Guardiana de mi corazón - Reiner Braun x Lectora

Capítulo 14: Recuerdos de la niñez de un guerrero

Nota: El fanart que utilice como portada del capítulo no me pertenece, creditos al artista Anderain @Raven_Segal de Twitter. 

Nota 2: Este capítulo tiene ligeras menciones de violencia por lo que se recomienda discreción. 

Nota 3: Esta capítulo es largo, apróximadamente de 3,000 palabras o más. Disfrútalo mucho! :)

El día siguió su curso normal: desayuno de 6 am a 7 am, calentamiento de 7:30 am a 8 am, entrenamiento de 8 am a 2 pm con sus respectivos descansos y colaciones, comida de 2 pm a 4 pm, entrenamiento libre de 4 pm a 6 pm, tiempo libre de 6 pm a 7 pm, cena de 7 pm a 8 pm y a partir de la última hora cada quien debía irse a sus habitaciones para que las luces se apagaran a las 9 pm. Así era todo los días desde que llegamos aquí. 

Durante todo el día estuve observando a Reiner: se le veía un poco más tranquilo aunque estaba muy callado y pensativo, además de que no comió bien como es de costumbre. Aquello me preocupaba mucho debido a que podía enfermar en un futuro si seguía así......

Eran las 9:30 pm y me encontraba guardando unas cosas en mi morral para ir a la habitación de Reiner, sentí que tal vez le gustaría bordar así que tomé unas telas, agujas e hilos para enseñárselos después. Esperé a que fueran las 10 pm para salir de mi habitación y dirigirme a la del acorozado por lo que, mientras tanto, cepillaba mi cabello y lo sujetaba con un broche que León me había regalado cuando iba a heredar al titán púas hace ya tres años. 

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10 pm

Reiner's POV

Me encontraba arreglando lo último de mi habitación ya que Irene llegaría en cualquier momento, tenía un par de velas encendidas para no estar en completa oscuridad y las cortinas cerradas para que, quien hiciera guardía ese día, no se diera cuenta de que estábamos despiertos; tenía que tomar todas las precauciones para no meter a la castaña en problemas.

Posteriormente la puerta sonó y rápidamente fui a abrirla revelando la figura de Irene en la entrada: traía puesta una camiseta café junto con un sweater del mismo tono y unos pantalones ligeros de color gris, su cabello estaba suelto pero uno de sus mechones estaba sujetado con un broche dorado, y traía una pequeño morral azul marino en la espalda. 

- Hola Reiner.- comentó en voz baja Irene mientras me saludaba con su mano. 

- Hola Irene, pasa.- dije tímidamente mientras me hacía a un lado para que entrara la portadora del titán púas. 

 - Muchas gracias.- 

- Ordené lo mejor que pude mi habitación, para que no se viera tan mal.- expresé mientras cerraba la puerta tras de mi. 

- Oh no te preocupes Reiner, se ve muy bien tu cuarto.- respondió Irene con una de sus bellas sonrisas. 

- Ponte cómoda, iré a tomar un vaso con agua. 

Irene asintió y pude ver como se sentaba en la cama mientras yo me ponía de espaldas para servirme un poco de agua en el vaso que tenía en la mesa de noche, tomé un poco y volví a dejarlo donde estaba. Cuando regresé mi mirada hacia la cama Irene se había quitado los zapatos y se encontraba con las piernas cruzadas mientras jugaba con su manos, reí ligeramente al verla tan concentrada en estas. 

Con tranquilidad me senté en la cama ocasionando que la atención de Irene se centrara en mi, mirándome con esos ojos hechizantes que tenía. 

- ¿Cómo te fue hoy después de la comida? - pregunté.