Artz y la Irene Artz que yo conozco es una chica que enfrenta lo que sea con la cabeza bien en alto. Así que ahora vamos a ese comedor para saber el destino que te depara el futuro. 

Guardiana de mi corazón - Reiner Braun x LectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora